Muchos nos preguntamos, por qué un operador tendría que migrar sus centrales TDM a redes IMS, si desde el punto de vista de usuario aún no se han desplegado masivamente nuevas funcionalidades que le generen mayores ingresos, además de los inconvenientes que se han encontrado para integrar redes IMS de distintos fabricantes.

Sin embargo, la implementación de soluciones IMS (basadas en IP), además de la convergencia, tiene ventajas para un operador como: reducir y/o eliminar el riesgo operativo de mantener centrales TDM sin soporte, sin repuestos e incluso obsoletas; reducciones de espacio y gastos operativos; así como, generarle importantes reducciones de consumo de energía con el considerable impacto ambiental por la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2).
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