“La mayor parte de los pueblos indígenas en Brasil no se está beneficiando del impresionante progreso económico del país, y está siendo retenida en la pobreza por la discriminación e indiferencia, expulsada de sus tierras en la trampa del trabajo forzado”, criticó.
Con relación a los afrodecendientes, la comisaria recordó que la violencia es una de las principales causas de muerte en ese grupo social, debido al uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes policiales y de la existencia de milicias ilegales.
“Hasta que eso no cambie, la situación va a perjudicar el progreso de Brasil en muchos otros frentes”, consideró.
La funcionaria hizo estas declaraciones durante su visita al país sudamericano y retorna este viernes a Ginebra, Suiza, después de haber recorrido Río de Janeiro, Salvador de Bahía y Brasilia, durante la cual firmó un compromiso con el Gobierno brasilero sobre protección de los derechos humanos.
Fuente: Servindi