El estudio de la Música de Oriente, se encuentra enmarcado dentro de la Etnomusicología, especialidad que aborda la música de los distintos pueblos del mundo no solo desde el ámbito musical, sino que también, y al considerarla como un fenómeno social, desde el contexto en que es creada, interpretada y percibida. Este interés por los aspectos culturales y la función social que rodean a las diversas manifestaciones musicales, hace que el trabajo de la etnomusicología requiera un enfoque multidisciplinario en el que se contemplen aspectos antropológicos, históricos, sociológicos, lingüísticos, geográficos, etc., además de los musicales.
Si bien inicialmente este campo era cubierto, en cierta medida, por lo que se conocía como Musicología Comparada, recién a partir de 1950 el término etnomusicología fue acuñado por Jaap Kunst. La etnomusicología a diferencia de la musicología comparada, que centro su estudio principalmente en la música folklórica, ha abarcado como objeto de investigación, a todas la formas de música tradicional, llámese folklórica, aborigen, religiosa, y clásica, así como a la música popular.
Estas formas o géneros musicales no siempre muestran diferencias claras entre si, sin embargo con fines metodológicos y didácticos se los puede definir de la siguiente manera:
Música aborigen (o étnica).- aquella que corresponde a una comunidad que se desenvuelve con muy poco contacto o totalmente al margen de la civilización predominante que la circunda. El aprendizaje de la música es básicamente empírico, y su transmisión oral.