No me acuerdo cómo así, siendo niño, había escuchado el nombre de la película “Trenes rigurosamente vigilados” del director checo Jirí Menzel, basado en el libro del también checo Bohumil Hrabal. Pasados los años descubrí esta pequeña novela de Hrabal que está ambientada en la ocupación nazi en la segunda guerra mundial, que transcurre en la resistencia de un pequeño pueblo checoslovaco, alrededor de la estación de tren.
La novela de Hrabal relata la vida del joven Milos Hrma, quien trabaja en la estación de trenes local junto con al mujeriego Hubicka, el jefe de estación Zednicek, y la bella Zdenka. Zednicek les encarga la misión de proteger ciertos trenes estratégicos, importantes para los planes del último tramo de la guerra por parte de Hitler en Europa central.
Pequeña novela que combina el drama de la guerra en medio de una divertida historia en la que no falta el erotismo y el amor que, con tanta destreza, narra el célebre novelista checo.
Bohumil Hrabal nació en Moravia el 28 de marzo de 1914. Estudió Derecho en la Universidad Carolina de Praga, pero recién en 1963 publicó su primer libro “Alondras en el alambre”. En 1964 publicó su obra más conocida “Trenes rigurosamente vigilados” y “Clases de baile para adultos y alumnos aventajados”. Durante los años setenta, Hrabal por su adherirse a la «Anticarta» en la Primavera de Praga, es expulsado de la Asociación de Escritores Checos y retirándose su obra de librerías y bibliotecas. Murió el 3 de febrero de 1997, a los 83 años, en la ciudad de Praga. “Trenes rigurosamente vigilados” es una novela que debe ser leída.