Nuestra amada universidad nos brinda un bonito sistema/servicio de correo (e-mail).

Durante nuestra época en estudios generales era la vía más rápida para enterarnos de nuestras notas desde nuestra casa, o sea en el campus porque allí vivíamos. También utilizábamos el servicio de alojamiento tipo FTP, aunque lo más frecuente era enviar y responder emails a personas que más conocíamos por su código de alumno, por eso era bueno también agregarlo con nombrecito en el PINE de los módulos.

Todo era alegría y felicidad hasta que… te conocí… perdón… hasta que llego el spam (correo basura) y llegó para quedarse y estar cada vez más presente en nuestras bandejas de entrada. Inbox y spam están hoy más cerca de ser sinónimos dentro de nuestro sistema de correo.

La intención de este post es para concientizar a los encargados de este sistema, tal vez conmover su corazón para que pongan manos a la obra. Aunque estuve tentado a optar por otras acciones como las que me sugirió el internet:

Ellos firman así:

comentarios a: di-consulta@pucp.edu.pe
Oficina de Soporte Informático
Dirección de Informática

Nos vemos amiwitus