Percusión ritmo de luna
La calma se acuesta con ropa de calle,
Madre, he salido ha ver por mi cuenta
Los colores del estío,
Y Se ajó la sonrisa
Y los ojos se llenaron de mar
Madre, soy un apostador de promesas,
Las orillo a puntadas, las maquillo.
Ahora en las mañanas
La neblina se mete por los poros
Y no hay un rastro tuyo
que ilumine que acompañe,
Porque las horas se han sentado a morir contigo
Y somos ahora recuerdos de lonches
risas
sueños.