DOCUMENTALES
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Si queremos entender la explosión de religión politizada, globalización postcomunista y economía liberal que ha caracterizado nuestra era moderna, olvidémonos de 1968. Incluso de 1989. La fecha más importante de todas es 1979. Aquel año comenzó un extraordinario capítulo en los asuntos internacionales –y la historia intelectual–, obra del grupo más extraño de autores que pueda imaginarse.
El G20, próximo a celebrar otra reunión en Pittsburgh los días 24 y 25 de septiembre, se define e interpreta de distintas formas. Su significado en política internacional todavía debe determinarse y por lo tanto el Grupo está sujeto a interpretaciones diversas.
El Grupo se ha situado a la vanguardia en el diseño de medidas para rescatar a la economía global de la recesión. Pero no todas son buenas noticias. Quedan algunas cuestiones claves para analizar, y probablemente modificar, con el fin de evitar dañar la idea de multilateralismo y gobernanza global. En este Policy Brief de Laura Tedesco y Richard Youngs, se señala que el G20 debe demostrar que no es un nuevo foro con viejos vicios. Asimismo, es crucial que sea evidente que no persigue “más de lo mismo”, con la única diferencia importante de haber invitado a nuevos socios.
Conozca el escenario político de los principales países de la región que realizarán elecciones dentro de los próximos dos años.
Luego de tres décadas de guerra contra las drogas, los resultados han sido limitados: las hectáreas de coca cultivadas no se han reducido, los impactos negativos en términos ambientales son altos y América Latina ha visto un aumento del consumo. De hecho, ha pasado de ser una región de producción y tránsito a una de consumo. A todo esto se suma el incremento sostenido de la violencia, que muchos atribuyen de manera directa a las drogas.