Alla por el año 1991 un antiguo profesor de religión nos recomendaba escuchar un grupo de cantantes mexicanos que según él transmitían buenos mensajes en sus canciones. Estos jóvenes se habían hecho conocidos a través de un remake del mítico tema Voyage Voyage de la cantante francesa Desireless y estaban en la cúspide de su popularidad. Entre sus temas más sonados figuraban “Vuela, Vuela” y “40 grados” que arrancaban suspiros a las quinceañeras de entonces.
Por mi parte les dejo con una de sus mejores canciones que hasta ahora escucho de vez en cuando: “Las Palabras”
más. No parecen ser mentira ni parecen
ser verdad. Y se dicen muy de prisa o se dicen
sin pensar. Van y vienen con la brisa como el
agua del mar. Las palabras.
El domingo me encadenas a una copa de
champán. Pero el lunes no te acuerdas de
invitarme a cenar. ¿Qué me importa
lo que digas si no lo quiero escuchar? si es tu
voz la que acaricia y me hace soñar? Las
palabras.
Las palabras son tan vanas cuando no se dicen
con el corazón. De la nada se disparan.
Pero si no tienen alma aunque
brillen como el sol
que se vayan con el último adiós.
¿Quién te quiere?
¿Quién te extraña?
¿Quién te mira como yo?
¿Quién te lleva a casa un día
y otro día y el peor?
¿Quién te llama por teléfono?
¿Quién te canta una canción?
¿Quién te escribe si estás
lejos? ¿Quién te habla de amor?
Renzo
