TIERRA SECA
Tierra seca
atemoriza el recuerdo
agobiada sin la vaga compañía
charcas de placer en un arroyo
dolida calma de un adiós.
Abrazarla es aprisionar la soledad
trozos de mi cuerpo son cristales quebrados
excesivamente calmados
en la cima de un peña
contemplo la infértil ciudad.
En la quebrada vacía
quiero imaginar un verde follaje
correr sobre ella
revivir la maleza marchita
que triste observa el atardecer de sus días.
La lluvia empapa mi temor
enfría el calor de las aguas
el lago endurece
Mas la aurora se despierta
es la inquietud de sus cielos
miradas que hacen retroceder.
SOBRE EL LLANO
La querella inquietante de dos lágrimas
se pierden en el arenal
vuelan ráfagas de polvo en el triste cielo
la claridad de sus pupilas
me conducen al sórdido paraíso terrestre
y la calma osada de mis dudas
aniquila la infértil sensación de los sueños.
Decisión confusa entre las dunas
huellas de un pasado hostil
reflejan sombras sobre el llano
inquebrantable sensación
olvido de lo triste y lejano
Micaela