1. Un día de cortarse el pelo Y decidí nunca más cortarme el pelo Cuando vi a aquel hombre grande Llorar como un niño en un rincón. Uno de esos días infaustos, cuando después de diez años y diez días… Continua leyendo →
El sol en conjunción con la arena es cruel. Se enseña en la piel, en el alma. El viento en conjunción con la arena es cruel. Se enseña en la piel, en el alma. Por esos sus miradas son duras,… Continua leyendo →
Este post va para todos aquellos que no tenemos pareja pues o la perdimos o cambiamos de pareja continuamente porque “no hay suerte, señora”. Hoy miré fotos lindas, lindas parejas felices frente a la cámara de fotos; vi que en… Continua leyendo →
Me gustan los hombres de mirada tierna, de gestos sencillos y maneras delicadas. Me gustan las mujeres de mirada decidida, y dispuestas a darle un puñetazo a cualquiera que haga daño a sus hijos. Me gustan los hombres que cocinan… Continua leyendo →
Dedicado a todas aquellas que tuvieron por suerte pasar por mi vida, o que yo me cruce en las suyas. En su defensa, aunque tardía, va este post. Mi madre, así mi hermano y yo hubiésemos sido asesinos de masas,… Continua leyendo →
Este post va dedicado a todos los monopomposos que dilentantes van por el mundo, con sus oscuros discursos que ni ellos mismo entienden, asentando las testas en señal de benevolencia. Desde que tuve uso de razón sexual, busqué rodearme siempre… Continua leyendo →
A Ariadna la Maga por contarme esta bella historia, por permitirle a esta loca entrar a su lar. Este post va para ellos y ellas. Cuentan las magas que las águilas de cabeza blanca cuando llegan a los cuarenta, tienen… Continua leyendo →
Vuelvo después de días de marasmo emocional a escribir en este blog. Ya no tenía las ganas y ni la energía suficiente pues me dolió en el alma que a mi niño no le haya gustado lo que preparé con… Continua leyendo →
El último post ha sido modificado. No le gustó a mi hijo, y fue ideado para él. Guille ha cambiado y eso es bueno para ambos. He retirado ese post con la idea de rehacerlo, pero ahora quiero que sea… Continua leyendo →
Soledad era una mujer trigueña, de grandes y largos ojos tristes, de largos cabellos negros hasta allí, de hablar delicado y tono bajo. No hacía mucho para mostrarse, pero era vista sin proponérselo. Trabajaba como asistenta en un instituto cuando… Continua leyendo →
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