El Comercio comenta hoy en su página principal:
“Lo que ocurrió con la red telefónica durante el terremoto el 15 de agosto fue que se saturó y no que colapsó, según el articulista científico Tomás Unger, quien plantea hacer una red paralela, independiente y no conectada a la red comercial, para evitar que los servicios básicos de comunicación se interrumpan.”
Estoy de acuerdo en que todas las redes telefónicas se congestionaron. Ahora, el gobierno ha creado por decreto supremo, el Sistema de Comunicaciones en Situaciones de Emergencia que debe operar dentro de la red de telecomunicaciones de servicio público, y también dice que este sistema es independiente de las redes de emergencia y seguridad que deberá establecer el INDECI (Instituto Nacional de Defensa Civil) y el Ministerio de Defensa, por lo tanto, ya estamos hablando de dos redes, una dentro de la red pública y otra paralela, por lo que parecería no hay novedad en la propuesta del Sr. Unger.
Tecnológicamente, es posible desplegar una red de emergencia dentro de la red pública de servicios sin interrumpir los servicios básicos, como ya he comentado anteriormente.
Artículo del Sr. Tomás Unger de El Comercio >> Sobrecarga y saturación de las redes
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