Te extraño al fumar solo
y recurro a sentir tu presencia
en la rebelión del pensamiento,
Las voces son las tuyas,
reprochando o perdonando siempre,
juego a que existe el futuro
y a diario veo en tu recuerdo
una esperanza.
Canto con tus sentidos
confundo al tiempo y te espero,
en un dolor de sabores tiernos,
en la legaña de un mendigo
que frente al mar empezò a volar.
pienso en ti, costumbre vana,
llèvame
al cielo que escapa de su azul,
al paraíso artificial y sus precios a pagar.