El estudio de las mezclas gaseosas tiene tanta importancia como el de los gases puros. Por ejemplo, el aire seco es una mezcla de 78,1 % (en volumen) de nitrógeno, N2; 20,9 % de oxígeno, O2; y 0,9 % de argón, Ar; el 0,1 % restante es principalmente dióxido de carbono, CO2. Las mezclas de gases son sumamente importantes en la industria, por ejemplo, aquellas en las que se requiere O2 o N2, usan directamente el aire.