A pesar de algunos avances, logros, cambios de pensamientos y comportamientos, aún es difícil creer que el tema de género es un tema fácil que va cambiando rápidamente hacia la equidad. Más del 65% de limeños, según encuesta del Instituto de Opinión Pública de la PUCP (descargar archivo), considera que nuestra sociedad es machista. Percepción y cifra que no ha variado desde hace cuatro años. Así mismo, más del 30% de limeñas dice haberse sentido discriminada por ser mujer. Cifra que tampoco ha cambiado en cuatro años de sondeo.
Pero a la vez, más del 50% de encuestados cree que hay igualdad de oportunidades para un mujer, de
conseguir empleo, de ganar un buen salario, asumir un cargo público y de acceder a una buena educación.
Este es un tema difícil de medir, en donde la línea entre lo que debe decirse y lo que es, puede ser muy
tenue.
El Instituto de Opinión Pública de la PUCP, aprovechando esta importante fecha del año, como es el Día Internacional de la Mujer, busca aportar datos, percepciones y análisis sobre este importante tema, intentando dar a conocer, en donde se deben sumar más esfuerzos en búsqueda de una verdadera equidad.
Junto a las cifras encontradas, importantes y reconocidos comentaristas conocedores del tema, nos aportan sus ideas y análisis. Lea usted aquí lo que opinan: Ana María Yañez, Carmela Vildoso y Pilar Aguilar, miembros de nuestra comunidad PUCP.
Archivos adjuntos
2010 MARZO GENERO LIMA.pdf
Que hacer, y que repensar!
Si un 64% de percepción según el IOP sobre la igualdad de posibilidades en el acceso a cargos públicos tiene un significado mezquino por parte de un sector de la academia feminista peruana, entonces la ruta progresista e incremental de la participación política de la mujer se ve desalentada en un contexto pre electoral del Perú que urge la participación de candidaturas de peruan@s con madera o con pasta política (political timber), es decir, con convicciones definidas y capacitad@s moral, profesional y psicológicamente. No solo los precedentes (modelos) en la práctica de mujeres políticas– que en el Perú son aun ínfimos y no del todo felices diría yo-, señalizan la escalera política (political ladder) de las mujeres en su ascenso a puestos de toma de decisiones. El discurso de las elites también IMPORTA, y mucho. La academia (sobre todo la feminista) tiene en sus manos la posibilidad de abrirle más puertas en un ámbito preponderantemente masculino como es la política. La reivindicación no “debe ser” solo a través de una critica con tónica negativa que vea los infortunios de la mujer en política sino por medio de un discurso positivo y optimista que promueva y no obstaculice. Esta ruta se viabilizaría si el modelo de representación de nuestras mujeres en política mejorara, y creo que este ya no es el momento solo de discutir en función a cantidad sino de hacerlo a través de la variable CALIDAD.
Personalmente considero que este problema no es solo en Perú, esto también lo vivimos en gran parte de latinoamerica, pienso que si queremos arrasar con la inequidad, debemos empezar a mirarnos a nosotros mismos y cambiar si somos machistas o si permitimos el machismo, porque muchos hombres dicen no ser machistas pero a la vez permite actos contra la mujer sin intervenir.
Un saludo.