Servindi, 25 de agosto de 2009.- La política del “perro del hortelano” que impulsa el gobierno de Alan García no es tan original como se piensa y en realidad corresponde a la denominada “legislación para el despeje” que pretende mercantilizar los territorios indígenas, afirmó la especialista Frederica Barclay.
Se trata de una tendencia mundial que mediante la reforma de leyes forestales busca forzar a las comunidades indígenas a entrar en esquemas de arrendamiento de sus tierras a muy largo plazo, afirmó.
La razón “es que en todas partes los capitales nacionales y trasnacionales presionan para obtener amplios espacios para establecer plantaciones masivas de para la producción de agrocombustibles (tanto en América como en el Sudeste Asiático)” afirmó Barclay.
Tales aseveraciones fueron expuestas durante la presentación del anuario El Mundo Indígena 2009, realizado en Lima el 04 de agosto en el marco de la Feria Internacional del Libro.