Las condiciones sociales, económicas y políticas de nuestros países requieren de los desarrollos académicos de investigación, docencia y servicio que programas de posgrado como el mencionado han venido realizando en beneficio de nuestra región. En la misma línea de las voces que se han pronunciado, consideramos que la desaparición de la Maestría como recurso de investigación y formación profesional sería lamentable, no solamente para Guatemala, sino para los demás países que comparten problemáticas similares y que aspiran de manera conjunta a crear y fortalecer redes que logren cada vez acercarse más a las condiciones de equidad y dignidad que como comunidad académica aspiramos para todos y todas.