Averroes: filósofo y lector de Aristóteles

  1. Introducción

Ernst Gombrich cuenta que los musulmanes comenzaron su expansión militar con un espíritu enardecido y deseoso de conquista. El mismo estaba motivado, entre otras razones, por las enseñanzas de su fundador y guía, Mahoma, quien conminó a su pueblo a extender la nueva enseñanza de dios hasta los rincones más alejados. Sin embargo, y es lo que resalta luego Gombrich, este espíritu violento se apaciguó y se convirtió en una deseo de conquista intelectual. Ahí empezaron a aprender de todos los pueblos que habían dominado y a traducir a su lengua, el árabe, los diversos textos que consideradon de gran valor. Así es como llegan hasta nosotros los principales textos filosóficos de la antigua grecia. Con los años, el mundo árabe ha ganado reconocimiento en el rol de conservación del pensamiento griego y medieval. Situación novedosa y gratificante porque hace poco tiempo su mención era anecdótica, por no decir, desdeñosa. Actualmente, y en un panorama renovado, se puede reconocer con más detalle el aporte de los primeros pensadores, filósofos y comentadores del mundo árabe sobre los textos fundamentales de los pensadores griegos. Entre ellos, surge fulgurante la imagen de Averroes, el comentador de Aristóteles, uno de los pensadores más complejos y llamativos de la historia. Pero, ¿quién fue Averroes?, ¿cuál fue su pensamiento?, ¿fue solo un comentador o fue un filósofo propiamente? Estas preguntas serán atendidas en la siguiente nota.

Resumen

-El nombre Averroes es la versión latina de Abu-l Walid Muhammad ibnRusd, importante filósofo árabe nacido en Córdoba en el 1126 después de Cristo. Perteneció a una conspicua familia de legisladores. Así, fue jurista pero también médico, astrónomo y filósofo. Murió en Marruecos en el 1186.

-Los aportes de Averroes se pueden distinguir en tres áreas: el derecho, la medicina y, claro, la filosofía. Sin dejar de lado, desde un punto de vista más general, sus alcances en ciencias y astronomía.

-Averroes creía que la razón y la ley divina no eran incompatibles, sino que podían complementarse para lograr una comprensión más completa y profunda de la ley. Según su idea, si la verdad es una, todos los caminos transitan hacia ella.

-Averroes creía que la medicina no solo debía basarse en la teoría y el conocimiento teórico, sino también en la observación cuidadosa de los pacientes y en la experiencia práctica.

-Se pueden organizar los aportes de Filosofía de Averrores en torno a tres tesis puntuales: a) el primado de la razón y de la filosofía, b) la eternidad del mundo y c) la unidad del intelecto humano.

 

  1. Vida temprana

El nombre Averroes es la versión latina de Abu-l Walid Muhammad ibnRusd, importante filósofo árabe nacido en Córdoba en el 1126 después de Cristo.

Perteneció a una conspicua familia de legisladores: su padre había sido cadí de Córdoba; su abuelo desempeñó este mismo cargo y fue considerado una autoridad en derecho malikita. De esta manera, se convirtió en consejero de varios soberanos y príncipes.

Averroes continuó la tradición jurídica de la familia y alcanzó, a temprana edad, renombre de entendido en leyes gracias a su libro Punto de partida del jurista supremo y de llegada del jurista medio. Sin embargo, su formación académica formal comienza con el estudio de materias teológicas y literarias. Se formó también en medicina, área en la que ganó renombre. Asimismo, estudió Astronomía en el Almagesto y Filosofía siguiendo las obras de Avempace, IbnBayya, filósofo hispanoárabe muerto en 1139.

Averroes gozó rápidamente, y a lo largo de su vida, del reconocimiento de ilustrado: su fama era tal que sus biógrafos indican que desde su juventud hasta su muerte no cesó de estudiar, salvo el día de su boda y el de la muerte de su padre. Finalmente, murió en Marruecos en el 1186.

  1. Cargos de poder.

El lugar de Averroes dentro del poder árabe es ampliamente conocido. El primer califa ‘Abd al-Mumin (1130-1163) le confió diversas misiones de corte político; Yusuf (1163-1184), el califa siguiente, lo mantuvo cerca también de su grupo de poder. Este soberano era ilustrado y gustaba, según se cuenta, discutir temas filosóficos: él mismo planteó cuestionamientos a Averroes cuando le fue presentado por el médico de la corte, IbnTufayl, otro filósofo conocido en Occidente por la novela místico-filosófica HayyibnYaqzan.

Averroes reconocía los riesgos de practicar Filosofía en un ambiente fuertemente religioso; pero cuando vio que el califa planteaba estos temas sin problemas, conquistó con su doctrina el ánimo de esta autoridad. Este retribuyó el ejercicio de Averrores con regalos: un suntuoso abrigo de pieles y una bella cabalgadura. Sin que dichos obsequios fuesen suficientes, lo nombró médico de corte y le confió, en España y en Marruecos, una serie de misiones que culminaron en 1182 con el nombramiento de cadí de los cadíes de Córdoba. Bajo el reinado del tercer califa, Yaqub al-Mansur (1184-1199), continuaron los honores; pero en 1195, cediendo ante las presiones de teólogos temerosos del pensamiento filosófico, se publicó un decreto contra los cultivadores de estas disciplinas. En esta situación política, se confinó a Averroes al exilio en Lucena, a poca distancia de Córdoba. Este ya había experimentado el disgusto de ver cómo se quemaban sus obras en la plaza pública y de ser expulsado, juntamente con su amigo IbnZuhr (Avenzohar), de la mezquita por fanáticos religiosos. Tres años después, en 1198, el califa revocó sus edictos y volvió a llamar a Averroes. El filósofo murió pocos meses después en Marruecos en diciembre de dicho año.

  1. Aporte de Averroes.

Los aportes de Averroes se pueden distinguir en tres áreas: el derecho, la medicina y, claro, la filosofía.

  • Aportes en derecho.

Escribió una valiosa obra de Fiqh o Derecho islámico, la Bidaya, que dedica al estudio de los fundamentos del Derecho. En él se presenta un análisis comparativo de las diferentes escuelas jurídicas islámicas.

Una de las contribuciones más importantes de Averroes al derecho fue su interpretación racionalista de la Sharia, la ley islámica, que se basaba en la razón y la lógica, así como en el conocimiento y la comprensión de la realidad. Averroes creía que la razón y la ley no eran incompatibles, sino que podían complementarse para lograr una comprensión más completa y profunda del Derecho. Según su idea, si la verdad es una, todos los caminos transitan hacia ella.

Otra de las contribuciones de Averroes al derecho fue su enfoque en la ética y la justicia. Averroes creía que la ley islámica debía ser justa y equitativa, y que los jueces debían tener en cuenta las circunstancias individuales de cada caso para tomar decisiones justas. Este es un pensamiento fuertemente aristotélico aplicado al derecho.

Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la teoría legal islámica. En particular, en lo que respecta a la relación entre la ley divina y la ley humana, y cómo la interpretación y aplicación de la ley deben realizarse en el contexto de una sociedad en constante evolución.

  • Aportes en medicina y ciencia.

Sus contribuciones a la medicina se centraron principalmente en la traducción y comentario de las obras de Hipócrates y Galeno, y en la integración de la medicina griega y la medicina islámica. Escribió diversos tratados entre los que destacan el Kulliyyât o Libro de las generalidades de la medicina, traducido al latín medieval bajo el título de Colliget de amplia difusión en el Renacimiento, así como los Comentarios a Galeno.

Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la medicina fue su enfoque en la observación y la experiencia empírica como base para la práctica médica. Averroes creía que la medicina no solo debía basarse en la teoría y el conocimiento teórico, sino también en la observación cuidadosa de los pacientes y en la experiencia práctica.

Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la farmacología. Puso singular atención a la preparación y uso de medicamentos, y en la descripción de los efectos terapéuticos de diversas sustancias. También escribió extensamente sobre la anatomía humana, incluyendo la estructura y función del cerebro y el sistema nervioso.

Otra de las contribuciones de Averroes a la medicina fue su defensa de la relación entre la salud física y mental, y la importancia del bienestar emocional para la salud en general. Averroes creía que la mente y el cuerpo estaban interconectados, y que la salud emocional era esencial para la salud física.

Sus contribuciones a la ciencia se centraron principalmente en la filosofía natural, la astronomía y las matemáticas.

Averroes planteó la necesidad de elaborar una astronomía física basada en la observación y no meramente en la matemática, ya que estaba insatisfecho con las teorías analíticas de Ptolomeo. Construyó así una filosofía estricta, sobre los cimientos del pensamiento griego, buscando especialmente un retorno a un aristotelismo integral, menospreciando la teología especulativa o kalâm.

Doscientas diecinueve tesis averroístas fueron censuradas por el obispo parisino Étienne Tempier en 1277 a causa de su incompatibilidad con la doctrina católica; sin embargo, muchas de éstas sobrevivieron en la literatura posterior de mano de autores como Giordano Bruno o Pico de la Mirandola. Así, encontramos una propuesta para la defensa de la superioridad de la vida contemplativa-teórica frente a la vida práctica.

Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la ciencia fue su defensa de la razón y la lógica como herramientas para comprender el mundo natural. Averroes creía que la razón y la observación eran fundamentales para la comprensión del universo, y que la verdad científica debía basarse en la evidencia empírica y en la lógica.

Además, Averroes hizo importantes contribuciones a la astronomía, en particular en lo que respecta al estudio de los movimientos celestes y la relación entre el movimiento y el tiempo. Averroes también escribió sobre la geometría, la trigonometría y el álgebra, y sus contribuciones ayudaron a sentar las bases para la posterior Revolución Científica.

  • Aportes en filosofía

Se pueden organizar los aportes de Filosofía de Averrores en torno a tres tesis puntuales: a) el primado de la razón y de la filosofía, b) la eternidad del mundo y c) la unidad del intelecto humano.

Averroes se esforzó en aclarar cómo piensa el ser humano y cómo es posible la formulación de verdades universales y eternas por parte de seres finitos. Para Averroes, la razón es la actividad superior del ser humano y la filosofía la cultiva mediante un doble ejercicio: la aplicación de las leyes lógicas que rigen el pensamiento y la reflexión sobre los datos que nos proporciona la observación del mundo natural. La filosofía es, por tanto, autónoma y se rige por una dialéctica interna que permite tanto superar el error y avanzar en el proceso de conocimiento del universo. Esta posición es contraria a la posición de los escolásticos para quienes la filosofía debía estar sometida a la teología.

Averroes lidia con la lógica para afirmar la eternidad del mundo y su relación con lo divino.

Se suele considerar a Averrores como un comentarista de la doctrina aristotélica. La noética, formulada en su obra Gran comentario, parte de la distinción aristotélica entre dos intelectos, el nouspathetikós (intelecto receptivo) y el nouspoietikós (intelecto agente o creador). Averroes postula también que el mundo es eterno, que el alma está dividida en dos partes, una individual perecedera, y otra divina y eterna correspondientes a los tipos de intelectos antes mencionados. Averroes distingue, además, entre dos sujetos del conocimiento: el sujeto mediante el cual esos inteligibles son verdaderos y el sujeto mediante el que los inteligibles son un ente en el mundo. Consecuentemente, el sujeto de la sensación existe fuera del alma; y, el sujeto del intelecto, dentro.

Asimismo, el filósofo cordobés se distancia de Aristóteles al subrayar la función sensorial de los nervios y reconocer en el cerebro la localización de algunas facultades intelectivas como la imaginación y la memoria. De esta manera, sitúa el origen de la intelección en la percepción sensible de los objetos individuales y concreta su fin en la universalización. Esta no existe fuera del alma: el proceso consiste en sentir, imaginar y, finalmente, captar el universal. En cualquier caso, es el intelecto el que proporciona la universalidad de lo que parte de las cosas sensibles. En su obra Tahâfut, expone la necesidad de que la ciencia se adecúe a la realidad concreta y particular, pues no puede existir conocimiento directo de los universales.

La ley religiosa, había dicho Averroes en su Tahafut al-tahafut, proporciona la misma verdad que el filósofo alcanza indagando en la causa y la naturaleza de las cosas; sin embargo, ello no implica que la filosofía actúe en modo alguno en los hombres cultos como sustituto de la religión: «los filósofos creen que las religiones son construcciones necesarias para la civilización (…)». La existencia de la religión es también necesaria para la integración del filósofo en la sociedad civil.

Una de las contribuciones más importantes de Averroes a la filosofía fue su trabajo en la filosofía aristotélica, especialmente su comentario sobre las obras de Aristóteles. Averroes creía que la filosofía aristotélica era la mejor manera de entender el mundo natural y humano, y su comentario sobre las obras de Aristóteles ayudó a preservar y difundir la filosofía aristotélica durante la Edad Media.

Junto a ello, Averroes hizo importantes contribuciones a la metafísica, en particular en lo que respecta al estudio de la existencia y la esencia. Averroes creía que la existencia era el atributo más importante de los objetos, y que la esencia era simplemente la descripción de las propiedades que se pueden atribuir a los objetos. Otra de las contribuciones de Averroes a la filosofía fue su defensa de la razón y la lógica como herramientas para comprender el mundo y resolver problemas filosóficos. Averroes creía que la razón y la lógica eran las mejores herramientas para comprender la verdad, y que la filosofía debía basarse en la evidencia empírica y en la lógica.

 

 

Ciudades en la Amazonía: las antiguas ciudadelas Upano

Introducción

Una antigua crónica atestigua los desencuentros que tuvieron los incas cuzqueños con los habitantes de la selva. Al parecer, los señores andinos, buscando entablar redes políticas y de comercio con las élites de las etnias amazónicas, presentaron sus obsequios, mujeres y una ceremonia propia de su grandeza. Sin embargo, parece que las etnias encontradas no entendían de estas jerarquías ni de vínculos políticos de sangre y parentesco. El trato, sencillamente, no se dio y los incas se llevaron una imagen bastante disminuida de los amazónico: fueron vistos como habitantes salvajes, dados a la diversión y sin organizaciones claras.

Es importante señalar, a su vez, que el narrador de esta historia fue un español y veía en los incas del relato un afán civilizador, muy similar al que se le atribuía a los españoles al llegar a América. Sea como sea, y con el añadido occidental del cronista de por medio, la imagen de los amazónicos que establecieron los incas en ese momento es la que se mantuvo y extendió a lo largo de los límites ecológicos y temporales de estos pueblos hasta nuestros días. Sumado, además, como se desprende del relato, a su falta de arquitectura y su carácter de pueblo aislados, teníamos la imagen de un pueblo, por decirlo menos, salvaje. Sin embargo, en los últimos años y a raíz de nuevas investigaciones, dichos prejuicios han empezado a caer del todo. En este texto atenderemos a uno de los más reciente e importantes descubrimientos realizados por la arqueología de mano de la tecnología: las ciudadelas Upano. Y con ello, poner en cuestión, principalmente, los dos prejuicios antes mencionados.

Resumen

-El descubrimiento fue realizado por un equipo internacional de científicos. Ellos encontraron una extensa red de ciudades antiguas, de hace 2.500 años, ocultas en la densa selva amazónica.

-Entre las ciudades había, intercalados, campos de cultivo rectangulares, y en las laderas que las rodeaban había terrazas donde se plantaban cultivos como el maíz, la yuca y el camote.

-El Lidar, el método de teledetección por láser utilizado en este descubrimiento, permitió a los investigadores visualizar más de 6.000 montículos y plataformas de tierra.

-El Lidar, el método de teledetección por láser utilizado en este descubrimiento, permitió a los investigadores visualizar más de 6.000 montículos y plataformas de tierra.

-Las primeras plataformas se estima que fueron construidas entre 500 años antes de nuestra era y unos 300 o 600 años después, coincidiendo con la época del Imperio romano.

-Aunque aún se está investigando, se cree que estas ciudades pertenecían a una cultura indígena avanzada que habitó la región antes de la llegada de los europeos.

-Los arqueólogos y expertos continúan investigando las ciudades Upano para determinar su extensión, función exacta y relación con otras culturas de la Amazonía. Esto incluye excavaciones, estudios de cerámica, análisis de restos humanos y otros artefactos encontrados en el área.

-Este descubrimiento desafía la percepción occidental tradicional de las civilizaciones amazónicas, mostrando que la región no solo albergaba a cazadores-recolectores, sino también a poblaciones urbanas complejas.

-Rostain insta a reconsiderar las opiniones despectivas sobre la Amazonía y a reconocer su rica historia y diversidad cultural

 

El descubrimiento

El descubrimiento fue realizado por un equipo internacional de científicos. Ellos encontraron una extensa red de ciudades antiguas, de hace 2.500 años, ocultas en la densa selva amazónica. Estas ciudades, al parecer pobladas densamente en su momento, pertenecían a una civilización agraria aún desconocida, según un reciente estudio publicado en la revista Science

El arqueólogo francés Stéphen Rostain, director de investigación en el Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS), detectó las primeras pistas de esta civilización, denominada “Upano”, hace 25 años. Luego, en 2015, una compañía contratada por el Gobierno de Ecuador utilizó tecnología Lidar para revelar la magnitud del asentamiento a través del entramado forestal: un tipo de tecnología de teledetección láser para medir distancias y generar mapas topográficos altamente detallados.

El artículo señala que “los principales núcleos ceremoniales, con plataformas monumentales, plazas y calzadas, son comparables en tamaño a los de otras grandes culturas del pasado, como la mexicana de Teotihuacán o la egipcia de la meseta de Guiza”. Esto apunta a que no solo se trata del entramado urbanístico más antiguo encontrado hasta ahora en dicha zona, sino también del más grande y organizado de la región. “La característica más notable del paisaje”, dice el artículo, “es el complejo sistema de carreteras que se extiende a lo largo de decenas de kilómetros”. Al parecer, las ciudades estaban conectadas entre sí por carreteras anchas y rectas, con barrios y casas por calles bien definidas. No es posible pensar en la ausencia de un proceso urbanístico planificado y con ello la presencia de una sociedad con alto nivel de complejidad social.

Entre las ciudades había, intercalados, campos de cultivo rectangulares, y en las laderas que las rodeaban había terrazas donde se plantaban cultivos como el maíz, la yuca y el camote. Por lo tanto, una conclusión relevante, que en conjunto con lo anterior, contradice la romantizada y, a la vez, menospreciante idea de la selva desconectada entre sí, es que “los habitantes prehispánicos de la Amazonia fueron notables constructores que modificaron intensamente su entorno y cambiaron la morfología de sus territorios y su cubierta vegetal”.

El Lidar, el método de teledetección por láser utilizado en este descubrimiento, permitió a los investigadores visualizar más de 6.000 montículos y plataformas de tierra. Estos constituían los cimientos de las viviendas. Los hallazgos superaron todas las expectativas, siendo calificados por Rostain como un ‘El Dorado’ científico.

Las primeras plataformas se estima que fueron construidas entre 500 años antes de nuestra era y unos 300 o 600 años después, coincidiendo con la época del Imperio romano. Este descubrimiento sugiere que la región amazónica albergó civilizaciones complejas mucho antes de lo previamente conocido. Veamos las características del descubrimiento.

Esta región es habitada por diversas etnias indígenas dentro de la espesa selva del valle de Upano, en la provincia amazónica de Morona Santiago, a 380 kilómetros al sureste de Quito. Las ciudades Upano fueron descubiertas en la cuenca del río con el mismo nombre, en una zona de densa selva amazónica.

El sitio arqueológico, ubicado al pie de la cordillera de los Andes, abarca más de 1.000 kilómetros cuadrados. Este complejo incluye una veintena de asentamientos interconectados por una red de carreteras y evidencia un nivel de urbanismo sin precedentes para su época en la Amazonía.

La localización del descubrimiento solo refuerza la idea que, en dicha zona, el intercambio fue bastante frecuente y dinámico. Es el denominado valle bajo, lugar donde la cordillera de los Andes presenta un área que posibilita el paso desde la Amazonía hacia la costa y en sentido contrario.

Los hallazgos arqueológicos incluyen estructuras que sugieren la existencia de asentamientos urbanos complejos, con plazas, calzadas, y posibles templos ceremoniales. Estas características indican una organización social y estructuras administrativas desarrolladas.

El descubrimiento arqueológico incluye cinco grandes asentamientos y 10 más pequeños, que se asumen como ciudades, extendidos en una superficie de 300 kilómetros cuadrados, cada uno densamente poblado y con estructuras residenciales y ceremoniales.

Las ciudades descubiertas presentan características urbanas avanzadas, con grandes calles rectas y una estructura en damero, comparables a las de Nueva York o Teotihuacán. Estas rutas no solo servían para el comercio, sino también para ceremonias. Los montículos más altos indican la presencia de espacios colectivos para rituales o fiestas, y los campos muestran una sociedad agraria avanzada.

Durante las excavaciones, los científicos encontraron numerosos artefactos domésticos. Estos incluyen granos, piedras de moler, utensilios y jarras de cerámica. Estos vestigios sugieren una sociedad nómada estratificada, probablemente con una autoridad central y una ingeniería avanzada.

Aunque aún se está investigando, se cree que estas ciudades pertenecían a una cultura indígena avanzada que habitó la región antes de la llegada de los europeos. Esto podría implicar que estas ciudades fueron centros importantes de poder político y religioso en la Amazonía ecuatoriana.

La datación establece la presencia de al menos cinco grupos humanos, entre ellos primero la cultura kilamope y la upano entre el 500 a. C. y los años 300 y 600 de nuestra era, y luego, tras un periodo de transición, grupos de la cultura huapula entre los 800 y 1.200. En la actualidad, las nacionalidades que habitan esa zona son la shuar y la achuar, aunque también existe gran presencia de colonos.

Los arqueólogos y expertos continúan investigando las ciudades Upano para determinar su extensión, función exacta y relación con otras culturas precolombinas de la Amazonía. Esto incluye excavaciones, estudios de cerámica, análisis de restos humanos y otros artefactos encontrados en el área.

Los arqueólogos y expertos continúan investigando las ciudades Upano para determinar su extensión, función exacta y relación con otras culturas de la Amazonía. Esto incluye excavaciones, estudios de cerámica, análisis de restos humanos y otros artefactos encontrados en el área. Pero, hasta el momento, podía decirse dos cosas sobre este punto: un centro urbanos y un centro religioso.

Dos mitos puestos en cuestión

Este descubrimiento desafía la percepción occidental tradicional de las civilizaciones amazónicas, mostrando que la región no solo albergaba a cazadores-recolectores, sino también a poblaciones urbanas complejas. Rostain insta a reconsiderar las opiniones despectivas sobre la Amazonía y a reconocer su rica historia y diversidad cultural

  1. No hay construcciones urbanas en la selva.

Uno de los principales elementos dentro de nuestra perspectiva clásica sobre la Amazonía es la ausencia de construcciones y un fuerte carácter nómade. El primer punto se argumentaba sobre la materialidad de los mismo, la ausencia de piedras como en los andes y de su proclive deterioro por las condiciones climáticas del entorno. Si bien vivir en un espacio como el amazónico de por sí representa una compleja hazaña en diversos sentidos, la presencia de construcciones siempre se ha considerado un elemento central para caracterizar culturas como complejas gracias al uso del espacio y del entorno. Los grupos amazónicos si bien nómades en muchos sentidos, llevaban a cabo esta estrategia en espacios no tan grandes. Por lo cual, se puede asumir como un tipo de aprovechamiento pleno del espacio. Ahora, con este descubrimiento, podemos indicar entonces que en las sociedades amazónicas coexistían ambos tipos de mecanismos de asentamiento, elevando incluso más la complejidad de estos grupos y su interacción con el espacio.

2. No hay intercambio fluido entre andes y Amazonía

Ahora bien, ya establecidas las ideas del sedentarismo y del nomadismo complejo, otro punto que entra en cuestión es la relación entre Andes y Amazonía. Por lo general, se asumió que estos territorios no se relacionaron de manera frecuente o, en todo caso, y como el relato inicial presenta, con desencuentros más que con relaciones fluidas. El descubrimiento de las ciudades Upano demuestra de una manera fehaciente las ideas actuales en arqueología: la interacción era fluida. Basta con revisar la iconografía Chavín y la zona donde esta tiene lugar. La vertiente oriental de la cordillera de los Andes por el río Huancabamba se ha destacado como la zona con la menor altura para pasar de la Amazonía hacia la sierra y la costa. Dicha situación se ve reforzada como los vínculos con Chavín y su iconografía de guacamayos, felinos y reptiles amazónicos. Por lo tanto, podemos indicar, junto a Peter Kaulike, que las imágenes Chavín no eran la evocación de un pasado mitológico, sino muestra de un intercambio fuerte por estas rutas. Sobre ello, las ciudades Upano representan otro punto central por cerrar, de alguna manera, un esfera de interacción cultural con fuertes vestigios arqueológicos.