Durante las festividades de Navidad, Año Nuevo y hasta el fin de las vacaciones entre diciembre y enero, hay mucho ajetreo en la mayor parte de los hogares, son semanas de mucho consumo, compras, preparativos, comidas copiosas en familia, decoración navideña y religiosa. Para las personas es tiempo de celebración con su familia, aunque los animales domésticos son ajenos a las tradiciones, no les pasará inadvertido que algo inusual sucede por estas fechas y que no pasa el resto del año.
Los animales domésticos sentirán curiosidad por la decoración asi como la comida en la mesa, además pueden alterarse con los ruidos, villancicos, estallidos por lanzamientos pirotécnicos, movimiento de muchas personas. Existen algunas medidas de precaución que podamos tomar para hacer estas festividades más felices tanto para nosotros como para las mascotas. Cuidados para gatos en Navidad
Hay que preparar un lugar en el hogar para que nuestro felino pueda refugiarse si se siente abrumado por el movimiento de gente en la casa, los ruidos, los villancicos y para que tenga un lugar donde al menos tengamos por seguro que no se meterá en lios. Un dormitorio donde no pase mucha gente será ideal, dejaremos su cama, su plato de agua y alimento, además de la bandeja de arena por si acaso y algunos juguetes o una prenda de ropa de alguna persona con quién tenga vínculo.
Hay que vigilar la puerta de casa y cualquier forma que tenga el gato de escapar, cada vez que recibamos un invitado debemos asegurarnos que el gato no deambula cerca, para que no se escape al exterior, es conveniente no dejarlo salir ya que durante estas fechas se tiran fuegos artificiales, petardos y otros elementos de pirotecnia que pueden no solo quemarlo o herirlo, sino asustarlo y desorientarlo. Muchos gatos comienzan a correr tratando de huir del ruido, perdiendose luego.
Aunque pueda parecer cruel, lo ideal seria dejar a los gatos con los que convivamos en una habitación con juguetes, cama, agua y alimento, ir a ver cada tanto si todo está en orden, solamente estará encerrado durante unas horas y es posible que no note aburrimiento o ansiedad de escapar porque podrá descansar. Cuanto menos ruido le llegue es mejor, porque habrá fuertes ruidos tanto del exterior como en casa y eso es molesto y altera a los gatos que no saben de donde vienen los estallidos o el bullicio.
Si vamos a salir y el gato pasará algunas horas solo, no dejarlo del todo a oscuras salvo si está durmiendo, dejarle una caja de cartón grande con papeles recortados de prensa así podrán refugiarse allí si se asustan por los fuegos artificiales. Otra opción es dejarles una cama tipo cueva donde puedan meterse y servirles de refugio además de lugar de descanso.
La comida es especialmente clave, recordemos que un buen pienso de gama alta o una latita que les guste a los gatos es un buen premio y no es necesario compartir la cena de nochebuena, comida de navidad o cualquier tipo de aperitivo, y nada de dulces ni acceso a bebidas alcohólicas. Es muy peligroso que el gato pueda en un descuido probar comida excesivamente condimentada, lamer licores, probar chocolate o dulces presentes en la mesa, porque puede sufrir desde una indigestión hasta un final totalmente trágico por intoxicación.
Algunos cambios en la decoración como el árbol de navidad y todos sus adornos, o el belén, pueden llamar poderosamente la atención y como buenos gatos irán a olfatear y ver de que se trata. Algunos gatos curiosos y glotones literalmente intentan comerse las guirnaldas, esto es peligroso porque son de plástico, no pueden digerirlas corriendo el riesgo de terminar como una obstrucción en el intestino. El árbol tiene que estar sujeto de modo que si algún gato tratase de trepar no pueda tirarlo armando un buen estropicio, igualmente hay que vigilar los regalos, empaquetados, cables, enchufes y la comida para los camellos de los Reyes Magos de Oriente. Una idea es dar unas gotas de vinagre a las luces decorativas para evitar que los gatos puedan morderlas.
Es importante participar y compartir la Navidad con nuestros gatitos, no dejandoles aislados, pero a la vez ser realistas con los posibles peligros que pueden existir para ellos y cosas que los humanos quizá no nos damos cuenta hasta que observamos lo que sucede. Si todo va bien y los felinos no hacen ninguna trastada en casa podemos hacerles un regalo, algún juguete, comida especial que sea una excepción dentro de una dieta mayoritariamente de croquetas de pienso seco, un rascador nuevo con niveles… aunque para ellos lo que más notarán son los mimos y las atenciones durante estos dias tan movidos.
Cuidados para perros en Navidad
En perros machos o hembras en celo, cada vez que recibamos un invitado debemos asegurarnos que el perro no deambula cerca con nerviosismo o ansiedad de salir a correr para que no se escape al exterior, es conveniente no dejarlo salir porque como ya mencionamos durante estas fechas se tiran fuegos artificiales, petardos y otros elementos de pirotecnia que pueden no solo quemarlo o herirlo, sino asustarlo y desorientarlo. Muchos perros comienzan a correr tratando de huir del ruido, perdiendose luego, lamentablemente también podrian cruzarse con individuos sin buenas intenciones hacia los animales. Cuanto menos ruido le llegue al perro es mejor, porque habrá fuertes ruidos tanto del exterior como en casa y eso es molesto y altera a los perros por no saber de donde vienen los estallidos o el bullicio.
Un buen pienso de gama alta, latas con comida húmeda que le guste al perro es un buen premio y no es necesario compartir la cena de nochebuena, comida de navidad o cualquier tipo de aperitivo, y nada de dulces ni acceso a bebidas alcohólicas. Es muy peligroso que un perro pueda en un descuido probar comida excesivamente condimentada, lamer licores o bebidas alcohólicas, el perro no debe poder comer chocolate o dulces presentes en la mesa, porque puede sufrir desde una indigestión hasta un final totalmente trágico por intoxicación o coma. El perro debe tener su comedero con su comida y un bebedero con agua fresquita, para evitar problemas durante el movimiento de invitados, es conveniente tener en cuenta que el perro deberia haber salido a pasear por la mañana para no tener ansiedad de ejercicio por la tarde y valorar si el perro tiene un carácter tolerante con extraños según su socialización, raza canina y factores que conozcan unicamente los dueños.
Algunos cambios en la decoración como el árbol de navidad y todos sus adornos, o el belén, pueden llamar poderosamente la atención e incluso el perro podria tratar de beberse el agua de la maceta. Es importante compartir la Navidad con nuestros perros, no dejandoles aislados, pero a la vez ser realistas con los posibles peligros que pueden existir para ellos y cosas que los humanos quizá no nos damos cuenta hasta que observamos lo que sucede. Si todo va bien podemos hacerles un regalo, algún juguete, comida especial que sea una excepción dentro de una dieta mayoritariamente de croquetas de pienso seco, disfraces, ropa de abrigo, caseta nueva… aunque para ellos lo que más notarán son los mimos y las atenciones durante estos dias tan movidos.
Consejos para los perros
Hay que tener paciencia con los dueños durante este tiempo. Ellos pueden estar más estresados que lo usual y apreciarán largas demostraciones de cariño, autocontrol y calma, las personas de la casa vendrán con grandes bolsas de cosas que llamarán regalos. No asumas que todos los regalos son tuyos. Sé tolerante si tus dueños te disfrazan, los líderes de la manada sienten un tipo especial de placer al vernos vestidos de esa forma y es su manera de compartir las costumbres.
Ellos traerán un árbol grande en la casa y lo cubrirán con luces y adornos. No orines el árbol de navidad. No bebas el agua del recipiente que sostiene el árbol. Ten cuidado con tu cola cuando estés cerca del árbol. Si hay paquetes abajo del árbol, aún aquellos que tengan un olor interesante o que tengan tu nombre, no los muerdas. No mastiques el cordón que corre desde el agujero en la pared hasta el árbol. Tus dueños ocasionalmente invitarán un montón de extraños durante esta época. Estas fiestas pueden ser de mucha diversión, pero también requieren de un poco de discreción por tu parte: No todos los extraños aprecian los besos y los saltos. No comas de la mesa. Sé agradable aunque los extraños se sienten en tu sofá. No tomes de los vasos que hayan sido dejados fuera de tu alcance. Tolera a los niños y enciende tu encanto por largo tiempo.
Un hombre grande con una barba blanca y una risa muy fuerte puede aparecer de la chimenea en el medio de la noche. Igualmente, semanas después pueden llegar tres hombres montados en camellos. No los muerdas.
Navidad, una de las peores épocas del año para adoptar o comprar un perro
Aunque muchos perros están pasando frio en perreras y en refugios de asociaciones protectoras de animales, no es esta la mejor época de adopciones, porque muchas personas regalan animales de compañia por capricho pasajero. La decisión familiar de tener un perro sólo la debe tomar un adulto, capaz de responsabilizarse del animal y de comprometerse con los cuidados requeridos. Por capricho de un niño no se puede comprar un perro, sino que hay que estar predispuesto a cumplir con todos los cuidados que se avecinan. Al niño, se le puede acabar la ilusión si hay imprevistos, si el perro no es un compañero de juegos como pensaba, si se le castiga y se le delega la culpa por descuidar al animal. Complacerle puede costar a la familia muchos disgustos porque en ese momento sólo se piensa en las cosas buenas que implica, y no en las malas. Además debe darse la condición de que al menos una de las personas adultas quiera al perro pase lo que pase tras traerlo al hogar.
Regalar perros en fechas señaladas es un error. Sólo hay que comprarlo o adoptarlo, cuando el perro buscado se encuentra disponible al verlo en la perrera, en un refugio para animales o si se busca una raza, en un criador. Es importante elegir en función del tamaño del animal, del espacio en la casa, los cuidados derivados de las caracteristicas del perro y del tipo de actividad de la persona. Si queremos un animal de compañía para una persona mayor, lo más adecuado es uno de tamaño pequeño o mediano, que sólo necesite dar un pequeño paseo diario. Por el contrario, si queremos un compañero para hacer ejercicio, que nos acompañe a correr o realizar otro tipo de deporte, nos decantaremos por un perro de tamaño mediano a grande y mucha necesidad de ejercicio, perros de trabajo, cobro, pastores.
Un perro es un amigo y un compromiso de muchos años de vida, necesita tiempo, afecto, buen cuidado, deporte y devolverá el cariño multiplicado.
Otras mascotas
Las precauciones suelen ir más dirigidas a los animales domésticos más activos y que pueden interactuar más con las personas o estar en riesgo, mascotas como aves, tortugas, animales exóticos, roedores como los hamsters no suelen tener tanto peligro porque no tienen un espacio libre tan importante en la casa como perros y gatos ni suelen poder acceder a comidas dañinas. La unica excepción son los conejos, muy aficionados a roer hasta los cables, algo bastante peligroso igual que los restos de comidas, lo ideal seria que si tenemos un conejo como mascota, tenga un lugar en una parcela o patio con un parque cerrado, comida de sobra, agua y algo de espacio para entretenerse pero no dejarlo nunca en casa, sobretodo por el lio que se monta en Navidad, entre personas, comida, decoración.
FUENTE: http://www.mordisquitos.org/noticias/45-consejos/1124-atenciones-para-mascotas-en-navidad.html