(Entrevista Expreso, lunes 6 de octubre del 2014). Para el analista político Fernando Tuesta, la frustrada descentralización en el país también genera problemas de malos candidatos y pugnas por el poder, lo que lleva a la violencia que, por ejemplo, se ha visto en esta campaña electoral. “Hay falta de control político institucional”, advierte.
–Doctor, vemos que esta campaña ha estado manchada por hechos delictivos y de violencia, vinculados a propios candidatos. ¿A qué se debe esto?
Hay muchas irregularidades que ya habíamos visto. Vale decir, debilidad de los partidos para presentar candidaturas nacionales, muchos recursos en gobiernos regionales y municipios, dispersión de las candidaturas, falta de control político institucional. Esta debilidad institucional abre las puertas a poderes fácticos, sobre todo ilegales, que con chantaje, presión, recursos, quieren ganar el poder, que cada vez es más apetitoso.
–¿Cómo podemos hacer frente a esto?
Esto no se resuelve de un día para otro, esto no es tan sencillo. Hay que dar unos avances, la reforma política se impone.
–Esta reforma ya está en el Congreso…
Lamentablemente el Congreso no ha discutido nada relevante, y por ejemplo ha dejado la propuesta de los organismos electorales de discutir, por ejemplo, la modificación de la Ley de Partidos, la Ley de Revocatoria, que son propuestas pensadas, sustentadas, para lamentablemente dedicarse a discutir algunos cambios que no van a ir al fondo del tema.
–¿Cree que el tema de la mala descentralización del país también tiene que ver con esto?
También, porque esto ha creado lo siguiente: grandes recursos transferentes y sin ni siquiera haberse creado regiones. Las regiones eran la fisión de más o dos departamentos contiguos y eso se frustró en el referéndum del año 2005.
Ahí tenemos un grave problema, además en medio del crecimiento económico. Todas estas circunstancias están creando o han creado situaciones que hoy día lamentamos pero son consecuencia de situaciones que también ya se habían llamado a la atención.
–Según lo que usted me dice, ¿una solución a largo plazo está en manos del Parlamento nacional?
Bueno, los partidos, los líderes también tienen que hacer su parte, pero también, efectivamente, esto pasa por el Congreso. Lamentablemente un Congreso disperso, de bancadas fraccionadas, nivel también lamentable de muchos que ni siquiera entienden la necesidad de la reforma, hacen pues esto muy complicado. Yo creo que la idea de la reforma está ganando seguidores, y hay que seguir, tenemos que sacar lecciones de esto, no se puede quedar simplemente en lamentarnos de lo que está sucediendo.