Humberto maturana y Vignolo centran su conversar en relación a las citas y referencias y opinan lo siguiente:
Vignolo:
Dado ello, ¿te parece esta, la de “hablar desde nosotros mismos”, que a mí siempre me resulta muy atractiva, una opción válida para responder a la invitación que nos hacen los editores de esta revista?
Maturana
Pienso que sí, porque lo que revela el hablar desde uno mismo es que uno no está diciendo lo que está diciendo con una fundamentación ajena a la aceptación que uno tenga de lo que dice.
O sea, puede ser que otra persona haya dicho una cosa parecida, pero cuando tú lo dices, eres tú el que se ha hecho dueño de eso. Esto es, hablas desde ti y, por lo tanto, lo que tú dices te compromete, y te revela, y eso es, creo yo, lo que da confianza a quien escucha.
Al mismo tiempo es posible que el que escucha se queje de que no hay muchas referencias a otros autores, pero
yo pienso que uno no tiene que hacer referencia a otro autor a menos que lo vaya a traer a la palestra como un argumento, ya sea para apoyar lo que uno dice, ya sea para objetar lo que otro dice, haciéndose uno en el acto responsable de lo que dice. Si ninguna de estas dos condiciones se aplica, basta con hablar desde sí mismo.
Y tu que opinas?
En nuestra tradición al realizar cualquier trabajo intelectual, como una tesis o un libro o un articulo; hacer citas y referencias dicen es necesario hacerlas porque las ideas pertenecen a alguien …. ¿Donde esta el fundamento? ¿tienen dueño las ideas si estas emergen desde uno..? creo que esto es consecuencia de la cultura que vivimos sustentada en la emoción de apropiación.
La cultura en la que estamos sumergidos basada en la emoción de la apropiación, la lucha, la dominación, … nos empobrece y nos ciega frente a lo humano.