Editorial de El Comercio de hoy
En estos días en que la democracia liberal enfrenta momentos difíciles producto de los desbalances de la crisis económica, la caída de la cortina de hierro recuerda que la historia es cíclica, que los fenómenos sociales y políticos más relevantes son fruto de largos procesos y que el reto principal siempre será respetar la voluntad y los derechos de los individuos y de los pueblos.