Como toda ciudad, Lima está en constante crecimiento, y dentro de poco tiempo albergará a diez millones de personas. ¿Qué tan preparados estaremos para entonces? Pocos saben que una ciudad debe desarrollarse siguiendo un plan, y menos aún saben que nunca se trazó uno de ámbito regional. Henry Pease, comisionado de la comuna de Lima para elaborar el primer plan regional de desarrollo concertado de Lima (2012-2025), dice que su meta es presentar dicho documento en noviembre, con los aportes de 12 mil personas de Lima.
“Espero llegar a noviembre habiendo consultado, grabado y filmado a 12 mil personas”, reitera a diario16 tras remarcar que el objetivo de este trabajo no es solo establecer una brújula para un crecimiento ordenado de la ciudad que atienda sus principales problemas, sino lograr que dicho instrumento pueda ser consultado por todos desde la web (http://www.planlima. munlima.gob.pe/) para que puedan reclamar a sus autoridades el cumplimiento del mismo.
-¿Siempre hemos vivido de espaldas a los planes de Lima?
Ha sido variable. Algunas autoridades han tenido más respeto que otras. Hay mucha penetración del sector privado en las decisiones que son del Estado, pero hay que consultar a la ciudadanía, y esa práctica se ha perdido. Muchos apuestan por la participación, y ese es el sentido de que el plan se convierta en una brújula a la que podamos acceder entrando a Internet, que centremos la crítica en elementos programáticos y no solo en si hay obra o no.
-La actual gestión de Lima quiere mostrar un cambio en orden y transparencia, pero pocos lo advierten; muchos siguen extrañando a Luis Castañeda. ¿Nos cuesta aceptar un desarrollo que no solo sea concreto?
En una ciudad la obra siempre es importante, pero nadie come cemento; la educación no mejora con edificios, tampoco la salud. La convivencia pública es mucho más complicada que hacer una obra. Más aún en esta época, la mayor parte de las obras son del sector privado. La razón de ser del Estado no es la ejecución de obras, sino el gobernar, y eso es conducir ciudadanos, escuchar, concertar, dialogar, generar espacios donde juntos podamos hacer mejor las cosas.
LA VOZ DEL VECINO
El modo de trabajo es mediante la realización de mesas temáticas (crecimiento urbano, agua, saneamiento y vivienda; medio ambiente, riesgo y vulnerabilidad; economía, comercio, producción y servicios; espacios públicos, áreas verdes y recreación; seguridad ciudadana; movilidad, transporte y viabilidad; cultura y desarrollo; salud; educación; y pobreza) en las que se parte de un análisis de los técnicos para que la gente hable sobre ello y cuente sus problemas.
Ya se recogieron las opiniones de Lima Norte y Lima Sur este mes se está consultando en Lima Centro, y en agosto le tocará a Lima Este. En julio se tendrá cuatro encuentros metropolitanos que incluirán a universidades, empresarios, sindicatos y asociaciones. Y también habrá un certamen especial con los congresistas de Lima para que sepan qué pasa en su ciudad.
La ausencia de un plan concertado ha tenido varias consecuencias como la reducción de áreas verdes por habitante a dos metros cuadrados, cuando lo ideal es que sean ocho; o el incremento de la tuberculosis multidrogorresistente en las laderas de los cerros, donde existe alta tugurización. Pero las principales quejas de la población siempre son en transporte, seguridad y vivienda. Y en la falta de valores de quienes prestan servicios.
-Con este crecimiento vertical que experimenta Lima ahora, cada vez hay menos áreas verdes por habitante.
Hay proyectos de vivienda en Lurín que dicen “la reserva verde”, pero por la magnitud que tienen van a deshacer el área verde. Podrían estar en Ancón, donde no compiten, pero hay intereses. Pero, sobre todo, lo que no hay es la consulta a la ciudadanía. Gran parte de Carabayllo está siendo convertida en urbana y hay un proyecto enorme en Collique, donde el área reservada por persona es 0.67 metros cuadrados; es una locura. Ya tenemos distritos que no tienen un metro cuadrado de expansión, como Independencia o Surquillo.
-¿Por qué no se han seguido los planes de Lima?
Un plan como región no ha habido, pero sí un plan de Lima urbano. El cumplimiento del último plan urbano ha sido agraviado por acciones del gobierno nacional que actúa por su cuenta, que lo impone, y por alcaldes que sacan los pies del plato y, a veces, por la propia Municipalidad de Lima. Un plan vale si entra en el disco duro de cada ciudadano.