Estimados blogueros:
A propósito del famoso “paquete reactivador” propuesto por el gobierno, que ha sido aplaudido por tantos “comentaristas periodísticos”, me encontré con un interesante texto de Enrique Ortiz, que es ecólogo, en el Diario El Comercio del 01.07.2014, bajo el título “Los malos empresarios impiden el progreso”.
Hay importantes claves para el análisis de la parte ambiental del citado paquete, y además claves para posibles futuras políticas públicas en ese aspecto.
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Por: Enrique Ortiz
La satanización de las entidades ambientales oficiales les resulta positiva solo a quienes tiene rabo de paja. A los malos empresarios no les conviene la fiscalización de lo que hacen. Ellos son el obstáculo para el progreso del país y la sostenibilidad.
Realizaron una campaña sistemática para relajar las regulaciones y la institucionalidad ambiental, y lo lograron con el paquete “reactivador” presentado en días recientes por el Ejecutivo. Le toca al Congreso darle o no el pase.
El presidente del Instituto Peruano de Economía (IPE) señaló en una reciente entrevista que las regulaciones excesivas obstaculizan el progreso. ¿Esto es cierto?
Veamos. Un reporte sobre la extracción forestal en el Perú muestra que la mayor parte de la madera peruana comercializada internacionalmente tiene orígenes ilegales.
El estudio se basa en los reportes del Osinfor, organismo adscrito al Consejo de Ministros encargado de penalizar a malos madereros que incumplen los planes de manejo del bosque, requisito básico de una industria sostenible.
¿Es el Osinfor un obstáculo para el progreso? ¿Se debe restringir su rol y condonar las penalizaciones a los depredadores? ¿El progreso se mide en la cantidad de pies tablares extraídos?
La OEFA tiene un rol similar monitoreando el cumplimiento de las regulaciones ambientales, ya sea en la contaminación de los ríos o la depredación de los bosques, entre otros. Aplica, también, las multas a quienes no cumplen. ¿Es la OEFA el obstáculo para el progreso? NO.
Los malos empresarios lejos de proponer que se refuercen las capacidades de estas instituciones (celeridad, mejores criterios de acción, más técnicos, etc.) quieren que no cumplan con lo que deben hacer. ¿La excusa? Que estas instituciones impiden y espantan la inversión.
El Ministerio del Ambiente (Minam) es, así, el chivo expiatorio de la baja de los precios internacionales de los metales (uno de los motivos principales del estancamiento). Se quiere que creamos que las medidas “reactivadoras” acelerarán el crecimiento. De ello se aprovechan los sectores empresariales irresponsables.
Los malos empresarios manejan una agenda y lideran una campaña de desprestigio del sector ambiental. Ingenuamente los empresarios responsables mantienen un silencio que finalmente les resultará inconveniente.
Quizás las medidas aumenten la inversión, pero no es deseable la que se esconde detrás del paquete. Los buenos empresarios deben salir al frente a defender la transparencia y la institucionalidad ambiental, en beneficio de sus inversiones y la paz social. Ojalá los buenos empresarios y el Congreso tomen conciencia de la agenda escondida de quienes no apuestan por un Perú sostenible.
Hay puntos rescatables en el paquete económico que deben implementarse, pero no retrocedamos. Hace bien el ministro Manuel Pulgar Vidal al no renunciar y defender los principios de una nación que apunta a la modernidad.
Este es el año de la COP y el Perú puede mostrarse como un país moderno e inteligente. Presidente Humala, no desperdicie la oportunidad de ser un líder mundial, ejemplo de acciones responsables.
La ciencia del desarrollo ‘Econología’ por un mañana mejor
A principios de los años noventa, Amadeo Gómez Marmanilla, un visionario profesor de la Facultad de Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), acuñó el término ‘econología’ (economía y ecología). En este diario escribió: “Si la economía procura maximizar el bienestar humano y la ecología trata de preservar la integridad de los ecosistemas, la ‘econología’ alimentará a la humanidad, conservando la naturaleza. La ‘econología’ es la ciencia del desarrollo sostenible. Corresponde a los economistas y ecologistas caminar juntos y lo cierto es que, en el camino, se topan con cinco temas comunes: población, desarrollo, equilibrio, cambio y política”.
Mientras se avanza en el tema del desarrollo económico, corresponde a los economistas y ecologistas caminar juntos para evitar la degradación ambiental. Sin embargo, nuestras autoridades pretenden caminar al revés, darle la espalda a la conservación y al verdadero desarrollo sostenible.
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