Por: Cecilia Maugeri
Muchas veces la academia no repara en las producciones contemporáneas, ya que analizar y/o criticar géneros en formación implica necesariamente un riesgo y una toma de posición. Si los docentes de literatura podemos hablar largo y tendido acerca de Borges y Arlt y los grupos de Florida y Boedo, ¿no podríamos hablar también acerca de la obra de autores contemporáneos como Hernán Casciari? Tomo este ejemplo porque Casciari es considerado el creador de lo que puede considerarse un nuevo género literario, la blognovela, y ha abierto el debate acerca de la literatura on-line.
Tanteando el terreno
¿Cómo aparece la novela en el blog? Desde ya, la blognovela se caracteriza por la inmediatez entre la escritura y la recepción: se construye por entregas, al igual que muchas novelas que en un primer momento fueron publicadas en periódicos. La literatura por entregas y el folletín son un escaño en el camino de la profesionalización de los escritores en la literatura mundial y en la Argentina .
Podemos pensar que, si hasta el siglo XX los diarios fueron un primer paso para la publicación de las novelas en formato libro, a partir del siglo XXI, las publicaciones en Internet podrían estar cumpliendo esa misma función. Tengamos en cuenta que ambos medios, el periódico y el blog, apuntan a un público masivo que puede acceder al texto más fácil y rápidamente que por medio del libro édito. Además, al dar a conocer la obra en proceso, el autor tiene la posibilidad de tomar una devolución del lector. De esta manera, el texto se vuelve más “participativo.
La publicación por entregas implica un formato especial que antes estaba organizado en “capítulos”, ahora en “posts”. ¿Se trata solamente de un cambio de nomenclatura? Veamos: tanto el lector de los folletines como el de la blognovela pueden llegar a la obra en una entrega cualquiera y, por lo tanto, “agarrar la novela empezada”. Ésta es la razón por la cual en cada entrega se actualiza el punto en el que se encuentra la narración, cuáles son los personajes que están actuando en ese momento, qué pasó en el pasado inmediato, etc. La diferencia entre el folletín y la blognovela radica en la forma de dicha actualización. Mientras que en el folletín encontramos una síntesis de los hechos y descripciones de los personajes, las blognovelas resuelven la entrada de esta información con hipervínculos en los nombres de los personajes. De esta manera, estamos a sólo un clic de aparecer en una ventana emergente con imágenes y textos que explican la inserción del personaje en la trama.
A grandes rasgos, la diferencia fundamental entre ambos géneros es el soporte. La novedad consiste, entonces, en plantear las posibilidades que aporta el formato blog a la narrativa contemporánea.
Un webmundo verosímil
La primera estrategia para crear un mundo verosímil en la blognovela es la emulación de un weblog personal. Si paseamos por el weblog de Mirta Bertotti (protagonista y narradora de la blognovela Más respeto, que soy tu madre , de Hernán Casciari), nos encontramos con el diario íntimo de Mirta, pero dividido en capítulos, con lo cual se rompe la ilusión de estar asistiendo a un blog personal. En El diario de Letizia Ortiz , ya no vemos capítulos sino posts y aparece una novedad: Letizia comenta:
“Soy muy lectora. Los libros de historia me apasionan. En Internet, me distiendo con Los Bertotti, que son casi una familia real. Filíp consulta a Juan Dámaso, vidente para saber cuándo nacerá nuestro primogénito”.
De esta manera, Hernán Casciari construye una red de intertextualidades con su propia obra, introduciendo dos de sus blognovelas como material de lectura de Letizia. El caso de El blog de Saúl Klikowsky es más extremo: se trata de un blog personal del protagonista de un programa de TV, que incluye links a los blogs de sus amigos. Este tipo de hipervínculo, entendido como referencias a otras obras y a otros personajes del mismo autor, no es algo que haya inventado Casciari, sino que es una característica de la literatura en cualquier formato. La novedad del blog como soporte para la narrativa consiste en la facilidad para tender una red de personajes verosímiles que existen en la virtualidad de la web. Esta estructura resulta muy favorable para la temática que tratan las blognovelas: la vida privada de gente “común”. Vale aclarar, entonces, que la verosimilitud se encuentra estrechamente relacionada con el concepto de reality show y, en este sentido, la blognovela toma muchas característcias de los programas de TV.
La gran ventaja del tendido de redes de los blogs es la relación inmediata con el público: los lectores pueden mandar mails a los personajes de las novelas. Si pensamos en la obra de Casciari, la publicación por Internet no invalidó la opción del libro, sino que le ofreció un soporte nuevo, aprovechable tanto desde el punto de vista lingüístico, a la hora de “hipervincular” los discursos, como económico, al masificar la circulación del texto. La blognovela profundiza la escritura “en red” en dos niveles: vinculando personajes en la trama de la novela y relacionando al autor directamente (o disfrazado de algún personaje) con el lector.
El autor-personaje
Hernán Casciari también tiene su propia página, Orsai , donde se presenta en tercera persona como “el autor”. En la página conviven un currículum de escritor reconocido por el público y las editoriales (sus blognovelas salieron publicadas por Sudamericana y Plaza & Janés), que además ha recibido varios premios, como el 1º Premio de Novela en la Bienal de Arte de Buenos Aires (1991), con la novela Subir de espaldas la vida, y el premio Juan Rulfo (París, 1998), con el relato ‘Ropa sucia’. Dicho currículum convive con diversas secciones de la página como “Textos breves” o “Pequeños artículos (que nunca exceden las 300 palabras) en el que el autor discurre sobre cosas que no le importan a nadie. La sección puede llamarse también sendas boludeces”, o como “Historias”, que son “Anécdotas, cuentos y relatos que tienen poco que ver con la verdad, pero que se disfrazan con ella para despistar. También tiene poco de literatura. Y poco de gramática. De lo demás, bastante”. ¿Todo esto también es un invento de Casciari? La respuesta es “no” si consideramos que Orsai es la construcción de la poética del escritor, el texto donde el autor transmite su idea de literatura.
Borges escribió su autobiografía en inglés, construyendo una genealogía familiar y de filiación con otros escritores, y Arlt “escribía mal” y su corrector se veía obligado a marcarle sus agramaticalidades. Ambos construyeron una figura de escritor que circuló entre sus libros, en diarios y revistas. Hoy, la circulación pasa por otro lado. Casciari construye su figura en el contexto blogger y, sin embargo, la presentación en sociedad sigue siendo por medio de “el autor”. Borges tenía su dirección en Florida. Arlt fue radicado por la mayor parte de la crítica en Boedo. Sin embargo, Florida y Boedo no dejan de ser dos calles de Buenos Aires. Por su parte, Cascari encuentra su lugar de conformación como autor en un espacio virtual. Tal vez el caso de Rodolfo Fogwill resulta más cercano al de Casciari, ya que ambos resaltan la importancia del marketing para la construcción del autor-personaje. Sería interesante revisar, entonces, por qué la conformación de la identidad, si antes pasaba por una construcción literaria, centrada en la palabra y en la búsqueda de una poética propia, ahora se centra en la exibición de una imagen, también ficticia, que se conecta íntimamente con la cultura de los medios masivos de comunicación.
Lectoescritura: del blog al aula
¿Por qué puede resultar interesante abrir este debate en el aula? Cuando tratamos temas como los movimientos literarios, ¿no estamos hablando de redes, de escritores que se reunieron con una idea de literatura similar, con objetivos y proyectos comunes? ¿No hablamos de la circulación y la recepción de los textos, de revistas literarias, de cafés, tertulias, editoriales, medios? Hoy en día, los escritores se siguen reuniendo, pero para hablar de hoy debemos incluir un nuevo espacio que también tiende redes: la web. ¿Y qué pasa con el público adolescente y la web, dentro y fuera del aula? La profusión de blogs y flogs demuestran una gran necesidad de expresarse y tender redes. ¿Se pueden incorporar estas prácticas al aula? Los blogs no dejan de ser discursos y, como tales, pueden ser analizados en el aula desde una perspectiva lingüística. Leer y analizar una blognovela puede llevarnos a plantear cuestiones como: ¿pero esto es o no es literatura? ¿Está narrando o no? ¿Qué pasa con la inclusión de la imagen y el diseño? ¿Todo lo que el autor sube a Internet forma parte de su obra o no? ¿Las publicaciones en Internet tienen el mismo valor que el formato libro? ¿Cuál es el límite de la ficción y de la virtualidad?
Muchas de estas preguntas pueden ser planteadas también para analizar las obras de los escritores canónicos. Leer un texto de Casciari nos puede llevar a pensar cuestiones en Borges y en Arlt, ¿por qué no? El riesgo está en abrir el debate sobre un tema poco tratado, frente a un público adolescente que ya sabe mucho sobre ese tema y, por esa razón, tiene mucho que aportar. En la “era posmoderna”, las prácticas de lectura y escritura no son las mismas que antes. Es hora de investigarlas. Si creemos que la lectura y la escritura son fragmentarias, efímeras y pasatistas, perdemos la literatura. La ganancia está en tomar lo nuevo y transformarlo en una puerta para pensar, poner en cuestión y abrir el debate, en generar propuestas para seguir defendiendo la literatura.
Fuente: http://portal.educ.ar/debates/protagonistas/arte-cultura/blognovela-un-nuevo-genero-lit.php