En los momentos en que Motorola venía desarrollando con fuerza el negocio de WiMAX con Sprint-Nextel en Estados Unidos, anuncia su decisión de dividir la compañía en dos, una de las cuales se llamaría Motorola Mobile Devices que se dedicaría a los equipos móviles y la otra Motorola Enterprise Mobility para proveer soluciones de banda ancha y de movilidad.
Los principales detonantes de la escisión de Motorola, que además determinó el despido de 7,500 empleados en el 2,007 son: la pérdida de US$ 1,200 millones de la unidad de terminales móviles (los ingresos de esta unidad representan el 50% del total de la compañía), la caída del valor de la acción en 45% en el último año, y su pérdida de participación en el mercado de los teléfonos móviles ante Nokia y Samsung cayendo del segundo al tercer lugar. Sigue leyendo