Archivos de Categoría: ARTÍCULOS ACADÉMICOS

Enfoques de desarrollo: una mirada general a su impacto en la vida de las organizaciones

[Visto: 10928 veces]

En el siguiente artículo Héctor Guardamino, estudiante de Gestión y Alta Dirección, explica cómo el concepto del término “Desarrollo Empresarial” ha ido cambiando en las organizaciones con el paso del tiempo

¿Cómo se han consolidado los cambios en los distintos enfoques de desarrollo prevalecientes desde el siglo XX? Esta es una cuestión que  a menudo capta el interés de diversos grupos académicos interesados en comprender la importancia e impacto de los enfoques de desarrollo. Frente a este panorama podemos realizar una distinción en la evolución de estos y cómo se han manifestado a través de iniciativas que cambiaron y continúan cambiando la vida de las organizaciones  en sus modelos de negocios. Además, podemos encontrar que el hombre  ha cuestionado de manera reiterativa los términos crecimiento, progreso y desarrollo.

“Entre los años 1950 y 1970 del siglo XX, no había una distinción plena entre crecimiento y desarrollo” (Arcos 2008: 17). Ambos términos  estaban asociados a la obtención de mayores márgenes de ganancia,  comprendiendo ambos desde una perspectiva puramente económica  (costo-beneficio)  En  esta línea, Ángel Alvarado Cabellos y Pablo Luna  Odar (2015), detallan que durante los años 1950-1970,  el desarrollo económico se entendía como una rendición de cuentas para los principales accionistas, donde un mayor margen significaba una mejora exclusiva en la salud económica de la empresa. Es por ello, que el enfoque de desarrollo económico brindó una perspectiva de la necesidad de contar con respaldo monetario para asegurar el porvenir en las operaciones, a través de la industrialización.

A partir del año 1972, surgen grandes cuestionamientos respecto a los lìmites del crecimiento, en donde la idea de desarrollo dejará de enfocarse únicamente en lo econòmico, para incorporar otro elemento a parte del Estado y el Mercado: La sociedad (Arcos 2008: 66). Estas teorías dieron forma y base al desarrollo sostenible, consolidándose en la década de los 80[1].


A través del enfoque de desarrollo sostenible, se demostró que los recursos naturales eran finitos, el medio ambiente tenía un límite respecto al impacto de externalidades negativas  y la sociedad requería de una responsabilidad social que vele por sus intereses y necesidades. Tras un profundo análisis, podemos ver repercusiones en lugares como Latinoamérica, lo cual, se tradujo en la conformación de sindicatos y organizaciones civiles (Gudynas 2004: 174).

Ante este panorama, surge el enfoque de desarrollo humano a través del progreso multidimensional que, acorde a la literatura del PNUD[2], busca insertar políticas que continúen mejorando los logros obtenidos aplicando un desarrollo sostenible (PNUD 2016: 4-6). Es así, que este enfoque permite integrar la mejora en las variables de pobreza y educación.

Por lo anterior, el enfoque humano, establece la necesidad de dirigir esfuerzos y acciones conjuntas por parte de las organizaciones privadas, el Estado y la Sociedad Civil para hacer que el desarrollo sostenible se extienda en el ámbito del desarrollo del propio ser humano en términos de inclusión y desarrollo de capacidades (PNUD 2016: 19-20). En este sentido, el enfoque humano busca un desarrollo integral con el objeto de afianzar competencias y capacidades que permitan la consecución de logros sostenibles en el tiempo.

En resumen, el enfoque de desarrollo en sus 3 tipos: económico, sostenible y humano, sentaron las bases sobre las cuales las organizaciones modificaron su modelos de negocios. Para fines del presente texto, no se profundizó el rol de la sociedad civil en la evolución de los enfoques de desarrollo; sin embargo,  su contribución en el proceso es innegable. Prueba de ello, son las Empresas B y de valor compartido[3] que muestran una evolución en sus  operaciones, puesto que  priorizan el adecuado manejo de recursos, modelos de negocio sostenibles y el desarrollo de capacidades en las personas. Aún así, a pesar de estas iniciativas, no debemos olvidar que aún hay mucho trecho por recorrer no solo en nuestro país, sino a nivel mundial para lograr los objetivos del desarrollo sostenible al 2030.


[1] Primero en 1983, a través de la Comisión Mundial del Ambiente y Desarrollo de la ONU, se expuso el término “sostenible”. Luego en 1987, a través de dicha comisión se presenta el estudio “Nuestro futuro común”. (Gudynas 2004, 35)

[2] Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo

[3] En la teoría de Porter, la creación del valor compartido busca alinear las capacidades de creación de valor de las organizaciones con las necesidades de la sociedad. (Porter, 2001)

 

Autor: Héctor Guardamino – Gestión  360

Editores: Sofía Bautista y Diego Sánchez

Bibliografía:

ARCOS, Oscar

2008                 Teorías y enfoques de desarrollo: Programa de Administración Pública Territorial. Bogotá: Colombia.

ALVARADO, Ángel y LUNA, Pablo

2015                 Desarrollo Y Responsabilidad Social Empresarial. PUCP, Lima: Perú.

CEPAL

2016                 Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible: Una oportunidad para América Latina y el Caribe. Santiago: Chile.

GUDYNAS, Eduardo

2004                 Ecología, Economía y Ética del Desarrollo Sostenible. Quinta Edición, Montevideo: Uruguay.

PNUD

2016     Progreso multidimensional: bienestar más allá del ingreso. Resumen Ejecutivo. S/l.

PORTER, Michael

2001     La creación de valor compartido. Harvard Business Review.

 

 


¿El uso de la tecnología en el reclutamiento y selección del personal?

[Visto: 1652 veces]

El psicólogo social Arnaldi Paredes Palomino con experiencia en gestión de recursos humanos y desarrollo organizacional explica cómo es que la tecnología es empleada por las distintas organizaciones como medio de facilitación de reclutamiento y selección de personal.

Ya se acercan las vacaciones para los estudiantes universitarios y con ello las postulaciones en masa a prácticas pre profesionales o trabajos de verano. Es interesante ver cómo las formas más usuales de aplicar a un puesto de trabajo son a través de entregas de CV’s, pruebas psicotécnicas, grupales y entrevistas con distintos integrantes de la institución a la cual se postula y es que desde hace décadas se han realizado las mismas dinámicas.

La primera impresión es importante, ya que es el primer acercamiento a las organizaciones y, generalmente, estas se realizan durante las etapas de reclutamiento y selección del personal, funciones realizadas bajo el área de Gestión de Talento Humano (o también conocida como Recursos Humanos) Actualmente, estos procesos son guiados por personas del área, pero dados los avances tecnológicos ¿cuál sería el cambio si usaran nuevas herramientas tecnológicas para facilitar los procesos de reclutamiento y selección?

El uso de tecnología, ya sea básica o compleja, se viene empleando dentro del área de Recursos Humanos en diversas organizaciones. Un ejemplo de algo básico es el uso de software para organizar y ordenar los CV’s durante y después del reclutamiento de trabajadores. Estos programas son tan sencillos para la organización como Excel, el módulo de Talento de Dynamics 365 o incluso el uso de documentos Drive en empresas pequeñas. También, existen usos complejos de tecnología, como lo son Peoplematch o “People Analytics” o la “Altamira recruiting”, que permiten una búsqueda rápida y efectiva de postulantes a un puesto de trabajo a través de análisis de datos del capital humano que se necesite.

Otro uso tecnológico, aplicado en los últimos años, ha sido el uso de los muy populares “Chatbots”. Este es un chat interactivo sin una persona en la otra línea que ayuda al diálogo con una dinámica pregunta-respuesta que integra un sistema de inteligencia artificial. Los chatbots no son exclusivos del área de ventas, ya que no solo sirven para atender clientes. Tal es el caso de Arnie, el bot reclutador, que cumple con la función de realizar el primer paso de selección de personas que cumplan con los requisitos del puesto de trabajo.

No obstante, también contribuyen a facilitar la comunicación interna y resolución de dudas que puedan tener los trabajadores, pues son útiles para responder interrogantes que se relacionen con las necesidades o funciones del puesto. Por ejemplo: si un trabajador necesitara conocer los procedimientos para pedir permiso o alguna duda similar, se necesitará de alguien que lo guie; por ello, con el uso de tecnología se ahorrará tiempo y recursos.

Sin embargo, ahora existen brechas o limitaciones que presenta el uso de tecnología en los procesos de selección. Una de estas limitaciones es la manera en cómo afecta la interacción con los trabajadores durante las entrevistas. Primero, debe entenderse a la entrevista como un mecanismo o herramienta que sirve para adquirir información. Según Marquez (1994), su objetivo es suministrar información relevante, fiable, válida y precisa a partir de la interacción con el otro, entonces surge la interrogante de ¿qué pasaría si se sacara este campo interactivo con el uso de la tecnología? ¿Se recibiría la misma información con medios tecnológicos que cuando se hacía uso únicamente de la interacción entrevistador-entrevistado?

Otro punto importante, es conocer en qué medida el proceso de recursos humanos y la aplicación de tecnología, mediante entrevistas, recojo de cv’s y otros símiles “discriminan” o naturalizan la higienización (práctica de depurar y discriminar aquello que no encaja o no es aceptado frente a lo comúnmente aceptado) de los puestos de trabajo para los futuros miembros de la organización. En este caso, la tecnología se emplea como una “máquina calculadora” de quién es útil y quién no. No obstante, el uso de esta en el proceso de reclutamiento y selección deben ser entendida por su función para clasificar y ordenar las experiencias de los trabajadores y no para excluir a los mismos. En efecto, este proceso de recursos humanos con soporte de tecnología debe ser diseñado con la finalidad de que se obtenga un beneficio común entre el trabajador y la organización, un encuentro entre ambos objetivos.

Quizás el beneficio de tecnología será más progresivo y cambiante de lo que es ahora, pues permite analizar datos, clasificar mejor a los trabajadores disminuir el costo – tiempo y con ello, generar mayor eficiencia en las actividades, pero es labor del gestor saber de qué manera usarla para lograr el beneficio de la organización y de sus trabajadores, ya que la tecnología debe entenderse como un medio para mejorar el estilo de vida de ellos en la interacción de su introducción al trabajo.

Entrevistador: César Serrano
Entrevistado: Arnaldi Paredes Palomino


La participación política de las mujeres en las Elecciones Regionales y Municipales 2018

Categoría : ARTÍCULOS ACADÉMICOS

[Visto: 1266 veces]

En el marco de las Elecciones Regionales y Municipales 2018, surge en análisis la participación de la mujer. Entiéndase, “participación política como cualquier acción de las ciudadanas (os) dirigida a influir en el proceso político y en sus resultados”. (Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables: 2018)

La participación política de las mujeres peruanas estuvo marcada por la exclusión, ya que el ejercicio al voto de la mujer inició desde el 1933, haciendo efectivo en las elecciones generales de 1956, 52 años después que lo hiciera Nueva Zelanda. Con el fin de alcanzar la igualdad participativa entre las mujeres y varones en la política, en el 2002, mediante la cuota de género, se planeó adoptar las iniciativas de acción positiva para que exista un número de dirigentes en el nivel de la toma de decisiones y proporcionar formación a las mujeres para ocupar puestos electorales, la cual hasta la fecha es el 30% en cargos regionales. Según la Ley N° 27683, la lista de candidatos al Consejo Regional deben considerar un 30% de candidatos de hombres o mujeres.

Si bien, el JNE señaló que el partido político que no cumpla con la cuota de género no podrá participar, en estas elecciones, existen alrededor de 108 774 candidatos, entre gobernadores regionales, vicegobernadores, consejeros regionales, alcaldes provinciales y distritales, y regidores provinciales y distritales. De estos, candidatas mujeres son 42 580, (39.14%) y varones 66 194, (60.86%); existiendo una brecha de género desfavorable para la mujer.

Pero, en el plano de la candidatura de gobernantes, vicegobernadores y alcaldes, existe una mayor brecha de género preocupante de la participación de la mujer. Los candidatos a gobernador regional de los 368, participan 32 mujeres (8.70%), mientras que los varones representan al 91.30%, 336. De manera similar, pasa con los candidatos a las alcaldías tanto provincial como distrital, de los 2 017 candidatos a las diversas alcaldías provinciales, los candidatos varones son 1 835 (90.98%), mientras que las candidatas mujeres vienen siendo 182 (9.02%). Finalmente, los candidatos a las diversas alcaldías distritales, de los 12 161, el 11 090 (91.19%) son varones y solo 1 071 (8.81%), mujeres.

En síntesis, la participación de las mujeres se trata de fortalecer con la cuota de género mediante la Ley N° 27683, sin embargo, ¿es posible analizar esta iniciativa sin tener en cuenta la obligatoriedad de cumplimiento de los partidos políticos para su candidatura? Por eso, he tratado de hacer un análisis a las candidaturas que no tienen expresamente la obligación de cumplimiento, con lo cual se presenta una brecha de género magistral. Las candidatas a los sillones de gobernadores regionales, y alcaldes provinciales y distritales es alarmante. La preocupación es preguntarnos, ¿a qué se debe?

Autor:
Cristian Shupingahua – Senior Manager del Área de Eventos

Bibliografía:

Módulo 3: Participación política de las mujeres. MIMP. 2018.
https://portal.jne.gob.pe/portal
Elecciones Regionales y Municipales 2018 Reporte N°7, Serie ERM 2018. Perfiles de los candidatos presentados.


Talento y Tecnología: Gestión de las TICS como fuentes de competitividad y productividad

[Visto: 1499 veces]

La revolución tecnológica que ha sufrido el planeta en los últimos 20 años con la evolución del celular y el desarrollo del internet, influyó significativamente en el proceso de globalización.

En la actualidad, estas herramientas son claves en la rutina diaria de las personas, puesto que son capaces de concentrar una gran cantidad de información y mejoran notablemente el proceso de comunicación entre individuos a nivel mundial. No obstante, el uso de estas tecnologías de información y comunicación (TIC) también han transformado el trabajo y mejorado la productividad en la gestión empresarial.

Existen una gran cantidad de definiciones con respecto a las TIC; sin embargo, considero más integradora la del Ministerio de Tecnologías de Información y Comunicación (MINTIC) de Colombia, el cual dice lo siguiente: “Se conoce como TIC al conjunto de herramientas, equipos, programas informáticos, aplicaciones, redes y medios, que permiten la compilación, procesamiento, almacenamiento, transmisión de información como: voz, datos, texto, video e imágenes.”

En el ámbito empresarial, el uso de estas herramientas trae una serie de ventajas atractivas tales como la reducción de costos operativos, el desarrollo de innovaciones, mayor control de la calidad, mejor difusión de los productos y servicios, entre otros beneficios que ayudan a mejorar la productividad. No obstante, desde mi punto de vista, el hecho de implementar estas tecnologías en la estrategia empresarial no garantiza el éxito de la misma, puesto que es fundamental que el personal a cargo de utilizar estas herramientas tenga la capacidad de adaptarse al entorno inmediato y venidero que está en constante cambio. El ambiente laboral actual se atañe a un entorno donde la tecnología crece rápidamente, por lo que el talento que las empresas atraigan deberá desafiar estos nuevos retos tecnológicos basados en la eficiencia de los procesos y el aumento de la productividad. Por lo cual, un personal dispuesto y capacitado en TIC se convierte en una ventaja competitiva para la empresa y facilita su escenario productivo en el mercado.

Asimismo, la implementación de estas nuevas tecnologías no solo ha revolucionado la productividad de las grandes empresas, sino también ha logrado que pequeños emprendimientos resulten exitosos, tales como Amazon, Alibaba y Staples. Sin ir muy lejos, cualquier persona interesada en iniciar un emprendimiento puede recurrir a herramientas, como por ejemplo: Canvanizerpara crear un modelo de negocio; LinkedIn para encontrar el talento requerido en cada puesto; Google Classrom para capacitarlos;  Hangouts, Skype y Gmail para agilizar la comunicación interna; Google Calendar para sincronizar actividades; Facebook e Instagram para comercializar productos, posicionar  la marca y fidelizar a los clientes; Mailchimp y WordPress para incrementar el alcance de la publicidad; Excel para controlar inventarios, armar presupuestos, y automatizar facturas; entre otras herramientas gratuitas, de fácil acceso y uso.

Por consiguiente, las tecnologías de información y comunicación (TIC) se han convertido en uno de los instrumentos clave para medir el desarrollo de las empresas (INEI, 2015). De hecho, los recursos tecnológicos entre las organizaciones y otras entidades producen resultados innovadores los cuales pueden repercutir positivamente sobre las rentabilidades de las firmas (Tello, 2009). Es por ello que las organizaciones, sea del tamaño que sea, se ven obligadas a innovar en sus procesos formativos de enseñanza y capacitación, a su personal, con métodos que incorporen las TIC, lo que les permitirá responder y crear valor ante las demandas de formación continua, de calidad, procesos y ser eficientes en costes y tiempos. (Chacón, 2015).

A modo de conclusión, las TIC facilitan el conocimiento asistido a través de herramientas que aumentan la capacidad productiva en la labor profesional de las personas. Sin embargo, esta labor va de la mano con una adecuada capacitación continua del talento en estas herramientas que están al alcance de todos, a fin de generar una ventaja competitiva para la organización.

Autor:
Rodrigo Ramos


Soy fashionista: ¿Consumo que sacrifica la conciencia?

[Visto: 1744 veces]

La Industria de la Moda es uno de los espacios con más controversia durante las últimas décadas. Y es que ¿Quién no ha caído en la magia perversa de las rebajas tras rebajas en tiendas de retail como Forever 21, Zara, Saga Falabella, Ripley… entre otras?

La Moda, con el pasar de los años, ha ido disminuyendo los costos de producción con tal de satisfacer las 52 temporadas del año, enfocándose en las ventas y no en la calidad del producto final.

Este fenómeno es denominado “Fast Fashion”. No sólo disminuye la calidad de la tela y genera mayores residuos, sino que al ofrecer un precio tan bajo por un producto, usualmente tercerizado en sociedades de bajo desarrollo, perjudica la calidad de vida de los colaboradores.  Por otro lado, los consumidores, quienes se encuentran en manos de los influencers y tendencias digitales, también se encuentran afectados, ya que tienden a buscar atuendos con el fin de encajar que para expresar un estilo de vida o forma de ser.

Luego del colapso de la fábrica más grande de Bangladesh en el 2013 que se llevó consigo la vida de más de mil trabajadores, empezó a despertarse la revolución del “Slow Fashion”: una corriente alternativa que busca generar valor compartido para todos los agentes involucrados en la empresa (clientes, trabajadores, sociedad, recursos naturales, etc.). Saber quién hizo tu ropa (Who made my clothes?), la durabilidad de la misma, de qué material y bajo qué condiciones está fabricada son los nuevos intereses que surgen de esta práctica. Ante la crítica de las empresas más grandes, el sistema gira en torno a analizar si en una producción se cumple con estos nuevos “estándares sociales”. Así, la gestión responsable de la cadena de suministros en compañías multinacionales influiría en las medianas y pequeñas empresas del sector con el fin de integrar la sostenibilidad, el respeto de los derechos humanos y la transparencia en cada nivel.

Para conseguir este objetivo, se necesitan gestores que tengan muy claro que todas las condiciones macro-externas son de igual importancia. En este sentido, la protección de la sociedad y el cuidado del medio ambiente son indispensables tanto para el mejor desarrollo de las naciones como de las industrias. Así, el “Slow Fashion” es la tendencia revolucionaria de este sector que busca dar el justiprecio, aumentar la calidad y cambiar la consciencia de consumidor. …Entonces, ¿Qué estrategias podrías implementar para la regeneración de valor?

Autora:
Claudia Gallardo Landauro


Gestión deportiva: Efectos de la gestión de un mega evento deportivo

[Visto: 1911 veces]

La industria deportiva es una de las más grandes a nivel mundial. Hacia el 2015, este sector generó 700 mil millones de dólares (M$), que representa el 1% del PBI mundial. Tan solo el fútbol movió 200.040 M$ el año 2017. El deporte genera por estas y otras razones, un impacto económico y social sin precedentes. En este contexto es que se celebra el mundial Rusia 2018, pero: ¿Qué efectos conlleva realizar un macro evento en el país anfitrión y en aquellos que participan de él? ¿Qué elementos deben alinearse para que la gestión de un mega evento tenga éxito? ¿Cómo afrontar un reto de esta magnitud? Todas estas interrogantes serán resueltas en las siguientes líneas.

Los países organizadores de estos eventos invierten grandes sumas de dinero para llevarlos a cabo. Por ejemplo, Brasil invirtió cerca de 11,000 millones de dólares en la realización del último mundial de fútbol, esto representó un monto mayor a la suma de la inversión de los 3 mundiales anteriores. No obstante, la consultora UBS asegura que el impacto económico de la Copa en inversión indirecta, del 2010 al 2014 alcanzó los 64,000 M$, que en buena parte se debe a los grandes actos de corrupción posteriormente descubiertos, y que se sumó al descontento social que se manifestó principalmente en las favelas de ese país (Forbes, 2014). Oficialmente se proyecta que el gasto en Rusia ascenderá a 16,800 M$, y extraoficialmente se estima que la inversión alcanzará los 60,000 M$.

Fransesc Gregori docente del EAE  Business School de Barcelona nos comenta lo siguiente: “Los resultados son que el mundial del 2014 generó 8,960 M$ y se proyecta que el mundial del 2018 genere 13,320 millones de dólares en ingresos. Sin embargo, los países anfitriones apenas recibieron 523 M$ en el caso de Brasil, y se proyecta que Rusia genere 782 M$ en ingresos inmediatos, el resto de los ingresos se los lleva la FIFA”. La mayoría de estados organizadores terminan este tipo de eventos con un alto grado de déficit económico que se debe al mal uso de los recursos, que principalmente se gastan en la construcción de edificaciones que posteriormente se vuelven cargas para el estado, y cuyos defectos a largo plazo terminan superando ampliamente a sus beneficios inmediatos. Así lo demuestra Sudáfrica con un déficit fiscal de 21,000 M$ o Brasil con un saldo negativo de 27,000 M$. Por su parte, Rusia al organizar los XXII Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi el 2014, obtuvo un déficit fiscal de 20,000 millones de dólares, resultando ser los más caros de la historia (El Cronista, 2016).

Sabiendo esto, ¿Por qué los países tienen tanto interés en organizar un evento de estas magnitudes? Existen numerosos factores que lo explican. “El primero de ellos, es la proyección de la imagen del país a nivel mundial. Mientras que los JJOO acumulan más de 4,000 millones de seguidores,  1,100 millones de personas ven la final mundial de cricket (entre Pakistán e India), 160 millones de personas miran la final del Super Bowl, y un mundial de fútbol es televisado por 3.600 millones de personas. Ser anfitrión de un mega evento permite al organizador generar notoriedad y posicionamiento. El país proyecta su propia marca, la infraestructura de sus principales ciudades, su estilo de vida y atractivos culturales, cuyo impacto publicitario se mide en 774 millones de dólares. En segundo lugar, el impulso económico derivado de la construcción y el turismo, que tiene un efecto inmediato estimado del 0.5% de crecimiento en el PBI del estado anfitrión. Por último, existen otros factores como los efectos políticos positivos inmediatos en sus mandatarios, o la mejora del estado de ánimo de la población local” (Gregori, 2018).

Los efectos también se sienten en los países participantes. El mejor ejemplo es la escena nacional, donde las consecuencias de la reciente clasificación al mundial de Rusia 2018 fueron una serie de fenómenos económicos. El primero de ellos fue el aumento inmediato de hasta el 500% en la venta de camisetas de la selección nacional (del cual 70% eran de imitación, producto de la industria nacional). Se prevé que en confección y venta de indumentaria, se muevan 180 M$. Por otro lado, la venta de equipos de TV y dispositivos electrónicos (celulares, tablets, laptops, etc) aumentarán entre el 35%-60% (Gregori, 2018). Este efecto se debe a que la clase media renovará sus equipos electrónicos para seguir el mundial. “Entre el sector del comercio y consumo se espera una inyección de 350 millones de dólares en la economía, y un crecimiento del PBI del 0.17%” (Gestión, 2017).

Como hemos observado, ser el foco de atención implica asumir también grandes riesgos, pues malas decisiones producen una negativa percepción internacional. ¿Cuál es entonces el escenario ideal para que la gestión de un mega evento tenga éxito? Jesús Espinoza, docente de la diplomatura de gestión deportiva en la PUCP nos brinda el siguiente alcance. “Se requiere conseguir alinear a tres actores: El estado a través de sus representantes políticos, la empresa privada y la sociedad civil. […] El legado de un mega evento incluye un legado político, que consiste principalmente en alinear objetivos de las autoridades políticas ignorando el color partidario. Por otro lado se encuentra el legado deportivo, pues si rompes la barrera del éxito deportivo (ganar competiciones) los deportistas locales generan una rueda positiva de resultados, que con un adecuado trabajo perdurará en el tiempo. Además se encuentra el legado en infraestructura, que incluye el uso eficiente de las construcciones realizadas una vez terminado el evento. Y por último se encuentra el legado social, donde la sociedad afianza su sentido de identidad con el deporte y el ánimo social sube”.

Un caso de éxito en gestión de mega eventos fueron los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, considerado como uno de los pocos eventos realmente rentables “Las autoridades políticas, el sector empresarial y la ciudad de Barcelona trabajaron de la mano en este evento. Además, la generación de una economía mixta (dirección pública y gestión privada),  la capacidad de renovación urbana y la excelencia en el programa deportivo urbanístico contribuyeron en el éxito de estos JJOO. […] En la parte deportiva, se creó el plan ADO, que fue un fondo público privado que se repartió entre deportistas (90%) y entrenadores (10%) para que ambas figuras se dediquen solo a entrenar y mejoren su productividad” (Espinoza, 2018).

Como resultado Barcelona escaló a ser el tercer destino turístico en Europa, obtuvo resultados deportivos sin precedentes y se comenzó la gran revolución deportiva de España. Los superávits de los saldos fiscales fueron: + 6.835 M$ corrientes para el periodo 1986-1992, + 2.608 M$ para el periodo 1993-2001 y + 3.873 M$ para el periodo 2002-2010. (Brunet, 2009). Además, se generaron otros efectos de largo plazo, pues hoy se generan 21,000 puestos de trabajo en la industria del deporte anualmente en España. Asimismo, se expandió la construcción de viviendas, y las plazas hoteleras disponibles en Barcelona se incrementaron extraordinariamente, entre otros efectos (Brunet, 2009).

Queda claro que el éxito de un evento no se mide en la cantidad de inversión realizada, si no en la adecuada administración de los recursos que generen un legado que perdure en el tiempo una vez que el evento haya concluido. Resulta crucial aprender de los errores y replicar los aciertos de experiencias similares. En nuestro país se presentó una ventana de oportunidad con la designación de Lima como sede de los Juegos Panamericanos 2019, y cuya realización se prevé que genere una inversión de 5.222 millones de soles (MS/.) en su mayoría destinada a nueva infraestructura. No obstante, se estima que también signifique un ingreso de S/5 mil millones, con S/680 millones de beneficios directos y S/4,387 millones indirectos (El comercio, 2017), además de dejarnos un legado infraestructural y deportivo.

Esta vez los focos estarán alumbrándonos y es momento de demostrar que somos capaces de realizar un evento de esta magnitud de manera exitosa. No olvidemos que el beneficio obtenido de un mega evento puede generar una revolución social y deportiva que signifique el inicio de un cambio productivo y sostenible en el tiempo. Sin embargo, ello sólo se logrará con una adecuada gestión de las inversiones y los recursos, así como un compromiso de todos los actores alrededor del suceso que le devuelva la importancia que merece al deporte nacional, pues como diría Alfredo Di Stéfano: “Ningún jugador es tan bueno como todos juntos”.

Autor:
Luciano Rivera – Manager de Análisis de Producto
Gestión 360

Bibliografía:

El Alto precio de la gloria olímpica (8 de agosto de 2016). Recuperado de: https://www.cronista.com/financialtimes/El-alto-precio-de-la-gloria-olimpica-20160808-0030.htmlEl lado más oscuro del mundial (4 de julio de 2014). Recuperado de: https://www.elconfidencial.com/mundo/2014-07-04/la-expulsion-blanca-la-cara-oscura-del-mundial-de-brasil_156414/

Villafranco, A. Forbes: 10 escándalos que ensombrecen el mundial de Brasil (27 de mayo de 2014) Recuperado de: https://www.forbes.com.mx/10-escandalos-que-ensombrecen-el-mundial-de-brasil-2014/

Informe Robinson (2012). Barcelona 1992. Recuperado de:             https://www.youtube.com/watch?v=RSGrZlM3ux4

Coca Cola (1992). Anuncio Plan ADO Deportistas Olímpicos Barcelona 1992: https://www.youtube.com/watch?v=682QTcXsbCA

Ferran Brunet (2012). Análisis del impacto económico de los Juegos Olímpicos. Recuperado de: file:///C:/Users/Usuario/Downloads/JJOO%20Barcelona.pdf

Brunet, Ferran. 2002. “Anàlisi de l’impacte econòmic dels Jocs Olímpics de Barcelona, 1986-2004”. En Barcelona: l’herència dels Jocs (1992-2002), eds. Miquel de Moragas y Miquel Botella, 209-243. Barcelona: Editorial Planeta.

Rufas, F. (2018) RUSIA 2018: OPORTUNIDADES ECONÓMICAS DE UN MUNDIAL DE FÚTBOL. Recuperado de: file:///C:/Users/Usuario/Desktop/IME/ARTÍCULO%20GESTIÓN%20DEPORTIVA/PRESENTACION%20MUNDIAL%202%20(1)-ilovepdf-compressed.pdf

Panamericanos Lima 2019: Estiman S/ 5,222 millones de impacto económico (6 de Febrero de 2018). Recuperado de: https://gestion.pe/economia/panamericanos-lima-2019-estiman-s-5-222-millones-impacto-economico-226676

¿Cómo van las inversiones para los Juegos Panamericanos? (11 de diciembre de 2017). Recuperado de: https://elcomercio.pe/economia/peru/inversiones-juegos-panamericanos-noticia-480759

Gobierno planea recuperar inversión en los Juegos Panamericanos con venta de departamentos (21 de abril de 2018) Recuperado de: https://peru21.pe/politica/gobierno-planea-recuperar-inversion-juegos-panamericanos-venta-departamentos-404366


El Gobierno Abierto como una de las herramientas de la Gestión Pública para la disminución de la corrupción en el Estado Peruano

[Visto: 2725 veces]

Temas como el caso Odebrecht, escándalo de corrupción más grande que azotó a Latinoamérica; la fuga del expresidente Alejandro Toledo acusado de lavado de activos, tráfico de influencia y vínculos con Odebrecht durante su mandato; funcionarios del segundo gobierno aprista; el ex presidente Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia, ambos investigados por delitos de lavado de activos; y el ex presidente Pedro Pablo Kuczynski, relacionado por las asesorías a Odebrecht, entre otros, han hecho que el tema de la corrupción sea un tema recurrente en los medios de comunicación (El Comercio, 2018).

La corrupción se define como “la venta por parte de funcionarios o agentes oficiales de derecho, bienes o servicios de propiedad pública con el propósito de obtener una ganancia personal” (Gómez: 2008). La expansión de esta práctica en el Estado peruano, ha ocasionado la desconfianza de la sociedad civil en la administración pública, lo cual genera una crisis de representatividad e incertidumbre.

Por ejemplo, el Perú, según el Índice de Percepciones de Corrupción de Transparencia Internacional, se encuentra en el puesto 96 de un total de 180 países (Gestión, 2018). Si bien este índice indica que el país ha avanzado cinco puestos arriba de forma positiva en comparación al año 2017, el 47.4% de los ciudadanos considera aún la corrupción como uno de los principales problemas del país (INEI: 2017). Esto significa que los avances en disminuir la corrupción no han sido significativos ni percibidos, pues gran parte de los ciudadanos aún desconfían de las actividades que realizan los funcionarios públicos con los presupuestos del Estado.

En base a ello, ¿cuál podría ser una de las herramientas de la Gestión Pública que permita mitigar la corrupción en el gobierno peruano?

Durante los últimos años, “la administración pública está evolucionando en tres ámbitos dominantes: la administración pública tradicional, la nueva gestión pública (NGP) y las perspectivas de la gobernanza” (Pan, 2007, p. 530). Como parte de este último enfoque, se desarrolla el Gobierno Abiertoque busca lograr que el sector público o los gobiernos sean más honestos, eficientes, efectivos, responsivo, vigilantes, transparentes, participativos, confiables, dispuesto a rendir cuentas y justo” (Pan, 207, p.518).

El Gobierno Abierto (GA), es una herramienta de la Gestión Pública que permite “abrir las ventanas al sector público” (Ramírez, 2011).Es decir, proporcionar información sobre lo que hace la administración pública para obtener un gobierno transparente y limpio.

Álvaro Ramírez, magister en Gestión y Políticas Públicas en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), señala que, un Gobierno Abierto se manifiesta en tres ejes principales: “mejora el nivel de transparencia y acceso a la información mediante la apertura de datos públicos; facilita la participación de la ciudadanía en el diseño de implementación de las políticas públicas y favorecer la generación de colaboración entre los diversos actores, particularmente entre la administración pública, la sociedad civil y el sector privado” (2012, p. 15). Todo esto con el fin de obtener valor público a través de un gobierno responsable, transparente y confiable.

Ahora bien, el Estado peruano decidió ingresar a la iniciativa de Alianza para el Gobierno Abierto (Open Government Partnership) en el año 2011 (El Peruano, 2018). Sin embargo, los intentos de crear un Plan de Acción que cuenten con todos los principios antes mencionados han sido nulos. Esto debido a que, el último Plan de Acción registrado para los años 2017- 2019 “no cuenta con la participación de la sociedad civil involucrada en el proceso y tampoco incluye el tan anhelado ente autónomo” (DAR: 2017).

En ese sentido, la información pública no es usada ni conocida por la sociedad civil, pues no hay una promoción por parte de organismos del Estado que ayuden la difusión de las posibles herramientas para el uso adecuado de un GA. Esta falta de participación civil genera que no exista una co-creación ni trabajos colaborativos entre ambos actores, lo cual genera una mayor inseguridad y  desconfianza en la administración pública. En este sentido, Oszlak al afirmar que “se requiere una firme decisión política, tanto de los gobiernos honestamente comprometidos con valores de transparencia, participación y colaboración de la ciudadanía, como de las propias organizaciones sociales, que deben imaginar e implementar mecanismos que promuevan el interés de los ciudadanos por un mayor involucramiento en la gestión pública”(2013).

Así mismo, este hecho incrementa las posibilidades de corrupción, ya que la información que se publica no es refutada ni asesorada, sino hasta después de su ejecución o activación. En cambio, si se considerara al ciudadano como protagonista, se tomaría en cuenta las opiniones y necesidades de este. Así, el Estado dejaría de centrarse en el quehacer político e iniciaría el análisis de lo que en realidad necesita nuestra sociedad.

En síntesis, el Gobierno peruano aún sigue cometiendo errores que impiden el desarrollo de la sociedad civil en la colaboración con el Estado. Implementar herramientas de la gestión que no están bien diseñadas aumenta el retraso en el avance de mitigar la corrupción y los problemas sociales. Si bien, combatir la corrupción tan extendida en nuestro país no basta con un Plan de Acción, este podría ser el comienzo para generar bases sólidas en la participación de los ciudadanos y en la búsqueda de un gobierno más transparente, responsable y colaborativo.

Autora:
Esmeralda Zea Rayme – Manager de Proyectos y Procesos
Gestión 360

Bibliografía:

Oszlak (2013) “Gobierno abierto: hacia un nuevo paradigma de gestión pública”. Colección de documentos de trabajo sobre e-Gobierno.

García (2007) “La nueva gestión pública: evolución y tendencias”. Universidad de Salamanca.

El Comercio (2010) “La corrupción, el principal problema del Perú”

Recuperado de: https://elcomercio.pe/politica/corrupcion-principal-problema-peru-noticia-513999

La República (2018) “Perú continúa desaprobado en índice de corrupción, según Transparencia Internacional”

Recuperado de:https://larepublica.pe/politica/1200871-peru-continua-desaprobado-en-lucha-contra-la-corrupcion-segun-transparencia-internacional

Ramírez (2012) “Gobierno abierto es la respuesta: ¿Cuál es la pregunta?”. Redes Sociales y Gobernanza, págs. 14-22.

Gómez (2004) “Análisis económico de la corrupción”. Revista de pensamiento iberoamericano, ISSN 1575-4227. Número 10, págs.. 127-147

Oltra (2015) “El Gobierno Abierto en el Perú: Perspectivas y análisis de los resultados obtenidos en OCP”. Trabajo de fin de master. Universidad Politécnica de Valencia.

Gestión pública : balance y perspectivas. (2012). Lima : Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 212.

DAR (2017). “El proceso para un nuevo Plan de Gobierno Abierto en el Perú: Expectativas y realidad”Recuperado de: http://www.dar.org.pe/noticias/daropina_ogpperu/

INEI (2017). “Perú: percepción ciudadana sobre la gobernabilidad, democracia y confianza en las instituciones”. Lima. https://www.inei.gob.pe/media/MenuRecursivo/boletines/boletin-percepcion-diciembre-final.pdf

GESTIÓN (2018). “Perú entre lo países más corruptos del mundo, según Transparencia Internacional”.

Recuperado de: https://gestion.pe/mundo/peru-paises-mas-corruptos-del-mundo-segun-transparencia-internacional-227786

EL Peruano (2018). “Aprueban el Plan de Acción Nacional de Gobierno Abierto 2017-2019”. Resolución Ministerial.

Recuperado de : http://busquedas.elperuano.pe/normaslegales/aprueban-el-plan-de-accion-nacional-de-gobierno-abierto-2017-resolucion-ministerial-n-378-2017-pcm-1601372-1/

PAN (2018). “Desafíos a la capacidad pública en la era de una administración pública en evolución y reforma del gobierno”. Gestión y Política Pública. México


ROMPIENDO PARADIGMAS: los millennials peruanos, sus hábitos de ahorro, consumo y sus finanzas personales

[Visto: 2716 veces]

Los Millennials, también llamados Generación Y, son aquellos nacidos entre 1980 y 2000, eso quiere decir que ahora se encuentran en el rango de entre 18 y 38 años. Ellos son reconocidos mundialmente por ser adeptos tecnológicos y tener una conectividad de casi 24/7 en las redes sociales, además de estar enfocados en el presente, pensando en “vivir la vida” y haciendo que valoren mucho más las experiencias y el estilo de vida, dejando de lado muchas veces el costo que este podría tener. Actualmente, ellos conforman la mayor fuerza laboral y de consumo en el mundo y según Ceplan (2015), se estiman que en el Perú dentro de 7 o 12 años la Población Económicamente Activa (PEA) estará fundamentalmente conformada por personas de esta generación.

Al haber mencionado ya estas características y filosofía de vida que guía a los millennials, es muy cierto afirmar que de manera global estos son malos ahorradores de su dinero, ya que todos sus ingresos terminan esfumándose en lujos innecesarios y en gastos que se hacen diariamente de manera inadvertida: un chicle, un café, un bus o un servicio de transporte de más (Semana Económica, 2017). En caso de los jóvenes peruanos que pertenecen a esta generación y que aproximadamente representan el 25% de la población nacional (Ipsos,2016), no sabemos si siguen esta tendencia, es así que trataremos de investigar el comportamiento de este grupo.

Según encuestas realizadas para la publicación en Semana Económica en conjunto con Ipsos Apoyo, (la primera encuesta sobre la generación millennials a nivel nacional), a diferencia de las características globales de esta generación, el dinero y la estabilidad laboral sí interesa a la mayoría de millennials peruanos. Esto se debe a que la informalidad y lenta penetración de la tecnología influenciará a que las generaciones peruanas demoren en cambiar sus características. El único conjunto de millennials, aquellos que son más jóvenes (los que tienen entre 18 y 25 años) y de mayor poder adquisitivo (Sector socioeconómico A y B), ostentan las características comúnmente asociadas a millennials en los países desarrollados. Es así que este estudio demuestra lo contrario a una de las primeras creencias sobre los hábitos de gasto de los millennials, al concluir que a la generación Y sí le importa el dinero. Los resultados también señalan que por dinero un millennials se queda en un centro laboral y que el nivel de sueldo es uno de los tres principales factores que le interesa al momento de buscar un trabajo. Y en cuanto a su consumo, éstos no son tan distintos como sus predecesores, pues también se fijan en el precio y la calidad antes de elegir una marca.

Asimismo, se menciona también que existen ahora factores importantes para la generación Y que no lo eran para las generaciones pasadas, y una de ellas es la percepción que terceros pueden tener de una marca. La encuesta muestra que las recomendaciones de especialistas u otros son altamente consideradas. No solo en lo que respecta a productos tecnológicos, donde las demás generaciones también buscan recomendaciones, sino también en productos de cuidado personal (Begazo & Fernández, 2015).

El otro punto importante de la generación Y peruana es el su hábito de ahorro, ya que según la encuesta de Datum Internacional (s/f), la mitad de esta población posee esta buena costumbre. Además, los resultados resuelven una de las más curiosas interrogantes ¿qué será más importante para los Y peruanos, el tiempo o el dinero? Resultando, que el tiempo y el dinero tienen casi el mismo nivel de importancia para ellos.

Concordando con lo anterior, en el Perú, a los millennials sí les interesa el destino de su dinero, y tienen preocupaciones relacionadas a ello. En primer lugar, dentro de su lista está la inquietud de su futuro y el de sus padres; segundo, el que algún familiar pueda fallecer y en tercero el de sus finanzas personales (Datum Internacional, s/f).

En cuanto a sus finanzas y a su relación con entidades bancarias, los productos que más consumen los millennials son las tarjetas de crédito, ya que el sector retail tiene un especial interés en ellos, al representar un porcentaje muy alto de su facturación. En cuanto al otro producto con mayor demanda, son los créditos vehiculares, ya que muchos jóvenes que empiezan a trabajar sienten necesidad de este tipo de crédito (Gestión, 2015). Por ello se puede ver que la participación en deuda de los millennials peruanos está teniendo una tendencia positiva, aumentando así dos de 20% en marzo de 2015 hasta 22% en marzo de 2016, haciendo que los bancos consideren bajar la valla de edad para que más jóvenes accedan a sus productos (Gestión, 2016).

En conclusión, se puede ver que los millennials peruanos tienen rasgos un poco diferentes a sus pares occidentales, rompiendo la tendencia de realizar gastos de manera descuidada, ya que ven que tienen una buena valoración de su dinero, ahorrándolo para el futuro. Además, muestra un buen interés por algunos productos financieros específicos, que van acorde a sus necesidades y estilo de vida, haciendo que los bancos lo vean como un segmento muy atractivo.

Autora:
Yina Matto Arias – Vicepresidenta de Audiovisuales
Gestión 360

Bibliografía:

Semana Economica (2017). “Seis características de los millennials que preocupan a la economía”. Recuperado de: https://www.semana.com/economia/articulo/millenials protagonistas-de-una-nueva-economia/514733

De La Cruz, Chinn (s/f). “Millennials en el Perú: Una generación con grandes oportunidades “ Recuperado de: ://btpucp.pucp.edu.pe/archivo-reportajes/millennials-en-el-peru-una-generacion-con-grandes-oportunidades-laborales/

Datum Interncional (s/f). “¿En qué se diferencian los millennials del Perú?” Recuperado de: http://www.datum.com.pe/new_web_files/files/pdf/Millennials.pdf

Rpp (2015). “¿Cuál es el perfil financiero de los millennials?”. Recuperado de http://rpp.pe/economia/economia/cual-es-el-perfil-financiero-de-los-millenials-noticia-904531

Diario Gestión (2016). “Millennials y Generación X: ¿Cuánto y cómo se endeudan y qué productos adquieren?”. Recuperado de: https://gestion.pe/economia/millennials-generacion-x-endeudan-productos-adquieren-118970

Diario Gestión (2015). “¿Qué productos financieros demandan más los millennials?”. Recuperado de: https://gestion.pe/tu-dinero/productos-financieros-demandan-millennials-104661

Bedazo, Jose & Fernandez Walter (2015). “Los millennials peruanos: características y proyecciones de vida”. Gestión en el Tercer Milenio, Rev. de Investigación de la Fac. de Ciencias Administrativas, UNMSM (Vol. 18-II, Nº 36, Lima, Julio – Diciembre 2015)

 


¿Por qué fracasan los países a la peruana?: Sobre las instituciones económicas y políticas y el accionar de la sociedad

[Visto: 3235 veces]

“El éxito económico de los países difiere debido a las diferencias entre sus instituciones, a las reglas que influyen en cómo funciona la economía y los incentivos que motivan a las personas”

Daron Acemoglu y James A. Robinson

¿Por qué fracasan los países?

¿Qué determinantes son necesarias para que un país sea rico o pobre? Probablemente sea una pregunta retórica, se realiza sin esperar una respuesta; o incluso, no tener un destinatario específico. Sin embargo, se utiliza para que el interlocutor produzca una reflexión sobre el oyente, este caso usted lector condicione su conducta a un cambio.

Acemoglu y Robinson, dos de los máximos expertos mundiales en desarrollo, revelan que la prosperidad de un país no depende de la situación geográfica, ni las enfermedades, ni la cultura. En cambio, depende de las instituciones y la política, “una sociedad abierta, dispuesta a favorecer el concepto de Schumpeter de ‘destrucción creativa’ (introducción de nuevos bienes y servicios que hacen frente a los ya existentes e implica que los productores apliquen nuevas herramientas que produce que los trabajadores sean más productivos) y que cuente con un auténtico Estado de derecho” (Acemoglu, 1: 2012).

Existen dos tipos de instituciones: extractivas e inclusivas. Las primeras, “mantienen en la pobreza a los países pobres y les impiden emprender el camino hacia el crecimiento económico”. (Acemoglu, 456: 2012)  Sin embargo, existe una paradoja en donde las instituciones extractivas económicas puede generar cierto “crecimiento pero de tal manera que el proceso de expansión económica finalmente este controlado por un grupo que continuamente debe consolidar su dominio político” (Ghezzi, 87: 2013) Por ello, “las instituciones políticas extractivas apoyan a estas instituciones económicas para consolidar el poder de quienes se benefician de la extracción”(Acemoglu, 436: 2012).

Por su parte, las instituciones inclusivas en el ámbito económico “hacen respetar los derechos de propiedad crean igualdad de oportunidades y fomentan la inversión en habilidades y nuevas tecnológicas” (Acemoglu, 501: 2012). En el ámbito político, “reparten el poder político ampliamente de manera pluralista y son capaces de lograr cierto grado de centralización política para establecer la ley y el orden” (Acemoglu, 501: 2012). La perduración en el tiempo de las instituciones inclusivas se debe, principalmente, en el círculo virtuoso basado en limitar el ejercicio del poder y en una distribución pluralista de la misma; es decir, mantener el Estado de derecho.

En el caso peruano, la relación entre lo político y económico “no es algo que perturba a la economía, sino más bien son dos elementos inseparables en la ecuación del desarrollo económico”. (Ganoza, 20: 2015) Las mayores transformaciones en la economía peruana se presentan entre los años 1980 y 1990, y constituye un inicio de reformas que el Estado inicia para sobrellevar la crisis.

Según Henry Pease, se inicia con el Estado neoliberal y esto conlleva a “la destrucción del tejido social de actores que estuvieron activos en el momento de la apertura democrática en  1980. (…) se vieron afectados por una aguda crisis (…) por la violencia senderista (…)  y bajo una política de militarización”. (333: 2013) El régimen fujimorista destruyó “el sistema nacional de planificación y la capacidad de los ministerios de formular políticas públicas” (339: 2013) y favoreció al proceso de privatización y concesión de empresas.

En el ámbito económico, Ghezzi menciona que se inicia un proceso de liberalización comercial mediante un sistema de reducción progresiva de tasas y de desregulación económico. Además, con las reformas – laboral, impositiva y del sistema financiero- se logró la apertura e integración a la economía global, el cambio en la propiedad de los activos, en el rol del Estado y en los incentivos, y en la política macroeconómica. (33: 2013)

Sin embargo a pesar de la mejoría en la economía, la corrupción acabó con el régimen fujimorista debido a que el modelo económico favorecía a las empresas que pactaban con el Estado. Es así como, “los proyectos y las compras del Estado y de las numerosas empresas públicas eran fuente de comisiones (…) se trataba de una corrupción más focalizada, concentrada en menos personas” (De Althaus, 132: 2011).

En el panorama actual, según Ganoza el enfriamiento de la economía peruana es la consecuencia conjunta de problemas económicos e institucionales que fueron ocultados en los años de crecimiento, pero nunca se resolvieron, y nos están regresando a la normalidad de un desempeño económico mediocre,  que ha sido común a lo largo de la historia del Perú (21: 2015).

En consecuencia, como menciona Acemoglu y Robinson esta relación entre instituciones políticas y económicas extractivas responden a intereses particulares de los grupos. En el Perú, el problema de fondo es el orden económico donde los empresarios y la gobernabilidad neoliberal son respaldados por los medios de comunicación. Protagonizan una “presunta conspiración neoliberal para que la economía y la política respondan solo a sus intereses y no a los del ciudadano” (Ganoza, 21: 2015)

Un ejemplo es el caso de Lava Jato,  “Odebrecht reconoció el pagó en Perú de sobornos por 29 millones de dólares entre 2005 y 2014, comprometiendo los gobiernos de Alan García, Toledo y Ollanta Humala”. (El Comercio: 2018) Las obras realizadas por la empresa y en el periodo de los gobiernos en mención fueron Gasoducto Sur, Metro 1 de Lima y la carretera Interoceánica. Además, aportes económicos en las campañas de diversos candidatos entre ellos Keiko Fujimori y Susana Villarán.

Con ello, esta relación entre actores políticos y económicos como menciona Acemoglu y Robinson, condiciona los proyectos de inversión pública para el beneficio particular. “No es el Estado al servicio de la sociedad, sino apropiado por grupos o argollas”. (De Althaus, 259: 2011) También, menciona Ghezzi que el actual desarrollo económico no parece tener los ingredientes para los procesos inclusivos, como un crecimiento acompañado de mejor educación, en la productividad, en el conocimiento y tecnología. Sino, por el contrario, el enfoque extractiva de la economía peruana acentúa el rasgo extractivo de las instituciones. Es decir, según el autor el proceso de crecimiento basado en la extracción de recursos puede generar mayores incentivos  para que la población no se especialice en actividades creativas – como requieren las instituciones inclusivas- sino por el contrario apropiarse de la renta creada por las industrias extractivas. (89: 2013)

Sin embargo, ¿cómo se cambia de enfoque extractivo a inclusivo? Acemoglu y Robinson mencionan que suele ser necesario que haya una confluencia de factores, sobre todo una coyuntura critica, acompañada de una amplia coalición de los que exigen reformas u otras instituciones existentes propicias, para que una nación avance para lograr instituciones inclusivas. (496: 2012)

En la coyuntura peruana, se presentó una crisis como consecuencia de los diversos actos de corrupción que salieron  a la luz y resultó en la renuncia del Presidente de la Republica, entonces Pedro Pablo Kuczynski. Anteriormente, se tejía un panorama adverso de crisis por una disputa de poder entre el Poder Legislativo y Ejecutivo. Frente a este panorama, la sociedad civil criticaba a sus políticos en la inacción, existía un entrampamiento: el establishment.

Para Vergara, la sociedad peruana se encuentra en el establisment y creyendo que el crecimiento económico resolverá los problemas. El cambio de la sociedad debería enfocarse en el liberalismo, creado para destruir aquel régimen en el cual los individuos que no estaban a cargo puedan construir su propia vida y conseguir aquello que sus talentos le permitieran, luchando frente a las desigualdades y [volviendo] a la persona en individuo político, ciudadano con voluntad, razón, deberes y derechos. (69: 2013)

En tanto el Financial Times o The Economist nos dicen que el Estado necesita una renovación para asegurar el correcto manejo económico, frente a un mercado financiero codicioso y la crisis desatada, así como superar las desigualdades sociales. (Vergara, 63: 2013) Se necesita de [una sociedad con un enfoque] de liberalismo que se ocupe del Estado y de la institución (…) reformista, democrática e interesada en él, como mecanismo para superar muchos de nuestros problemas. Se necesita afrontar problemas nuevos para los que el neoliberalismo peruano de los noventa, no está preparado. (Vergara, 63: 2013). La pregunta es, ¿hasta cuándo la inacción de la sociedad peruana?

Por otro lado, con respecto a fortalecer las instituciones del Estado, presento la siguiente perspectiva de Gobierno abierto. El Gobierno Abierto tiene como finalidad abrir las ventanas del sector público. (Valenzuela, 128: 2012) Entonces, el concepto se refiere “al derecho de acceso a la información y a la obligación de los mandatarios de transparentar el ejercicio del poder público” (Valenzuela, 128: 2012)

Según Valenzuela, con tres pilares que se encuentran: transparencia (conocer) debe ser activa con calidad en la información brindada; participación (hacer) como acción pública donde la ciudadanía se interese de formar individual, grupo o colectivamente, en la toma de decisiones junto con el gobierno, para lograr soluciones en la atención de los problemas públicos;  y colaboración (crear) visión relacional donde se abordan los asuntos públicos para crear situaciones de carácter colaborativo en la solución de problemáticas comunes.

En el caso del Estado peruano se necesita evaluar las “capacidades institucionales y establecer cuáles son las condiciones que le permitan crear capacidades sostenibles (…) Lo mejor sería comprometerse con la construcción de la capacidad con el fin de lograr que el gobierno funcione de manera efectiva en el ámbito nacional, subnacional e internacional”. (Valenzuela, 131: 2012)

En síntesis, comprender a Acemoglu y Robinson en el caso peruano corresponde analizar no solo en el ámbito político y económico, sino por el contrario contextualizar la economía peruana con su inicio de un Estado neoliberal y comprender el porqué de las acciones económicas actuales y los decisiones políticas se condiciona al establishment. Pensar en un Gobierno Abierto en el Perú, comprende evaluar las capacidades de la misma y además del grado de compromiso ciudadano.  

La crisis que presenta el Estado peruano, no solo es causada por las instituciones políticas y económicas extractivas que se relacionan para generar –así mismas- beneficios económicos mutuos. Sino también, depende principalmente, del grado de inacción que presenta la sociedad peruana frente a actos de corrupción.

La incertidumbre del panorama del desarrollo económico –para  mí– no se encuentra, principalmente en las instituciones políticas y económicas en el Perú, resulta interesante generar una autocrítica sobre la acción generada como ciudadano como generador de reformas, pluralista, interesado en el Estado de derecho, en los derechos de propiedad e igualdad de oportunidades. La pregunta es, entonces, ¿es ahora o todavía? Me gustaría pensar que es ahora.

Autor:

Cristian Shupingahua Lupuche – Manager de Relaciones
Gestión 360

Bibliografía

ACEMOGLU, Daron y James ROBINSON
2012 Los orígenes del poder, la prosperidad y la pobreza. Por qué fracasan los países. Grupo Planeta

ACOSTA, Bernardo
Instituto de Economía de la USFQ KOYUNTURA. Consulta: 20 de Abril de 2018
http://www.usfq.edu.ec/publicaciones/koyuntura/Documents/koyuntura_2014-41.pdf

ALTHAUS, Jaime
2011     La promesa de la democracia: marchas y contramarchas del sistema                           político en el Perú. Lima: Planeta.

ARÉVALO, María De los Ángeles
Índice de Percepción de Corrupción: el Perú subió cinco posiciones y ocupó el puesto 96 de 180
http://semanaeconomica.com/article/legal-y-politica/marco-legal/268349-indice-de-percepcion-de-corrupcion-el-peru-subio-cinco-posiciones-pero-mejora-es-insuficiente/

CONFIDENCIAL
2015    James Robinson, coautor de “Por qué Fracasan las Naciones”. Consulta: 20                  de Abril de 2018

DE LA CORTE, Carmona
Schumpeter y la destrucción de instituciones por los innovadores. Consulta: 20 de Abril de 2018                              <ahref=”https://repositorio.comillas.edu/rest/bitstreams/7354/retrieve”>https://repositorio.comillas.edu/rest/bitstreams/7354/retrieve

FUNDACION RAFAEL DEL PINO
2016  James  Robinson – Versión en Castellano. Consulta: 20 de Abril de 2018            https://www.youtube.com/watch?v=O31_qKh9zK4

GANOZA, Carlos y Andrea STIGLICH
2015       El Perú esta calato. El falso milagro de la economía peruana y las trampas                      que amenazan nuestro progreso. Lima: Editorial Planeta Perú.

GHEZZI, Piero y José GALLARDO
2013       Qué se puede hacer con el Perú. Ideas para sostener el crecimiento                                 económico en el largo plazo. Piero Ghezzi, José Gallardo. 1ra edición. Lima:                 Universidad del Pacifico: Pontificia Universidad Católica.

POWELL, Walter y DIMAGGIO, Paul
1999      El nuevo institucionalismo en el análisis organizacional. Estudio                                      introductorio de Jorge Javier Romero. México: Fondo de Cultura Económica.

QUIROZ, Alfonso
2013       Historia de la corrupción en el Perú. 2da edición. Ed. Lima, IEP.

TEDx Talks
2017    Cómo combatir la corrupción. Morelia. Consulta: 20 de Abril de 2018                https://www.youtube.com/watch?v=Eglf3WWNMb0

VALENZUELA, Rafael.
2015   El fortalecimiento de las capacidades institucionales como vía                                       para implementar un Gobierno Abierto. Politai

VERGARA, Alberto
2013   VERGARA, A. Ciudadanos sin República : ¿Cómo sobrevivir en la                                  jungla política peruana?. Lima: Planeta


Inteligencia emocional: un factor decisivo para el éxito personal y profesional

[Visto: 3162 veces]

El éxito hoy en día es un tema bastante estudiado, el camino hacia este parece ser el camino hacia el encuentro del elixir de la vida eterna para los alquimistas. Y un claro ejemplo de este afán es la existencia de distintos libros, conferencias, talleres y hasta cursos que proporcionan una guía sobre los factores que determinan tanto el éxito personal como el profesional.

Al principio, se relacionaba el éxito con el coeficiente intelectual (IQ) de una persona, el cual podía dar un estimado sobre la inteligencia en general. Sin embargo, esto no fue suficiente cuando los resultados de diversas investigaciones pusieron en duda si dicho indicador era el único determinante para alcanzar el éxito. Por ejemplo, uno de ellos, dio a conocer que el 70% de las veces, las personas con coeficiente promedio superan en desempeño a aquellos cuyos resultados IQ son más altos (Gestión, 2018).

De esta manera, se desarrollaron diversas teorías que trataron de explicar y comprender a la  inteligencia, tales como la Teoría de las Inteligencias Múltiples o la Inteligencia Emocional, investigación que popularizó a Daniel Goleman (Regarder, s/f).

Entonces, ¿a qué hace referencia la Inteligencia Emocional? y ¿de qué manera, esta podría estar relacionada con el éxito?

Las emociones son entendidas como estados afectivos complejos que se desatan y que cumplen una función de adaptación del organismo, al favorecer nuestra reacción frente a un estímulo; siendo las cinco principales: alegría, tristeza, ira, miedo y desagrado. Frente a ello, según Goleman (2000), la inteligencia emocional es la capacidad que tiene una persona para identificar y autogestionar sus propias emociones y al mismo tiempo de comprender las del resto en distintas situaciones.

No obstante, de acuerdo al autor,  para lograr desarrollar la inteligencia emocional, será necesario considerar ciertas dimensiones que abarcan tanto una destreza enfocada en el manejo de uno mismo como de aquellas vinculadas al manejo de las relaciones con los demás.

En el primer grupo, se encuentra  la autoconciencia, la cual hace referencia al hecho de tener una profunda comprensión de nuestras emociones, virtudes y talentos, pero también de nuestras debilidades y necesidades (Goleman, 2004, p.4). Por ejemplo, la elección sobre qué carrera escoger es una decisión que debe ser planificada como resultado de una autoevaluación realista. Como segundo factor se encuentra la autorregulación. Esta se enfoca en canalizar nuestros impulsos y sentimientos. Un caso común, sería el no apresurarse a llevar un sinnúmero de cursos. En tercer lugar,, considerado muchas veces como el componente más importante: la motivación. Este se relaciona al impulso y al optimismo de obtener logros más allá de las expectativas  (Goleman, 2004, p.7).Por ejemplo, al escoger los cursos se tienen un optimismo de poder lograr mejores resultados que el ciclo anterior.

En el segundo grupo, según Goleman, se ubican las habilidades sociales, las cuales influyen en el hecho de tener un amplio círculo de conocidos y un don para hallar puntos comunes con diferentes tipos de personas. Esto no quiere decir que socialicen constantemente, sino que son conscientes de que nada importante se logra trabajando solo, por lo cual son especialistas en la gestión de equipos (2004, p.10). Como segundo componente, se encuentra la empatía, la cual se orienta al fomento de la consideración de los sentimientos y emociones de los demás. Asimismo, juega un rol importante en el proceso de la toma de decisiones (Goleman, 2004, p.7). Por ejemplo, el decidir llevar una cantidad determinada de cursos, implica el comprender la situación económica del apoderado.

Así, saber identificar y desarrollar estas habilidades, representan un reto para todo estudiante y profesional que busca diferenciarse de los demás, ya que no solo implica conectarse emocionalmente con uno mismo, sino también con los demás. En este sentido, este factor permite identificar al futuro colaborador que posee un máximo potencial para ser un líder, en otras palabras: un “high potential”, quienes son valorados y reconocidos por ubicarse en los cargos más altos al permitir y facilitar la construcción de una fuerte relación con sus pares (Bradberry).

 Por ello; la inteligencia emocional es un factor relevante que es tomado en cuenta al momento de aplicar a cualquier puesto de trabajo. “Son «habilidades que la tecnología nunca va a dominar», como indicó, Vikas Pota, director ejecutivo de la Fundación Verkey. Y así se abre la puerta a una nueva veta de empleo” (Gestión, 2017).

Por todo lo anterior, la inteligencia emocional puede ayudar a trazar un camino hacia el éxito. Sin ánimos de querer dar una fórmula secreta para el éxito, estoy convencida que interesarse por desarrollar esta inteligencia puede hacer un gran cambio en nuestras vidas personales y profesionales.

Autor:
Julissa Rivera Vega – Senior Manager de Gestión de Talento Humano
Gestión 360

Referencias:

-Bradberry, T [Expok RSE]. (2015 Abril 1). La inteligencia emocional y el liderazgo responsable: Travis Bradberry. [Video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=7plaHMDs6aw
-Gestión. (28 de setiembre de 2017). Inteligencia emocional, la base del éxito laboral en el futuro. Recuperado de https://gestion.pe/tendencias/management-empleo/inteligencia-emocional-base-exito-laboral-futuro-144354
-Gestión. (27 de marzo de 2018). ¿Qué es la inteligencia emocional y por qué la necesitas?.  Recuperado de https://gestion.pe/economia/management-empleo/inteligencia-emocional-necesitas-230263
-Goleman, Daniel. (2000). La inteligencia emocional. Barcelona: Javier Vergara
-Goleman, D. (2004). ¿Qué hace a un líder?. Harvard Business Review, (-), pp. 1-15.
-Regader, B. (-). ¿Qué es la Inteligencia Emocional? Descubriendo la importancia de las emociones. Psicología y Mente Recuperado de https://psicologiaymente.net/inteligencia/inteligencia-emocional
-Viéitez, S. (17 de enero de 2013). ¿Cuáles son las emociones primarias?. La mente es maravillosa Recuperado de https://lamenteesmaravillosa.com/cuales-son-las-emociones-primarias/


Suscribirse por correo

Completamente libre de spam, retírate en cualquier momento.