Un mujer de errantes ojos negros
me ha interrogado
¿Porqué eres tan feliz?
Intente responder sin éxito alguno
más no he podido dejar de pensar en ello
Yo me he interrogado 10 veces
y tal vez 5 más, sin encontrar la felicidad.
Mi alma aún negra se ríe cuando escribo
ríe porque sabe de mi soledad.
A callar, ya es hora, duerme en paz alma negra
mi catarsis ya esta cerca
Adió pueblo de Ayacucho, no he de volver jamás
24 febrero 2009
Versalia imitadora
Categoria: Poesía