Biomas terrestres: son aquellos que se encuentran en la tierra y poseen abundancia de vegetación. Varían según el clima, la vegetación predominante y su ubicación (Figura 2.17), lo que determina la interacción lluvia – temperatura, entre ellos:
- Tundra
- Desierto
- Taiga
- Selva Tropical
- Chaparral
- Pastizales
- Sabanas
- Bosques templados
- Bosques templados lluviosos
Biomas acuáticos: La mayor proporción de la biosfera está formada por ambientes acuáticos. Las características propias del agua le confieren propiedades comunes a los ecosistemas acuáticos. Tienen temperaturas mas o menos moderadas. El agua absorbe gran cantidad de luz, sin embargo, a mayor profundidad, la intensidad de la luz es cada vez menor. Así por ejemplo a 200 m o más, llega muy poca luz, lo que impide que se realice la fotosíntesis. Las partículas en suspensión y los microorganismos presentes también afectan la intensidad de la luz en las profundidades. Los biomas acuáticos se subdividen en dos categorías:
Biomas de agua dulce: son aquellos que se encuentran en el agua dulce. La profundidad del agua, así como la temperatura determinará lo que vive allí. Si el agua se mueve o si está estancada también es algo que se toma en consideración. En esta categoría se incluyen lagos, ríos, arroyos, lagunas y humedales. Los biomas de agua dulce cubren 1/5 del planeta y son vitales para nuestra supervivencia.
En los ríos el agua está en continuo movimiento. El tipo de seres vivos está determinado, en gran medida, por la velocidad de la corriente. Por su parte los lagos son de tamaños variados, en ellos se distinguen tres zonas, la litoral (donde se desarrollan plantas), la de agua abierta (rica en plancton) y la profunda (no hay vida vegetal pero si algunos peces).
Los humedales incluyen pantanos y ciénagas. Pueden ser de diversos tamaños. Algunos son grandes y profundos, otros tienen nada más que unos pocos metros de agua en un lugar determinado.
Biomas marinos: contienen agua salada en vez de agua dulce, también se incluyen los arrecifes de coral y los estuarios. Los océanos cubren casi ¾ partes de la superficie terrestre, inclusive hay vida en la zonas más profundas. En las superiores se alojan los organismos fotosintetizadores. La mayor parte es oscura y fría, habitada por seres que se han adaptado a tales condiciones. Según la profundidad se determinan diferentes biomas marinos en base a la cantidad de luz y presión.
Los arrecifes de coral, a pesar de que se encuentran en el océano, ambos son entidades separadas. Un bioma de arrecife de coral se encuentra en una zona poco profunda de agua clara en el océano, su temperatura se encuentra entre 21 a 27 °C.
Los estuarios son cuerpos de agua donde la desembocadura de un río se abre al mar, con una salinidad entre dulce y salada. En ellos existe un gran intercambio de materiales como el agua, la salinidad, los nutrientes, los sedimentos y los organismos vivos.