A inicios de este año, cuando Wilder Meléndez Vargas era voceado y propuesto por los pobladores para que los represente en la contienda electoral, como candidato a la alcaldía de Longar,  se inició una persecución política y guerra sucia en contra de Wilder Meléndez, que no solo ha manchado el principio del debido proceso, también ha violentado la voluntad popular democrática porque se pretende sin éxito sacar de la carrera electoral a este candidato a cualquier precio.

El candidato Wilder Meléndez Vargas lleva una demanda en su contra por la supuesta falsificación de documentos; la misma que toma forma y fuerza conforme el nombre de este candidato va tomando presencia, popularidad y liderazgo en la intensión de voto en la población. Hecho que para algunos candidatos, el nombre de Wilder Meléndez Vargas, era -y es considerado hasta ahora- como una amenaza en sus propósitos electorales, con la finalidad de hacerse del poder.

Sin embargo, el meollo del asunto no es tanto la sentencia impuesta a Wilder Meléndez, pues la sanción dada solo es para distraer a la gente y así truncar la voluntad democrática de los ciudadanos, confundiéndolos y obligándolos a tomar una decisión que no quieren en estas votaciones del 5 de octubre.

Los hechos a los que me apoyo para respaldar lo que afirmo, corresponden a situaciones manejadas por personas externas al Poder Judicial de la provincia de Rodríguez de Mendoza, que están muy ligadas al proceso electoral en Longar, es decir, la sentencia obedecería a órdenes de algún candidato desesperado que busca sacar provecho de la situación (guerra sucia) para llegar al sillón municipal. Esto tiene sentido por la filtración de documentos privados sobre este juicio, los mismos que han sido expuestos en reiteradas ocasiones en las redes sociales por pseudos nombres o usuarios fantasmas del Facebook, con la complicidad de malos trabajadores del Poder Judicial. Los documentos mostrados ilegalmente son totalmente reservados, que solo corresponden al Poder Judicial, a los abogados de las partes involucradas y a los mismos involucrados, los mismos que deben guardar la confidencialidad para no violar el debido proceso.  En ese sentido, va la pregunta, ¿quién está detrás del robo de documentos del Poder Judicial, acaso, un candidato de Longar?

Como se dijo, la sentencia no busca esclarecer un hecho ni mucho menos sancionar a Wilder Meléndez; lo que busca esta sentencia es favorecer a un candidato de Longar, creando un psicosocial en la población, al mismo estilo del gobierno dictatorial fujimorista, allá por la década del noventa, con la falsa ilusión de inhabilitar al mencionado candidato, Wilder Meléndez, de la contienda electoral.

En ese sentido, la sanción impuesta en Primera Instancia al candidato Wilder Meléndez no lo saca de la carrera electoral, como algunos desubicados piden al JNE por Facebook, mas bien reafirma su candidatura y asienta su liderazgo en la población longarina, posicionándolo en un contundente primer lugar en estas elecciones. En otras palabras, las maniobras hechas por este desesperado candidato no solo no han tenido efecto en la población, sino que ha reafirmado dos cosas: la primera, que existe una persecución política y guerra sucia en contra de Wilder Meléndez, de parte un candidato conocido; y, la segunda, que el candidato Wilder Melendez Vargas es el favorito para ganar las elecciones municipales.

Por consiguiente, toda esta guerra sucia, en forma de: presiones mediáticas, psicosociales, sentencias electoreras, persecuciones políticas y otras artimañas en contra de Wilder Meléndez Vargas, son jugarretas antipolíticas y antidemocráticas que son usadas no tanto para perjudicar al candidato Meléndez. Esta sentencia, en realidad, trata de perjudicar los intereses del distrito de Longar, porque los que pretenden sacar a este candidato de la contienda electoral, no quieren que un candidato de verdad -como es Wilder Meléndez- llegue a la alcaldía de nuestro querido distrito. Esto debido a que existen candidatos oportunistas que quieren llegar a cualquier precio a la Municipalidad para saquearla, dejando a los pobladores que sigan viviendo en el atraso y abandono total.

Finalmente, no caigamos en jugarretas o en el juego antipolítico de cierto candidato desesperado por llegar a la alcaldía, mantengamos firme nuestro anhelo de ver a un Longar desarrollado, donde se viva con bienestar y progreso para todos por igual. No nos dejemos sorprender por psicosociales que violenten nuestras decisiones. Conservemos firmes nuestras esperanzas, porque el candidato Wilder Meléndez Vargas está más fuerte y en carrera electoral que nunca…

Por último, el candidato Wilder Meléndez Vargas, haciendo uso de su derecho a la defensa ha apeado el fallo dado en Primera Instancia, porque a todas luces esta es una sentencia mediática y electorera, que ha vulnerado el principio del debido proceso con el único objetivo de sacarlo de la carrera electoral. Asimismo, ha instado a la población longarina que no se deje engañar con viejas y sucias artimañas electoreras. Del mismo modo, alienta a mantener la esperanza de tener un distrito desarrollado con bienestar para todos, porque Wilder Meléndez Vargas está más firme y fuerte en la carreta electoral, gracias al apoyo y a la voluntad popular de la gente (su gente).

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