El Premio Nobel de Economía Paul Krugman en una reciente entrevista, en México, nos recuerda que los gobiernos, los banqueros y demás tiburones de la economía global no han aprendido nada de la última crisis financiera.

Aquellos que causaron la crisis continúan con sus viejas y riesgosas prácticas en busca del mayor lucro posible, sin considerar las consecuencias que entrañan sus, nada claras, maniobras. Pues total, quien pagó el costo de la crisis financiera fueron los millones de contribuyentes del pueblo norteamericano y europeo, para salvar a los gigantes de las finanzas.

¿Quién dijo que no hay lonche gratis?, eso es cierto para las familias que quedaron en default y fueron despojadas de sus casas, eso es cierto para los trabajadores que perdieron sus empleos luego del impacto de la crisis financiera sobre el mercado real, eso sólo es verdad para las personas de a pie que perdieron sus sueños. Muy por el contrario, los grandes bancos y especuladores ya voltearon la página y continúan hoy día haciendo negocios multimillonarios.

De otra parte, Paul Krugman, aunque con limitaciones, reconoce la gran decepción que ha representado Barack Obama como presidente de los Estados Unidos, lo que ha sido penalizado en las urnas. Cuando se le pregunta si eso se debe a su tendencia de izquierda, Krugman bromea diciendo que : “la política de financiar a los grandes bancos es completamente marxista”. Con ello el Premio Nobel deja en claro que Obama significa la continuidad de la política dirigida por los “señores de traje de Wall Street”.

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