Archivo por meses: julio 2013

La nueva tirania por derrotar, la ‘miedocracia’

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Lo pasado en estos dias en nuestro pais, es una muestra de lo que la gente de “a pie”, en el Perú y en el Mundo esta haciendo con éste orden de “estados de miedo” que se han impuesto, respondiendo con su indignación a sus clases dirigentes, sistemas politicos y economicos, probadamente fracazados y esteriles en llevar progreso y bienestar a las mayorias, no se puede tolerar la corrupcion, no se puede tolerar la repartija de poder y no se puede dejar de pronunciarse en todas sus formas.

No me he tragado mi colera a la dictadura fujimorista derechista, para vomitarsela al gobierno nacionalista de izquierda. Pero no se puede ser impasible, hoy lunes 22 de julio a las 6 PM esta convocada una marcha masiva para decirle NUNCA MAS, a esa clase dirigente que persiste en las practicas tradicionales excluyentes, que deben ser erradicadas si queremos un futuro mejor. Es hora de dejar atraz esta “mediocracia”, de la indiferencia y “alpinchismo” (sobre sus consecuencias [1], [2]), MOVILIZATE.

[1]: http://www.homohominisacrares.net/php/articulos.php?num_revista=16&cod_articulo=137

[2]: http://manologo.wordpress.com/2009/12/13/el-alpinchismo-debe-terminar/

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El derecho al matrimonio para TODOS

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Vengo de leer el editorial [1] de Le Nouvel Observateur, revista francesa, del 25 de abril al 01 de mayo, de Laurent Joffrin, anexo algunos fragmentos relevantes, en cuya traducción he buscando transmitir el sentido del mensaje, para promover una discusion ausente en nuestro pais. Escribo esto, buscando expiar mi actitud de cuando fuí uno más de los “machos que se respetan”, ofendiendo a los homosexuales con mis bromas, sorna o indiferencia.

“Los que se oponen al matrimonio homosexual (en Francia) está luchando, no por promover una demanda, sino para evitar el acceso de este derecho al cual nostros tenemos (los heterosexuales). Esta actitud recae totalemente en la definición de intolerancia…”

Podría entender las objeciones, debemos aceptar las críticas. El matrimonio homosexual es una novedad histórica que contradice una tradición inmemorial,…,se tuvo que escuchar las objeciones presentadas de buena fe por aquellos que están preocupados o temen por la salud psicológica de los niños de estas nuevas parejas (la de los homosexuales). Las creencias religiosas o tradicionales son respetablesel debate se llevó a cabo. Todo el mundo fue capaz de presentar sus argumentos, enfrentarse a sus miedos y esperanzas. El proyecto de ley fue aprobado, votado como el más regular del mundo.... La nueva disposición no va a cambiar la vida de la inmensa mayoría de los francesessu pareja o su matrimonio.”

Los manifestantes aducen el colapso de la civilización por culpa de los homosexuales, … se burlan de la inteligencia cuando declaran esto, llaman a esto una amenaza de cambios antropológicos. Los dos más famosos antropólogos franceses Maurice Godelier y Françoise Héritier, …,nos han recordado que las estructuras familiares son diferentes dependiendo de la sociedad y que pueden evolucionar sin provocar la regresiónpaises como Noruega, Brasil, Islandia, Portugal y España, estos últimos países eminentemente católicos, ya han aprobado el matrimonio homosexual, ¿dan muestra del colapso de su estructura social familiar por la ley aprobada?…obviamente noEsta creencia no se basa en nada racional. Se invoca a la naturaleza, pero la naturaleza no fundamenta la ley. Todo lo contrario somos civilizados sometiendo nuestra naturaleza a la ley.”

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Finalmente me quedo con algunos fragmentos del discurso de Christiane Taubira, Ministra de Justicia de Francia, al finalizar la sesión del Congreso de dicho pais, en que fue aprobado la Ley del Matrimonio para Todos [2], en Francia.

“Éste es sin duda un texto generoso, …, quiero dirigirme a aquellos que han sido heridos en los últimos días por las palabras, los gestos y las acciones, …, simplemente les digo que tienen su lugar en la sociedad, con sus misterios, sus talentos, sus defectos, sus cualidades, sus debilidades, y que está, es tambien una singularidad de cualquiera, de cada uno de nosotros, independientemente de toda cuestión sexual. Cada uno de nosotros es único…”.

[1]: http://tempsreel.nouvelobs.com/laurent-joffrin/20130424.OBS6831/la-manif-pour-tous-contre-le-droit-des-autres.html

[2]: http://www.presse.justice.gouv.fr/archives-discours-10093/archives-des-discours-de-2013-12529/vote-solennel-du-projet-de-loi-mariage-pour-tous-25504.html

 

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La Oración de la Rana 20

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No hay otro mundo más que éste. Pero hay distintas formas de mirarlo, desde “tí”, desde “mí” y desde “nosotros”.

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En la antigua India había un rey, llamado Janaka, que además era un sabio. Un día estaba Janaka durmiendo la siesta en su cama cubierta de flores mIentras sus sirvientes le abanicaban y sus soldados montaban guardia ante su puerta. Cuando estaba quedándose dormido, tuvo un sueño en el que un rey vecino le derrotaba en una batalla le hacía prisionero y le torturaba. En el momento en
que la tortura iba a comenzar. Janaka se despertó sobresaltado y se vio en su lecho de flores, con los sirvientes abanicándole y los soldados haciendo guardia Volvió a quedarse dormido ya tener el mismo sueño. Y nuevamente se despertó y comprobó que estaba confortablemente a salvo en su palacio. Entonces comenzó un pensamiento a rondar insistentemente la cabeza de Janaka mientras estaba dormido. el mundo de sus sueños le había parecido perfectamente real: y ahora que estaba despierto, le parecía igualmente real el mundo de los sentidos. Quería saber cuál de aquellos dos mundos era el verdaderamente real.

Ninguno de los filósofos, sabios y videntes a los que consultó fue capaz de darle una respuesta y estuvo muchos años buscándola  inútilmente, hasta que un día llamó a la puerta de su palacio un hombre llamado “Ashtavakra” que significa «totalmente deforme» o «encorvado». Y que precisamente llevaba ese nombre porque era así de nacimiento. Al principio, el rey era un tanto reacio a tomarse en serio a aquel hombre: “¿Cómo puede un hombre tan deforme como tú poseer la sabiduría que les ha sido negada a mis videntes y a mis sabios”, le preguntó. «Desde mi más tierna infancia», le replicó Ashtavakra, «se me han cerrado todos los caminos: por eso he seguido ávidamente la senda de la sabiduría» «Habla, pues», dijo el rey.
Y he aquí lo que dijo Ashtavakra «Oh rey, ni el estado de vigilia ni el estado de sueño son reales. Cuando estás despierto, el mundo de los sueños no existe: y cuando duermes, lo que no existe es el mundo de los sentidos. Por eso ninguno de ellos es real», «Pero si tanto el estado de vigilia como el estado de sueño son irreales, entonces ¿qué es real?», preguntó el rey. «Hay un estado además de esos dos. Descúbrelo. Es el único real.»

Los que no han alcanzado la iluminación se consideran despiertos y, en su locura, llaman buenas a unas personas y malas a otras, alegres a unos acontecimientos y tristes a otros. Los verdaderamente despiertos ya no están a merced de la vida y la muerte, del crecimiento y la decadencia, del éxito y el fracaso, de la pobreza y la riqueza, del honor y el deshonor. Para ellos, ni siquiera el hambre, la sed, el calor y el frío, que experimentan como algo transitorio en el río de la vida, duran indefinidamente. Han llegado a darse cuenta de que nunca es necesario cambiar lo que ven, sino tan sólo la forma en que lo ven.  Y así llegan a asumir la cualidad del agua, que es suave y manejable y, a la vez, de una fuerza irresistible: que no se esfuerza y, sin embargo, beneficia a todos los seres. Gracias a su acción desinteresada, otros son transformados; gracias a su desprendimiento, el mundo entero prospera; gracias a su ausencia de codicia, otros no sufren daño alguno. El agua es extraída del río para regar los campos. Al agua le da absolutamente lo mismo estar presente en el río o en los campos. Así es como los que han alcanzado la iluminación actúan y viven apacible e  intensamente de acuerdo con su destino. Son ellos los únicos que se convierten en los enemigos implacables de la sociedad, la cual odia la flexibilidad y ama la reglamentación, el orden y la rutina, la ortodoxia y la conformidad.

Autor: Anthony de Mello, La Oración de la Rana.

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