Luego de tres meses de edición y coincidiendo paradójicamente con el primer aniversario del canal 9, los directivos de esa empresa han clausurado en forma sorpresiva el buen programa periodístico Documento.
Sorpresivo, reiteramos, porque a lo largo de estas catorce semanas que estuvo en el aire, Documento fue ganando sintonía progresivamente. Competía en buena forma con el buen programa Visión y el oficialista Panorama, que tiene la ventaja de transmitirse en el canal de mayor influencia. Competencia que nos parerecía absurda en tanto se transmitía a la misma hora, porque salvo el interés empresarial, al grueso público televidente le era totalmente molesto cambiar de canal continuamente por la calidad de los reportajes que se pasaban en los dos primeros programas nombrados.
Documento, conformado por un equipo joven dirigido por Fernando Ampuero, demostró una vez más que hay gente capaz en nuestro medio periodístico y de comunicación que puede hacer un programa de calidad. Con rigurosa objetividad, buena cámara y novedosa edición, Documento se convirtión en un espacio obligado los domingos para aquel interesado en la actualidad nacional y cultural. Es fácil recordar los buenos pasajes de la entrevista a Sábato, los reportajes en Chile y Ecuador, los del paro nacional tanto en Lima como en el Cusco, los referidos a las manifestaciones estudiantiles y barriales, las notas llamadas de color local sobre las computadoras y los niños, los bañistas de Agua Dulce, así como las denuncias contra las empresas urbanizadoras y las CPV ¿Por qué los directivos del canal deciden entonces clausurar un programa que los prestigiaba y era superior al resto de sus programas vivos?
La respueta va más allá del disgusto por los dos reportajes-denuncias del domingo anterior por parte de los directivos del canal y de manera especial de Carlos Tizón. Este personaje para muchos desconocido, es muy allegado a la familia gobernante y mantiene especial amistad con el presidente Belaúnde. Hasta aquí ninguna novedad, salvo que el señor Tizón fue el responsable de la campaña electoral de Acción Popular en mayo del 80 reconociéndosele posteriormente su interesada colaboración, pues ha ganado un sinnúmero de licitaciones públicas por intermedio de sus empresas constructoras y otras inversiones.
Como muchos empresarios, en los últimos años ha incursionado en los medios de comunicación y de manera especial en la televisión. Él lo hizo en el canal 9, para lo cual utilizó a algunos testaferros como accionistas, sin aparecer legalmente como el principal inversionista del canal. La influencia de un medio tan poderoso como la televisión se consigue por sus programas de actualidad, esto es noticieros y revistas político-culturales. Por eso, el canal 9 produce tanto el noticiero como Documento, con la condición de ser apología de nuestros gobernantes y mostrar respaldo ciudadano, objetivo plenamente cumplido con el priemer caso. En el caso de Documento la cosa fue distinta, ellos prefirieron y defendieron su independencia periodística porque saben perfectamente que la noticia, reportaje, la entrevista siempre es cuestionadora y devela en más de un vez que en nuestro país es tocar la llaga.
Tizón no suspende el programa sólo por los reportajes del último programa cuyo caso no le afecta directamente, lo hace porque conforme avance el calendario electoral los intereses en juego son muchos, especialmente en lo que atañe a sus intereses, para la cual Documento es un obstáculo en su estrategia de acomodo político. Tizón prefiere utilizar el método de cortar de raíz pronto dicho programa, antes que adquiriera mayor audiencia y sea más difícil amordazarlos o clausurarlo.
Tizón quizá consiga ahora un testaferro periodístico para que entone la música oficial, pero difícilmente tendrá calidad e independencia de Documento. Por todo esoto nuestro rechazo a esta medida arbitraria y nuestra solidaridad con el equipo de Documento que esperamos pueda reaparecer en otro canal.
(El Observador 19 de Abril de 1984)