Por Martín Khor
El ministro de Ambiente de India, Jairam Ramesh, dijo que un acuerdo sobre cLima será inaceptable para los países en desarrollo si no parte de la distribución equitativa de la atmosféra entre todos los países.
Ramesh desarrolló el concepto de “presupuesto de carbono”: hay que determinar cuánto carbono agregaron a la atmósfera los diversos países a través de los años, cuánto carbono puede absorber la atmósfera todavía antes de que aparezcan consecuencias desastrosas para la Tierra y cómo debería asignarse este “espacio de carbono” restante entre los diversos países.
En la sesión de apertura del taller, apoyé la necesidad de desarrollar esta metodología del presupuesto de carbono. Desde 1850 a la fecha los países desarrollados emitieron cientos de miles de millones de toneladas de dióxido de carbono y se excedieron así en el uso de su cuota justa de carbono, mientras que la contribución de los países en desarrollo estuvo muy por debajo del porcentaje que les hubiera correspondido en una asignación equitativa de cuotas de emisión.
Ahora que sabemos que hay un límite a cuánto más se puede emitir sin asfixiarnos todos, es necesario asignar los derechos y obligaciones en materia de carbono de los países, y en particular determinar cuál es la cuota justa para los países desarrollados y en desarrollo entre 2010 y 2050. Si los primeros no cumplen lo que objetivamente deberían hacer, esta omisión debería ser pagada como su contribución a un fondo de asistencia a los países en desarrollo, que les permita tomar las medidas necesarias para mitigar el cambio climático. La equidad tiene dos significados: ambiental y en el desarrollo. Los países del Sur deben tener un espacio equitativo en los recursos atmosféricos de manera que con el escaso “espacio de carbono” que les dejen, todavía puedan alcanzar un desarrollo económico adecuado.
Fuente: Diario La Primera