La respuesta del Tribunal Constitucional (TC), a través de su presidente, Oscar Urviola, con respecto a las declaraciones del Presidente de la República, de que el TC se inhiba de emitir sentencias sobre “temas sensibles”, porque están a un paso de dejar el cargo, no se hizo esperar. Urviola, le respondió aclarándole cuales son las funciones del TC y las responsabilidades de los miembros que la integran. Agregó, además,  que el TC no está en función a los gustos del Presidente.

En mi opinión, el presidente del TC, Oscar Urviola, tiene razón cuando le recuerda al Presidente que el TC es una entidad autónoma administradora de justicia… sin embargo, hay que tener en cuenta dos cosas: primero, los miembros del TC tienen un poder ilegítimo (aunque eso es involuntario a ellos, ya que el Congreso no ha elegido a los nuevos miembros), porque su periodo legal a terminado. Segundo, si bien es cierto que los intereses colectivos están por encima de los intereses personales, hay que tener en cuenta que la ética profesional y personal, a mi parecer, están por encima de todos los intereses. En consecuencia, ante la ineficiencia de los congresistas para elegir a los nuevos miembros del TC, es aceptada la renuncia por caducidad de funciones, como lo hizo  Ricardo Beaumont, y que los demás miembros también estaban en la obligación de hacerlo.

Por último, Oscar Urviola debe entender que hay “temas sensibles” que el TC debe tomar con pinzas antes de emitir un fallo, pues no es saludable ni mucho menos ético apresurarse a tomar decisiones importantes cuando están a días de ser reemplazados…

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