Semana Santa, Semana Tranca…
Cristo, es un personaje histórico, más allá de apreciaciones religiosas. Muere en la cruz, por haberse convertido en un peligro para el poder romano, pues tenía mucho arraigo popular, hablaba de solidaridad, de justicia, no le simpatizaban los ricos, etc.
Evidentemente, no necesariamente hay que creer o tener fe en Dios (“Fe significa no querer saber la verdad.”, según Fiedrich Nietzsche), para utilizar estos días de feriados, para reflexionar acerca de la vida en general, del cambio climático, de las guerras, del hambre, de la corrupción a todo nivel, de la doble moral imperante y descubriremos, entonces, que vivimos tiempos en los cuales poca gente reflexiona acerca de sus actos, o acciones colectivas, debido, fundamentalmente, a la pluralidad de actividades que desarrollamos, con el fin de responder al desafío de sobrevivir dignamente y en muchos casos, de huir de la realidad, al típico estilo del avestruz.
Por supuesto, también podemos usar estos días para divertirnos junto a nuestros seres queridos, o tal vez, siendo esta opción muy importante, solidaria y concreta con la comunidad, dedicarle tiempo a personas desvalidas, en estos supuestos días espirituales, el tiempo libre nos puede ofrecer muchas oportunidades.
¿Porqué entonces, creer solo en lo que plantea la Iglesia Católica? ¿Porqué creer en gente que nos habla de solidaridad, cuando el Vaticano es muy rico y muchos niños mueren de hambre alrededor del mundo? ¿La Iglesia no está para ayudar?, de modo que, ante esto, aprovecho para vincular a Dios con la Iglesia, dado que está lo utiliza como paradigma y me pregunto, ¿debemos creer en Dios? En el supuesto que exista ¿podemos aceptar que Dios permita la pobreza, las guerras, la corrupción, los abusos de todo tipo?. Por ahí, me han respondido: -“eso no es culpa de Dios, es culpa del ser humano, tenemos libre albedrío”; entonces pregunto: ¿puede Dios, ser tan poderoso y ser tan cruel para permitir eso? ¿Sólo es magnífico para lo bueno y no existe para lo malo, no participa a favor o en contra? ¿Qué culpa tiene un niño indefenso de sus desgracias?, pareciera que Dios, en estos y otros muchos casos, como decía Atahualpa Yupanqui, “que Dios vela por los pobres, tal vez si o tal vez no, pero es seguro que almuerza en la mesa del patrón”.
Las críticas anteriores, no significan que opino en contra de todos los miembros de la Iglesia. Por supuesto que existió -y existe- gente valiosa, que ayuda a sus comunidades, gente como Oscar Arnulfo Romero en San Salvador, (hace unos días se le recordó, por haber transcurrido 30 años de su asesinato) o, sin ir lejos, aquí en Perú, curas que viven y trabajan en circunstancias muy complicadas y no viven en lugares exclusivos, ni andan en autos de lujo.
Estos ejemplos, demuestran lo valedero de la consecuencia con el pensamiento de Cristo y con la vigencia del mismo, pero sustancialmente, nos invita a reflexionar y a actuar en función del mensaje del nazareno. Esto último, sí, estimo, le daría valor al recuerdo del gran hombre que nos legó el ejemplo de los que, no sólo piensan, sino realizan lo que pregonan.
Giancarlo Brizuela
Me parece que eres injusto, buscando culpable de lo que sucede, y en tu articulo no veo tu aporte para ver que se puede Hacer. Piensa y actua. no seas uno mas del monto que solo se pregunta porque, ¿Dios permite tantas cosa?… Y ese queda parado a ver que le responden, quiere que te diga algo, La respuesta la tienes tu mismo, buscala en ti. no en los demas. Y que Dios te Bendiga.
Hola Eli:
Respeto todos los comentarios, de los creyentes y de los no creyentes, es un una obligación ser tolerante en el campo de las ideas, pero modestamente te digo que creo que no leíste bien mi artículo.
Saludos cordiales.
Apreciado Giancarlo,
Todas esas cuestiones que te planteas son muy humanas. También las compartimos los creyentes y, como bien dices, confiamos en el testimonio del nazareno, en que su sentido de la vida salva el mundo de tanta injusticia. Si admiras a Cristo (y me consta que sí), analiza las motivaciones más hondas de su acción, y verás que detrás está el amor a/de Dios…
Otra cosa es que, como bien sabes, somos limitados, y todos los filósofos del mundo se han hecho las mismas preguntas. Un creyente sólo sabe que, actuando como Jesús, se hallan respuestas.
Por lo demás, de acuerdo en que no todos los creyentes actuamos siempre como tales, aunque hablemos en nombre de Dios o de la Iglesia… pero Cristo amó su Iglesia, aun sabiendo que entre los más cercanos contaba también con traidores.
He descubierto tu blog buscando una imagen de Cristo. Gracias, es muy bonita.
A tu disposición desde España. También tengo blog: manzanasmiles.blogspot.com
Un abrazo.
Estimado Juanan:
Gracias por vuestro comentario, tendré en cuenta su Blog. El gráfico de Cristo no es de mi autoría, al igual que Ud. la encontré en internet y no coloqué el autor porque no figuraba, para ser honesto.
Saludos Cordiales y un abrazo a la distancia.
Estoy de acuerdo contigo. Debemos reflexionar y actuar. Mucha accion mas allá de la reflexion.
El planeta esta hasta la madre de todo lo que hace el mismo hombre. Nosotros solos nos hacemos daño. Dios no castiga. Nosotros nos lo hacemos. Unos chingando a otros. Y los muchos solo observamos. Reitero. Hay que actuar.
Invito a que se sumen al movimiento mexicano Juventud en Libertad. Agreguennos en el facebook.
Empiezo diciendo que la religión es el opio del pueblo, sin embargo más que la religión en si es el fanatismo y fanáticos lo que degenera una fe religiosa en atraso en diversos aspectos de las sociedades e individuos.