En la reunión se menciona como tales grupos radicales al partido Patria Roja, a obispos católicos, a organizaciones no gubernamentales (ONG), a los ronderos y a los narcotraficantes.
Las empresas que participaron de la reunión fueron Antamina, Newmont (Minera Yanacocha), Minera Quellaveco, Barrick y BHP Billiton (mina Tintaya).
En el cable se evidencia que las empresas mineras arriban a acuerdos con las embajadas para negociar con el Estado peruano temas relacionados con la seguridad y el “clima de inversión”.
En tal sentido, los representantes de las empresas solicitan que el Estado modifique su legislación a fin de saltar los escollos que le impidan actuar con libertad.
Fuente: Servindi
Según el cable, el director ejecutivo de Antamina solicitó que los profesores –se dice ligados a Patria Roja y al Sindicato de profesores SUTEP- sean rotados en las comunidades que se consideran conflictivas.
Además, sugirió que las embajadas insten a la Iglesia Católica para que roten a sus obispos de dichas zonas.
Para Felipe Cantuarias, vicepresidente Comercial y de Asuntos Corporativos de Minera Antamina, son los políticos locales los que promueven la violencia y tienen vínculos con ronderos y los cultivadores de coca.
Además, el representante de la minera Quellaveco culpa a las organizaciones no gubernamentales internacionales Oxfam América y Amigos de la Tierra, de fomentar el rechazo a la minería y de “explotar los bajos niveles de educación” de las zonas rurales del Perú.