El 13 de junio de 1928, nació John Forbes Nash, matemático estadounidense famoso no solo por sus grandes aportes en Teoría de Juegos y Geometría Diferencial, sino también por su excéntrica vida, en la cual se basó la película Una Mente Brillante.
Desde pequeño, Nash mostró un gran interés en libros, mas no en relacionarse con niños de su edad. Sus padres lo motivaban comprándole libros de ciencia y llevándolo a actividades sociales, como deportes y bailes, pero para Nash, esas eran distracciones tediosas de sus libros y experimentos.
Su interés en matemática inició a los 14 años, con el libro titulado “Los Grandes Matemáticos”, de Eric Bell. Luego de que Nash lograse probar por su cuenta algunos resultados de Fermat mencionados en el libro, encontró una emoción por las matemáticas, en contraste a lo que le habían enseñado en el colegio sobre esta disciplina.
Ingresó a la universidad con la intención de convertirse en un ingeniero químico, pero debido a su ávido interés en matemática, luego de llevar cursos en Cálculo Tensorial y Relatividad, y gracias a la persuasión de varios profesores de matemática donde estudiaba, optó por convertirse en un matemático.
Nash era fuerte físicamente, lo cual evitó que sus compañeros le peguen, pero aún así fue víctima constante de burlas, pues lo veían como una persona extraña e inmadura que solía hacer berrinches infantiles.
En la universidad, mostró tendencias homosexuales, por las cuales también fue humillado. Cuando era víctima de bromas pesadas, Nash reaccionaba retando a sus abusadores con problemas de matemática, aunque aún así perdío varias veces.
Lo aceptaron en Harvard, Princeton, Chicago y Michigan, pero una vez que se le ofreció la beca más prestigiosa con la que Princeton contaba, decidió estudiar ahí.
Nash tenía el hábito de faltar a clases, incluso en Princeton. Sin embargo, en vez de aprender los temas leyendo libros, él optaba por desarrolar nuevos temas por su su cuenta; método que tuvo un impacto positivo en convertirlo en uno de los matemáticos más originales y creativos.
Una vez que Einstein llegó a Princeton, Nash fue a contarle sobre una idea que tuvo sobre la gravedad; mas, luego de explicarle conceptos matemáticos complicados por una hora, Einstein le sugirió que vaya a aprender más física. Supuestamente, un físico publicó una idea similar unos años después.
En 1950, Nash recibió su doctorado de Princeton, con una tesis titulada “Juegos no cooperativos”. El verano de ese año, laboró para la RAND Corporation, donde su trabajo en Teoría de Juegos lo convirtió en un experto destacado en el conflicto de la Guerra Fría. Su función consistía en intentar aplicar Teoría de Juegos a las estrategias militares y diplomáticas.
De vuelta en Princeton, en el otoño de 1950, comenzó a trabajar seriamente en problemas matemáticos puros. Nash ya había obtenido resultados en variedades y variedades algebraicas antes de escribir su tesis sobre Teoría de Juegos. Su famoso teorema, según el cual cualquier variedad compacta real es difeomorfa a la componente de una variedad real, fue considerado por Nash como un posible resultado al que recurrir si su trabajo sobre Teoría de Juegos no se consideraba adecuado para una tesis doctoral.
Su investigación sobre la teoría de las variedades algebraicas reales, la geometría riemanniana, las ecuaciones parabólicas y elípticas fue extremadamente profunda y significativa en el desarrollo de todos estos temas.
Los resultados sobresalientes que Nash había obtenido en el transcurso de unos pocos años lo pusieron en competencia por una Medalla Fields de 1958, pero dado que su trabajo sobre ecuaciones parabólicas y elípticas aún no se había publicado cuando el comité tomó su decisión, no lo logró. Tampoco tuvo suerte con la Medalla Fields de 1962, puesto que su enfermedad mental destruyó su carrera mucho antes de que se seleccionen los ganadores.
Nash estableció una relación con una de sus estudiantes en MIT, Alicia Larde, con quien se casó en 1957. El siguiente año, Alicia ya estaba embarazada, pero, un par de meses más tarde, a fines de 1958, el estado mental de Nash se volvió muy perturbado.
Norbert Wiener fue uno de los primeros en reconocer que las excentricidades extremas y los problemas de personalidad de Nash eran en realidad síntomas de un trastorno médico. Después de meses de comportamiento extraño, Alicia hizo que su esposo fuera hospitalizado involuntariamente en el Hospital McLean, un hospital psiquiátrico privado en las afueras de Boston.
Tras su liberación, Nash abruptamente renunció de MIT, retiró su pensión y se fue a Europa, donde tenía la intención de renunciar a su ciudadanía estadounidense. Alicia dejó a su hijo recién nacido con su madre y siguió al enfermo Nash, a quien logró deportar de regreso a Estados Unidos.
Después de su regreso, los dos se establecieron en Princeton, donde Alicia consiguió un trabajo. La enfermedad de Nash continuó, transformándolo en una figura aterradora. Pasó la mayor parte del tiempo dando vueltas por el campus de Princeton, hablando de sí mismo en tercera persona con el nombre de “Johann von Nassau”, escribiendo postales sin sentido y haciendo llamadas a sus antiguos colegas, a quienes les hablaba de numerología y sobre los asuntos políticos mundiales.
En 1961, Alicia, la madre de John y su hermana Martha tomaron la difícil decisión de enviarlo al Trenton State Hospital en Nueva Jersey donde soportó la terapia del coma insulínico, un tratamiento agresivo y arriesgado, cinco días a la semana durante un mes y medio. Siguió un largo episodio que incluyó períodos de tratamiento hospitalario, recuperación temporal y luego tratamiento adicional.
El siguiente año, Alicia se divorció de Nash.
En 1970, Alicia trató de ayudarlo tomándolo como huésped, pero Nash parecía estar perdido en el mundo, alejado de la sociedad común, aunque pasaba gran parte de su tiempo en el Departamento de Matemáticas de Princeton.
En la década de 1990, Nash se recuperó de la esquizofrenia que sufría desde 1959. Además, su habilidad para producir matemática de muy alto nivel no lo dejó totalmente.
En 1994, Nash fue galardonado con el Premio Nobel de Economía por su trabajo en Teoría de Juegos.
Nash y Louis Nirenberg recibieron el premio Abel en 2015 por sus importantes contribuciones a la teoría de ecuaciones diferenciales parciales no lineales y sus aplicaciones en Análisis Geométrico. Unos días después de recoger su premio en Noruega, Nash y su esposa fallecieron en un accidente automovilístico en Nueva Jersey.
Fuente:
http://www-history.mcs.st-and.ac.uk/Biographies/Nash.html