Si pensamos que la violencia es un continuo que amenaza de manera permanente la vida de las mujeres peruanas bajo diferentes manifestaciones como la violencia de pareja, el acoso sexual callejero, el acoso sexual en el ámbito educativo, el hostigamiento sexual laboral, el acoso político, y un largo etcétera., podríamos pensar que el derecho a la vida y a la integridad es el que puede ser más vulnerado. Sin embargo, esta percepción no es la que corresponde a nuestra idiosincrasia. Veamos algunas cifras recogidas en la II Encuesta Nacional de Derechos Humanos[1].
Los resultados de esta encuesta nos permiten conocer las principales percepciones de la ciudadanía frente a la protección de los derechos humanos en el Perú. Al respecto resulta interesante comparar la percepción sobre los derechos que a los(as) peruanos y peruanas les importan más, y comparar la percepción que se tiene sobre los derechos que se perciben como menos respetados para el caso de las mujeres (Fig. 1 y 2). Continuar leyendo