El Congreso Interregional de Comunidades Nativas de Ayacucho, Junín, Cusco, desarrollado en la comunidad nativa de Gran Shinongari, distrito de Pichari, el pasado 18 y 19 de mayo, fue el escenario de concentración de más de 700 representantes de poblaciones nativas del VRAE, quienes demandaron a las autoridades trabajar por la inclusión social de estos pueblos que se encuentran marginados de la atención del Estado.

Rodrigo Vargas, coordinador general del Comité Distrital de Comunidades Nativas de Pichari, dijo que la exclusión se evidencia desde la barrera idiomática, porque los Ashaninkas, Mashigengas y otras comunidades nativas no entienden el castellano y el quechua, por ello “los funcionarios de nivel nacional nos hacen a un lado porque no sabemos el idioma castellano”, expresó.

Demandas

Las comunidades nativas demandaron que los productos de su zona tengan acceso a los mercados. Para ello, solicitaron mayor educación y orientación. Asimismo pidieron que se implementen los programas sociales en sus zonas para poder afiliarse a ellos.

El alcalde del distrito cusqueño de Pichari, Edilberto Gómez, dijo que como parte de los principales acuerdos arribados en este congreso, está la demanda de atención en Salud y Educación, con una presencia permanente del Estado en las comunidades nativas del VRAE, “porque la única manera de enfrentar al narcotráfico y el terrorismo es impulsando el desarrollo integral de los pueblos originarios”, expresó.

Asimismo, una de las novedades de este congreso fue la presencia del director regional de INDECOPI, Hugo Rodríguez, quien informó sobre la protección y registro de conocimientos colectivos y tradicionales nativos, “que están vinculados con el conocimiento de los valores curativos de las plantas u otras propiedades”.

Finalmente, las comunidades nativas criticaron la falta de compromisos de los congresistas de sus regiones para con ellos, que, a pesar de haber sido invitados no asistieron al evento.