Para un país con altos índices de delincuencia y narcotráfico, fuerzas policiales mal pagadas bajo la autoridad de un Ministerio, como el del Interior, que cobija diversas mafias que coexisten por mucho tiempo, la designación en julio del 2006 de Pilar Mazzetti, era un riesgo y un reto.
Su renuncia y la llegada de Luis Alva Castro, ex vicepresidente del primer gobierno aprista (1985-1990) han despertado no pocas preocupaciones en una salida a una mini crisis. Pilar Mazzetti, tuvo un destacado paso por el Ministerio de Salud al término del gobierno de Toledo, en donde llegó a enfrentarse incluso a sectores conservadores, como el Opus Dei, por la Píldora del Día Siguiente. Su calidad de eficiente, independiente y mujer en un Gabinete que sumaron seis, no fue suficiente para afrontar un Ministerio complicado y del que carecía de experiencia. Una licitación cuestionada en donde estaba involucrada la empresa de capitales chilenos Gildemeister, terminó por acabar con un período ministerial lleno de tropiezos y que puede traer cola.
Contra la defensa cerrada de la ex ministra, la propia empresa ha reconocido irregularidades de una licitación que terminaron con el despido del propio gerente general de la empresa. La situación se complica pues dicha empresa habría sido beneficiada en otra licitación en el Ministerio de Salud, anterior cartera de Mazzetti. No solo eso, el mismo funcionario despedido ha declarado que prestó movilidad para la campaña electoral de Ollanta Humala que, sin embargo, no habría sido consignada en la documentación de los gastos de campaña presentados por su agrupación política. La salida de la Mazzetti , no solo la deja maltratada en una situación que pudo evitar con una renuncia previa, sino que abre el camino al ascenso de Luis Alva Castro un hombre muy identificado con el partido de Haya de la Torre , pero que si bien ha prometido combatir la corrupción en el Ministerio del Interior, no podrá cumplir si se carece de una real voluntad política. Sin embargo, para muchos el ingreso de más apristas al Gabinete no es lo mejor para un gobierno sin mayoría parlamentaria y por la mala experiencia que muchos miembros de dicho partido han dejado en su paso por la administración pública. Peor aun, suena como eco las palabras de Agustín Mantilla, ex Ministro del Interior del primer gobierno aprista, que purgó cárcel por haber recibido dinero de Vladimiro Montesinos, quien declaró hace algunos meses que la militancia aprista tanga paciencia que el acceso al aparato del Estado vendrán con los meses.
Mantilla, expulsado del APRA, pero que sigue teniendo audiencia al interior del aparato partidario y pareciera aun con contactos con sectores de la policía, a las pocas horas de la juramentación de Alva Castro, apareció públicamente para ofrecer asesoría en el sector del interior. Si bien dicho ofrecimiento no ha sido aceptado, su presencia deja un manto de duda, pues se trata de un personaje sinuoso de la política peruana. Por eso, sale de la crisis rápidamente nombrando al reemplazo de la Mazzetti, no es muy claro el rumbo del Ministerio del Interior, clave en la lucha contra la delincuencia, principal problema que señalan los peruanos en los sondeos.
(Infolatam, 4 de marzo del 2007)
QUIENES ADMIRAMOS A ESTA GRAN NEUROLOGA SABEMOS LO CORRECTA QUE ES. QUE PENA NOS DA QUE ESTE GOBIERNO NO LA APOYE, PUES ELLA HUBIESE HECHO MUCHO POR ESE MINISTERIO QUE CADA DÍA ESTA DE MAL EN PEOR, MAS AÚN TENIENDO A UN MINISTRO TAN CORRUPTO COMO EL QUE TIENE. PERO QUIENES CONOCEMOS A LA DOCTORA MAZZETTI EN PARTE NOS ALEGRAMOS QUE AYA SALIDO DE ESTE GOBIERNO CORRUPTO, Y QUE REGRESE A ATENDER A SUS MULTIPLES PACIENTES QUE LA ESPERAMOS CON LOS BRAZOS ABIERTOS. BIEN VENIDA DOCTORA