Publicado en la Revista El Torreón, edición 155, meses mayo – junio del 2010.
Revista informativa del Departamento de Amazonas.
Señor(a) candidato(a):
A pocos meses de celebrarse los comicios municipales y regionales para elegir democráticamente a las personas que tendrán la obligación de generar bienestar y progreso a nuestros pueblos, desde el cargo al cual hoy aspiran, quiero expresarle en estos cortos párrafos lo siguiente:
Los Amazonenses queremos candidatos(as) consecuentes con lo que dicen y con lo que hacen, es decir, que su campaña electoral no sea simplemente demagógica, que plasme en hechos toda su elocuencia candidatezca una vez alcanzado el objetivo. Asimismo, para lograr el objetivo, hágalo debatiendo con argumentos claros propios de su futura gestión, sin ataques personales ni mucho menos familiares. Tenga en cuenta que el proceso electoral no es una riña personal donde todos pueden sacar provecho de la situación ni tampoco es una guerra intelectual de saco y corbata. Este es un proceso democrático donde las propuestas y proyectos, los cuales se resumen en un Plan de Trabajo, deben ser los que determinen su ‘victoria’ después de ser expuestos a los jueces de esta contienda: los ciudadanos.
En esta etapa electoral –corta por cierto– dé lo mejor de sí: muéstrese como persona antes que como candidato; exponga a la población sus capacidades, no sólo en temas políticos o de gestión, sino humana: revalore al amazonense como persona y contribuya para que cada uno vuelva a creer en sí mismo. Construya su Plan de Trabajo con ofrecimientos que puedan realizarse, que favorezca al menos a la mayoría y en lo posible que sea autosostenible, no piense tanto en obras que puedan cubrir necesidades inmediatas, sino trabaje más en función a proyectos, ya que estos han demostrado en el tiempo –corto, mediano o largo– tener un impacto más favorable en la población.
Tenga en cuenta que los amazonenses y los peruanos en general estamos cansados de ver como muchas autoridades se llenan los bolsillos con dineros que le pertenecen al pueblo, que su gestión sea para servir y no para servirse de él. De lograr la meta, trate en lo posible de no ejercer el nepotismo de ninguna índole. Preocúpese por hacer una gestión colaborativa y de inclusión que involucre a la población, y no se cierre en hacer una política autocrática o feudal.
Los amazonenses no sólo queremos candidatos(as) de balcón ni mucho menos autoridades de sillón. Antes que un(a) jefe(a) demandamos un(a) líder (lideresa), con criterio para decidir y actitud para actuar, pero a la vez honesto(a). Buscamos en Usted una política democrática, innovadora y horizontal abierta a la población; que abarque los temas sociales: salud, educación, alimentación, seguridad, medio ambiente, responsabilidad social, etcétera desde una gestión apoyada en cuatro pilares: responsabilidad, honestidad, transparencia y justicia, sin que ello signifique descuidar el tema económico: proteger y fortalecer a la micro empresa, y en general fomentar la cultura empresarial sostenible.
En consecuencia, como candidato(a) que es, solicite nuestro voto después de demostrarnos y convencernos de que su propuesta es la mejor alternativa de cambio y desarrollo responsable y de bienestar sostenido, y no pierda su tiempo en tratar de comprar nuestra conciencia y dignidad con regalos o monedas aprovechando la humildad del amazonense, porque la necesidad de la gente no se compra ni se vente, se la defiende. Sepa que la grandeza de los hombres se mide con la humildad de sus hechos. Entienda que el futuro de su distrito, provincia o región vive en el tipo de gestión que Usted, señor(a) candidato(a), ejecutará.
Finalmente, recuerde que quienes le darán el ‘poder’ –por su propuesta, en teoría, la mejor– tendrán aún más ‘poder’ para quitárselo si no cumple con lo ofrecido.
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