LA ENTREVISTA DE ADMISIÓN A LA UNIVERSIDAD
El ingreso a las universidades, sobre todo las particulares, tiene distintas modalidades, una de las cuales desde hace ya varios años está acaparando la atención tanto de los jóvenes postulantes, como de sus padres, nos referimos al proceso de admisión por entrevistas personales. Muchas preguntas surgen ante esta modalidad: ¿Cómo presentarse a la entrevista? ¿Cómo comportarse para generar el clima adecuado? ¿Qué es lo que preguntan y qué evalúan? ¿Cómo demostrar seguridad?
Antes de responder a estas preguntas tenemos que tener en cuenta que toda entrevista es un intercambio de información en dónde la atención se centra no solo en lo que el entrevistado dice, sino también en cómo lo dice, es decir, se presta especial atención a lo que uno comunica no verbalmente.
Para comenzar, el joven debe tener claro el objetivo que persigue al enfrentarse a esta situación, es decir, el obtener el ingreso a la universidad y a la facultad elegida; si se tienen claros esos puntos ya se ha avanzado la mitad del camino.
Otro de los puntos más importantes al momento de que el joven se presenta a su entrevista de admisión, es el de guardar la calma y controlar los nervios, ya que ante una situación estresante se pueden bloquear los pensamientos y en casos extremos perder la ilación de lo que se desea comunicar.
El tercer punto a tener en cuenta es ser verás en la información que se brinde en la entrevista, pues, cuando uno trata de engañar u ocultar información, la ansiedad aumenta y nuestro lenguaje no verbal nos puede poner en evidencia, dificultando nuestra evaluación y puede perjudicar el ingreso a la universidad.
Las preguntas pueden variar mucho entre un joven y otro, y también dependerán de la experiencia y enfoque de los entrevistadores, por lo que los jóvenes deben estar preparados para responder a cualquier tipo de pregunta, desde temas de actualidad nacional e internacional, temas de cultura general y también manejar información relacionada a la universidad y carrera a la que postulan; tampoco se debe dejar de lado el autoconocimiento, el saber reconocer tanto fortalezas como debilidades y estar dispuestos a hablar de proyectos y objetivos a futuro.
¿Cómo presentarse a la entrevista? La vestimenta debe ser formal, pero no exagerar, un pantalón de vestir y una camisa o blusa da la impresión de formalidad necesaria, eso sí, zapatos sport-elegante, evitando presentarse en zapatillas. No debemos olvidar también detalles como el saludar a los entrevistadores al ingresar, utilizar un lenguaje formal pero sencillo, no muy rebuscado, pues el querer utilizar palabras complejas para impresionar usualmente puede dar la impresión opuesta.
Antes de responder a las preguntas que se formulen, tomarse un par de segundos para pensar bien en la respuesta, ordenando las ideas y la información que se desea comunicar. Responder cuando se esté seguro de la respuesta y si no se ha entendido la pregunta, pedir que se repita. Evitar usar con mucha frecuencia expresiones como “no sé”, “tal vez” o “quizás”.
Como punto final, los jóvenes no deben de olvidar que el proceso de entrevista es una oportunidad para realizar preguntas. Al formular preguntas uno demuestra interés por la universidad y por la carrera, además de aprovechar la ocasión y poder resolver las dudas que aún se tengan. En este caso, Perfil ofrece asesoría para una orientación vocacional óptima y una adecuada entrevista una vez definida la carrera elegida.
Por Sandra Grados Galván, Consultora Organizacional de PERFIL. (http://www.perfil.com.pe).
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