Por el alcance de los cursos que dicto, en la primera clase me gusta empezar revisando las principales estadísticas del mercado de telecomunicaciones nacional -elaboradas a partir de la información proporcionada por el portal de Osiptel-, y repasamos básicamente lo referente a la telefonía fija, celular y de acceso a Internet; y en el caso de móviles, también presento estadísticas del mercado internacional.
Considero que antes de revisar propiamente los aspectos técnicos de las redes en estudio, los alumnos tienen que conocer cuáles son las tendencias actuales del mercado de tal forma que estén convencidos que lo que van a aprender guarda una estrecha relación entre lo que propone el sillabus del curso y lo que realmente se mueve afuera del claustro.
Esta semana, “El Comercio” publicó un interesante artículo que resume lo que viene aconteciendo solamente con el crecimiento del mercado de telefonía celular y fija en nuestro país, y que coincidentemente presenta varias conclusiones que revisamos en clase el semestre pasado.
“El Comercio” >> El 65% de los peruanos ya cuenta con teléfono celular
Según estadísticas del OSIPTEL
El 65% de los peruanos ya cuenta con teléfono celular
En telefonía fija, sólo el 10% de los ciudadanos cuenta con un equipo
La aguerrida pugna entre Movitar y Claro por liderar el segmento de telefonía móvil en el país ha permitido que se sigan superando las metas de expansión de este servicio. Así, durante el último Día del Padre se logró superar la barrera de los 18 millones de usuarios móviles en todo el país y todo parece indicar que, de mantenerse el ritmo de crecimiento actual, a fin de año se superarán los 20 millones de clientes.
Al respecto, con el actual nivel de equipos de servicio, estadísticamente 65 de cada 100 peruanos cuenta con uno y esto permite que el Perú esté cada vez más cerca del promedio regional. Según un estudio de DN Consultores, al primer trimestre de este año, la penetración promedio en la región era de 69 equipos por cada 100 habitantes, estando el Perú en niveles muy cercanos a México y Brasil. De no ser por Argentina, Uruguay, El Salvador y Panamá, que están muy cerca del 100%, el Perú estaría entre los líderes regionales.
Hora de las provincias
El rápido crecimiento de la telefonía móvil, a diferencia del pasado, ya no es liderado por el volumen de ventas de equipos en la capital. De los 2.7 millones de nuevas líneas vendidas en el primer semestre de este año, sólo el 38% se comercializó en Lima. Este porcentaje, sin embargo, permitió que Lima superara el 100% de penetración móvil (estadísticamente todos los limeños deberían tener un celular y algunos de ellos, más de uno).
En las provincias, las que más crecieron fueron Amazonas y San Martín, al incrementar en 40% y 42% respectivamente sus líneas en servicio en solo seis meses. Estos porcentajes permitirían inferir que en el año dichas regiones podrían incluso duplicar su densidad móvil. A pesar de tales tasas de crecimiento, estas no son las regiones con mayor penetración. Producto de la necesidad que el comercio genera en la zona, es Tacna la región que más personas con celular tiene después de la capital. Así, con 96 de cada 100 personas con un celular, Tacna está cerca de tener una cobertura total. En penetración móvil, detrás de la Ciudad Heroica se ubican Arequipa (87%), Moquegua (83%) e Ica (75%), y según las operadoras, el próximo año podrían unirse aTacna y Lima con cobertura de 100%.
¿Y la telefonía fija?
El crecimiento de la telefonía móvil, sin embargo, contrasta con el de la fija. Si bien esta ha seguido incrementando, el número de líneas instaladas apenas llega a cubrir el 10% de los habitantes. Y es evidente la concentración de líneas en la capital.
Eso sí, se espera que mejore un poco más este indicador, pues MoviStar y Claro proyectan instalar casi un millón de teléfonos fijos inalámbricos en el interior del país antes de finalizar el 2,009.
Fuente: “El Comercio” – 13/08/2008
quien va a querer un telefono fijo si con el mantenimiento que cobra telefonica es muy caro, no que el gobierno lo iba a eliminar todo quedó en palabras nomás