Hola soy BAYSER, el 21/10/07 me perdí, y de mi casa que está ubicada en la Castellana-Surco, fui a dar a Barranco de tanto caminar. El 22/10/07 en la noche me encontró Ana Sofía, ella me puso el nombre de Otto ya que no tenía placa ni como identificarme; desde esa fecha mi vida cambió, no volví a saber de mi familia, pero llegué a una nueva casa en donde felizmente me trataron bien, me dieron comida y mucho amor.
Encontré una amiguita bóxer llamada Khatthalinna la cual se puso muy celosa al verme ya que ella era la única engreída en la casa, pero con el transcurrir de los días nos hicimos amigos. ¡CLARO DESPUES DE UNAS CUANTAS DISCUSIONES Y GRUÑIDOS PERRUNOS! JA, JA, pero así comenzó todo. Conforme pasaron los días me comía toda la comida que encontraba a mi paso, incluidos unos riquísimos bistecs que mi nueva familia tenía preparados un día para el almuerzo; la pobre Khattha se adelgazó y yo engordé como un rey; me pusieron a dieta, que horror.
Después de 2 meses, el 27 de Diciembre del 2007 ¡OH FATALIDAD! vino por mi una familia que parecía la “IDEAL” , me adoptaron pero no me quisieron nada, no me dejaron ser libre como estaba acostumbrado y saben qué es lo peor “extrañar a alguien y no poderla ver”. Felizmente mi angelito de la guarda me ayudó, pues esa familia me devolvió el pasado 28 de Enero del 2008; Ana Sofía fue a recogerme con su mamá y me volví loco de alegría al verlas, pensé que era un sueño bonito después de la pesadilla que viví por 30 días, porque me trataban como “perro” y no como un miembro de la familia.
¡Ohhh! ¡Qué puedo hacer!!! Mi amiguita Khattha está en celo y ustedes saben, mis hormonas se alteraron y por ese motivo el 30 de Enero del 2008 me operaron ¡USTEDES YA SABEN, ADIOS DESCENDENCIA! Ja,ja, “PERO NO LO CUENTEN, AH, “ porque igual soy bien macho. Ese día fue horrible, no pude ni pararme por los efectos de la anestesia pero ya me recuperé, tomé mis medicinas y ahora estoy como nuevo, super feliz porque estoy libre y me quieren mucho.
Hoy, 11 de Febrero del 2008, ha sido para mi un gran día, pues por el aviso que pusieron en un periódico el día de ayer mis padres Maritza y Carlos, Ana Sofía ha podido ubicarlos, ya que los llamó por teléfono y vinieron desde Punta Negra a ver si realmente era yo; efectivamente no se equivocaron, cuando los vi casi muero de felicidad, ellos lloraron de contento y nuestro reencuentro fue muy emocionante y emotivo… Aunque estoy feliz, no crean que me voy a olvidar de las amistades que he hecho aquí, les estoy muy agradecido al igual que mi familia, porque con ellos encontré un segundo hogar donde recibí el amor que tanto necesitaba, ya que no estaba con mi mamá que es una labradora negra ¡bien guapa! Ah, y les cuento que, por coincidencia, mi papá se llama Otto, que es el nombre que me pusieron acá.
Muchas gracias y recuerden que cada uno de nosotros somos seres de Dios y si alguna vez nos encuentran perdidos, ayúdenos como lo hicieron conmigo.
Aquí termina mi historia con un final feliz pues me he reencontrado con mi familia, guau, guau, guau…”la esperanza nunca se pierde”, “es de cobardes maltratar a un animal”.
Gracias, su amigo
BAYSER (OTTO)