Averroes: filósofo y lector de Aristóteles
- Introducción
Ernst Gombrich cuenta que los musulmanes comenzaron su expansión militar con un espíritu enardecido y deseoso de conquista. El mismo estaba motivado, entre otras razones, por las enseñanzas de su fundador y guía, Mahoma, quien conminó a su pueblo a extender la nueva enseñanza de dios hasta los rincones más alejados. Sin embargo, y es lo que resalta luego Gombrich, este espíritu violento se apaciguó y se convirtió en un deseo de conquista intelectual. Ahí empezaron a aprender de todos los pueblos que habían dominado y a traducir a su lengua, el árabe, los diversos textos que consideraron de gran valor. Así es como llegan hasta nosotros los principales textos filosóficos de la antigua Grecia. Con los años, el mundo árabe ha ganado reconocimiento en el rol de conservación del pensamiento griego y medieval. Situación novedosa y gratificante porque hace poco tiempo su mención era anecdótica, por no decir, desdeñosa. Actualmente, y en un panorama renovado, se puede reconocer con más detalle el aporte de los primeros pensadores, filósofos y comentadores del mundo árabe sobre los textos fundamentales de los pensadores griegos. Entre ellos, surge fulgurante la imagen de Averroes, el comentador de Aristóteles, uno de los pensadores más complejos y llamativos de la historia. Pero, ¿quién fue Averroes?, ¿cuál fue su pensamiento?, ¿fue solo un comentador o fue un filósofo propiamente? Estas preguntas serán atendidas en la siguiente nota.
Resumen
-El nombre Averroes es la versión latina de Abu-l Walid Muhammad ibnRusd, importante filósofo árabe nacido en Córdoba en el 1126 después de Cristo. Perteneció a una reconocida familia de legisladores. Así, fue jurista pero también médico, astrónomo y filósofo. Murió en Marruecos en el 1186.
-Los aportes de Averroes se pueden distinguir en tres áreas: el derecho, la medicina y, claro, la filosofía. Sin dejar de lado, desde un punto de vista más general, sus alcances en ciencias y astronomía.
-Averroes creía que la razón y la ley divina no eran incompatibles, sino que podían complementarse para lograr una comprensión más profunda de la ley. Según su idea, si la verdad es una, todos los caminos transitan hacia ella.
-Averroes creía que la medicina no solo debía basarse en la teoría y el conocimiento teórico, sino también en la observación cuidadosa de los pacientes y en la experiencia práctica.
-Se pueden organizar los aportes de Filosofía de Averroes en torno a tres tesis puntuales: a) el primado de la razón y de la filosofía, b) la eternidad del mundo y c) la unidad del intelecto humano.
- Vida temprana
El nombre Averroes es la versión latina de Abu-l Walid Muhammad ibnRusd, importante filósofo árabe nacido en Córdoba en el 1126 después de Cristo.
Perteneció a una conspicua familia de legisladores: su padre había sido cadí de Córdoba; su abuelo desempeñó este mismo cargo y fue considerado una autoridad en derecho malikita, y se convirtió en consejero de varios soberanos y príncipes.
Averroes continuó la tradición jurídica de la familia y alcanzó, a temprana edad, renombre de entendido en leyes gracias a su libro Punto de partida del jurista supremo y de llegada del jurista medio. Sin embargo, su formación académica formal comienza con el estudio de materias teológicas y literarias. Se formó también en medicina, área en la que ganó renombre. Asimismo, estudió Astronomía en el Almagesto y Filosofía siguiendo las obras de Avempace, IbnBayya, filósofo hispano árabe muerto en 1139.
Averroes gozó rápidamente, y a lo largo de su vida, del reconocimiento de ilustrado: su fama era tal que sus biógrafos indican que desde su juventud hasta su muerte no cesó de estudiar, salvo el día de su boda y el de la muerte de su padre. Finalmente, murió en Marruecos en el 1186.
- Cargos de poder.
El lugar de Averroes dentro del poder árabe es ampliamente conocido. El primer califa ‘Abd al-Mumin (1130-1163) le confió diversas misiones de corte político; Yusuf (1163-1184), el califa siguiente, lo mantuvo cerca también de su grupo de poder. Este soberano era ilustrado y gustaba, según se cuenta, discutir temas filosóficos: él mismo planteó cuestionamientos a Averroes cuando le fue presentado por el médico de la corte, IbnTufayl, otro filósofo conocido en Occidente por la novela místico-filosófica HayyibnYaqzan.
Averroes reconocía los riesgos de practicar Filosofía en un ambiente fuertemente religioso; pero cuando vio que el califa planteaba estos temas sin problemas, conquistó con su doctrina el ánimo de esta autoridad. Este retribuyó el ejercicio de Averroes con regalos: un suntuoso abrigo de pieles y una bella cabalgadura. Sin que dichos obsequios fuesen suficientes, lo nombró médico de corte y le confió, en España y en Marruecos, una serie de misiones que culminaron en 1182 con el nombramiento de cadí de los cadíes de Córdoba. Bajo el reinado del tercer califa, Yaqub al-Mansur (1184-1199), continuaron los honores; pero en 1195, cediendo ante las presiones de teólogos temerosos del pensamiento filosófico, se publicó un decreto contra los cultivadores de estas disciplinas. En esta situación política, se confinó a Averroes al exilio en Lucena, a poca distancia de Córdoba. Este ya había experimentado el disgusto de ver cómo se quemaban sus obras en la plaza pública y de ser expulsado, juntamente con su amigo IbnZuhr (Avenzohar), de la mezquita por fanáticos religiosos. Tres años después, en 1198, el califa revocó sus edictos y volvió a llamar a Averroes. El filósofo murió pocos meses después en Marruecos en diciembre de dicho año.
- Aporte de Averroes.
Los aportes de Averroes se pueden distinguir en tres áreas: el derecho, la medicina y la filosofía. Ahora revisaremos con cierto detalle estos alcances.
- Aportes en derecho.
Escribió una valiosa obra de Fiqh o Derecho islámico, la Bidaya, que dedica al estudio de los fundamentos del Derecho. En él se presenta un análisis comparativo de las diferentes escuelas jurídicas islámicas.
Una de las contribuciones más importantes de Averroes al derecho fue su interpretación racionalista de la Sharia, la ley islámica, que se basaba en la razón y la lógica, así como en el conocimiento y la comprensión de la realidad. Averroes creía que la razón y la ley no eran incompatibles, sino que podían complementarse para lograr una comprensión más completa y profunda del Derecho. Según su idea, si la verdad es una, todos los caminos transitan hacia ella.
Otra de las contribuciones de Averroes al derecho fue su enfoque en la ética y la justicia. Averroes creía que la ley islámica debía ser justa y equitativa, y que los jueces debían tener en cuenta las circunstancias individuales de cada caso para tomar decisiones justas. Este es un pensamiento fuertemente aristotélico aplicado al derecho.
Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la teoría legal islámica. En particular, en lo que respecta a la relación entre la ley divina y la ley humana, y cómo la interpretación y aplicación de la ley deben realizarse en el contexto de una sociedad en constante evolución.
- Aportes en medicina y ciencia.
Sus contribuciones a la medicina se centraron principalmente en la traducción y comentario de las obras de Hipócrates y Galeno, y en la integración de la medicina griega y la medicina islámica. Escribió diversos tratados entre los que destacan el Kulliyyât o Libro de las generalidades de la medicina, traducido al latín medieval bajo el título de Colliget de amplia difusión en el Renacimiento, así como los Comentarios a Galeno.
Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la medicina fue su enfoque en la observación y la experiencia empírica como base para la práctica médica. Averroes creía que la medicina no solo debía basarse en la teoría y el conocimiento teórico, sino también en la observación cuidadosa de los pacientes y en la experiencia práctica.
Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la farmacología. Puso singular atención a la preparación y uso de medicamentos, y en la descripción de los efectos terapéuticos de diversas sustancias. También escribió extensamente sobre la anatomía humana, incluyendo la estructura y función del cerebro y el sistema nervioso.
Otra de las contribuciones de Averroes a la medicina fue su defensa de la relación entre la salud física y mental, y la importancia del bienestar emocional para la salud en general. Averroes creía que la mente y el cuerpo estaban interconectados, y que la salud emocional era esencial para la salud física.
Sus contribuciones a la ciencia se centraron principalmente en la filosofía natural, la astronomía y las matemáticas.
Averroes planteó la necesidad de elaborar una astronomía física basada en la observación y no meramente en la matemática, ya que estaba insatisfecho con las teorías analíticas de Ptolomeo. Construyó así una filosofía estricta, sobre los cimientos del pensamiento griego, buscando especialmente un retorno a un aristotelismo integral, menospreciando la teología especulativa o kalâm.
Doscientas diecinueve tesis averroístas fueron censuradas por el obispo parisino Étienne Tempier en 1277 a causa de su incompatibilidad con la doctrina católica; sin embargo, muchas de éstas sobrevivieron en la literatura posterior de mano de autores como Giordano Bruno o Pico de la Mirandola. Así, encontramos una propuesta para la defensa de la superioridad de la vida contemplativa-teórica frente a la vida práctica.
Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la ciencia fue su defensa de la razón y la lógica como herramientas para comprender el mundo natural. Averroes creía que la razón y la observación eran fundamentales para la comprensión del universo, y que la verdad científica debía basarse en la evidencia empírica y en la lógica.
Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la astronomía, en particular en lo que respecta al estudio de los movimientos celestes y la relación entre el movimiento y el tiempo. Averroes también escribió sobre la geometría, la trigonometría y el álgebra, y sus contribuciones ayudaron a sentar las bases para la posterior Revolución Científica.
- Aportes en filosofía
Se pueden organizar los aportes de Filosofía de Averrores en torno a tres tesis puntuales: a) el primado de la razón y de la filosofía, b) la eternidad del mundo y c) la unidad del intelecto humano.
Averroes se esforzó en aclarar cómo piensa el ser humano y cómo es posible la formulación de verdades universales y eternas por parte de seres finitos. Para Averroes, la razón es la actividad superior del ser humano y la filosofía la cultiva mediante un doble ejercicio: la aplicación de las leyes lógicas que rigen el pensamiento y la reflexión sobre los datos que nos proporciona la observación del mundo natural. La filosofía es, por tanto, autónoma y se rige por una dialéctica interna que permite tanto superar el error y avanzar en el proceso de conocimiento del universo. Esta posición es contraria a la posición de los escolásticos para quienes la filosofía debía estar sometida a la teología.
Averroes lidia con la lógica para afirmar la eternidad del mundo y su relación con lo divino.
Se suele considerar a Averrores como un comentarista de la doctrina aristotélica. La noética, formulada en su obra Gran comentario, parte de la distinción aristotélica entre dos intelectos, el nouspathetikós (intelecto receptivo) y el nouspoietikós (intelecto agente o creador). Averroes postula también que el mundo es eterno, que el alma está dividida en dos partes, una individual perecedera, y otra divina y eterna correspondientes a los tipos de intelectos antes mencionados. Averroes distingue, además, entre dos sujetos del conocimiento: el sujeto mediante el cual esos inteligibles son verdaderos y el sujeto mediante el que los inteligibles son un ente en el mundo. Consecuentemente, el sujeto de la sensación existe fuera del alma; y, el sujeto del intelecto, dentro.
Asimismo, el filósofo cordobés se distancia de Aristóteles al subrayar la función sensorial de los nervios y reconocer en el cerebro la localización de algunas facultades intelectivas como la imaginación y la memoria. De esta manera, sitúa el origen de la intelección en la percepción sensible de los objetos individuales y concreta su fin en la universalización. Esta no existe fuera del alma: el proceso consiste en sentir, imaginar y, finalmente, captar el universal. En cualquier caso, es el intelecto el que proporciona la universalidad de lo que parte de las cosas sensibles. En su obra Tahâfut, expone la necesidad de que la ciencia se adecúe a la realidad concreta y particular, pues no puede existir conocimiento directo de los universales.
La ley religiosa, había dicho Averroes en su Tahafut al-tahafut, proporciona la misma verdad que el filósofo alcanza indagando en la causa y la naturaleza de las cosas; sin embargo, ello no implica que la filosofía actúe en modo alguno en los hombres cultos como sustituto de la religión: «los filósofos creen que las religiones son construcciones necesarias para la civilización (…)». La existencia de la religión es también necesaria para la integración del filósofo en la sociedad civil.
Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la filosofía fue su trabajo en la filosofía aristotélica, especialmente su comentario sobre las obras de Aristóteles. Averroes creía que la filosofía aristotélica era la mejor manera de entender el mundo natural y humano, y su comentario sobre las obras de Aristóteles ayudó a preservar y difundir la filosofía aristotélica durante la Edad Media.
Junto a ello, Averroes hizo importantes contribuciones a la metafísica, en particular en lo que respecta al estudio de la existencia y la esencia. Averroes creía que la existencia era el atributo más importante de los objetos, y que la esencia era simplemente la descripción de las propiedades que se pueden atribuir a los objetos. Otra de las contribuciones de Averroes a la filosofía fue su defensa de la razón y la lógica como herramientas para comprender el mundo y resolver problemas filosóficos. Averroes creía que la razón y la lógica eran las mejores herramientas para comprender la verdad, y que la filosofía debía basarse en la evidencia empírica y en la lógica.