El Comercio
Editorial
El Tribunal Constitucional (TC) debe despejar cualquier duda y confirmar la merecida destitución de dos ex vocales supremos tan cuestionados y sobre los que pesan graves y consistentes denuncias, como Ramiro de Valdivia Cano y Vicente Walde Jáuregui.
El primero fue un magistrado del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) que se hipotecó a los oscuros designios de Vladimiro Montesinos en el régimen fujimontesinista. Por esa razón, hoy es procesado por el presunto delito de asociación ilícita para delinquir. Por su parte, Walde es un polémico juez que fue separado por grave inconducta funcional tras comprobarse, entre otras cosas, que emitió un fallo que violaba de cabo a rabo la institución de la cosa juzgada.
Pero sucede que estos dos letrados, pese a tan tremenda mácula en sus biografías, han activado una serie de recursos y aprovechado las grietas del sistema, para, a través de sendas acciones de amparo, tratar de traerse abajo las resoluciones del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) que en su momento determinaron su cese como vocales supremos.
Es por eso que hoy existe el riesgo de que sean reincorporados a sus antiguos puestos gracias, una vez más, a una estrategia que consistiría en mostrar las supuestas deficiencias de los procedimientos aplicados en su caso, aunque no pueden negar sus acciones.
Frente a esa desvergonzada pretensión, los miembros del Tribunal Constitucional están en la obligación de considerar tanto los asuntos procesales como los sustantivos para ratificar el alejamiento de estos magistrados. Evaluar el procedimiento es importante, pero no lo es menos el fondo de la causa.
Imagínense lo nefasto y frustrante que resultaría para la judicatura que dos personajes como De Valdivia y Walde recuperen sus asientos en la Sala Plena de la Corte Suprema. El TC tiene en sus manos un tema crucial para la justicia peruana y la seguridad jurídica.
EL TC DEBE SEÑALAR EL CAMINO EN LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCION, NO SE DEBE AMPARAR ESTAS SOLICITUDES DE REPOSICION DE ESTOS EX VOCALES TAN CUESTIONADOS Y QUE FUERON DESTITUIDOS DE ACUERDO A LEY.
SABEMOS DE LOS LOBYS QUE ESTAN REALIZANDO AMBOS PERSONAJES , PERO EL TC PUEDE Y DEBE FRENAR ESTA PRACTICA ABUSIVA DE LA INFLUENCIA EXTERNA, PARA FINALMENTE RESOLVER DE ACUERDO A LEY. EN SU CANCHA PUES ESTA EL PODER GIRTAR UN GOL CONTRA LA CORRUPCION