Laberinto inùtil, el infinito
corriendo entre sus huestes.
Caminos circulares,
hojas verdes.
envueltos en el oscuro
nudo de ataduras
cavilan sobre
còmo volvì a la ciencia
experimento.
no vale nada pensar en uno,
sì en dos.
cuando acabe el dìa
recuèrdame salir herido
algo de sangre en el pecho
estarà bien
para volver siempre
a partir
a donde Martìn es.
Tan inquieta es la noche
que no se conforma con el dìa.