Por Jorge Bruce
Mucho se habla en estos días, y con razón, de la creciente inseguridad en el país. Sobre todo, de la impotencia del Gobierno para combatirla. Pero la palabra “inseguridad” tiene diversas acepciones y, por lo tanto, diversas causas. Los psicoanalistas lo sabemos bien. Una persona se puede sentir insegura transitando por una zona considerada peligrosa para su integridad material. O cuando tiene una cita con su jefe en el trabajo. O cuando está en presencia de alguien que le atrae, sin saber si es correspondida.