En estos dias de aislamiento involuntario por una fractura que le debo a un bus irresponsable que no se detuvo completamente mientras me bajaba… en fin … no vale la pena hablar de ello… pero es maravilloso tener un poco de tiempo para leer un poco mas.
Gracias a todos por preocuparse por mi. Abrazo fuerteeee.
LOS HIJOS DEL DESBORDE POPULARLOS HIJOS DEL DESBORDE POPULAR
El Día de Todos los Santos fuimos a almorzar a un restaurante miraflorino. Ese día se había infiltrado el desborde popular, sin Matos Mar, por cierto, que bebía desde hacía rato en una mesa céntrica. Ignoro las razones que explican la ‘cabeza de pollo’ del desborde popular. Se emborrachan con simples chelas. Ya me quisiera imaginar cómo se comportarían con trago corto. Pero las chelas les saca a flote una bronca impresionante, una ira que todo miembro del desborde lleva dentro. Las versiones del desborde son el achorado, el informal de Gamarra, el comerciante de Mesa Redonda, el chofer de combi, el hincha de las tribunas populares. También puede ser el sicario de los narcoterroristas. Incluso, desde una perspectiva más generosa, podemos considerar a los ‘otorongos’ del 30%. Son los nuevos dueños del Perú –qué diría Carlos Malpica– y todo aquel que se les coloque al frente será tildado de “tía”, “señorón” o “viejo”, como me llamaron a mí. No entraré en detalles acerca de la bronca en el restaurante (pura lisura, por cierto, pero acabé, para que se hagan una idea, defendiéndome con una silla al más puro estilo del Lejano Oeste.
El desborde popular se ha convertido en mancha que va a todos lados; incluso se ha trasladado a Chile y Argentina. En un reciente documental chileno, podemos constatar que no le tienen mucha simpatía a ese tipo de inmigrante que, felizmente, no es el único. La conducta envalentonada, sin reglas mínimas de convivencia, los convierte en los más odiosos del continente. En Chile los detestan. ¿Y aquí? ¿Imagínense si el Perú se gobernara al estilo egoísta de Mesa Redonda, donde la vida no vale nada? ¿Si los dueños de los buses- camión fuesen los responsables del transporte? Más allá de los nacionalismos, si no los soportamos acá, por qué lo van a hacer en Santiago.
Argentina se ha convertido en el nuevo destino del tráfico de drogas. Es toda una red que propicia una nueva cara peruana en tierra gaucha. Una cara que no es detestada solamente por mear o comer en la calle, por vivir en la bullanga, sino por su vínculo con la delincuencia. Los pabellones de Lurigancho se parecen cada vez más a la Trinchera Norte y al Comando Sur (o viceversa), y estos a los choferes de las combis.
Pero no todo es negro, felizmente, en lo que respecta a los peruanos en el extranjero. Las autoridades francesas han anunciado que buscarán entre los técnicos peruanos al tipo de inmigrante deseado. Les abrirán las puertas a los genios, que los hay, a los esforzados estudiantes, tal como lo hacen ya los canadienses y los australianos. Y a nosotros nos dejarán la chauchilla. Y nadie sabrá para quién trabaja.
¡EXCELEEEEEEEEENTÍSISÍSIIIIIMO ARTÍCULO!
Ya era hora que alguien escribiera sobre esta pesadilla que es ver a nuestra sociedad peruana ahogarse en el mar de la inmundicia moral y ètica que sufrimos todos estos días , aproximadamente desde fines de los años ochentas del siglo veinte. Todos los días oímos como los muchachos se silban entre sí o simplemente se pasan la voz a gritos, importándole poco o nada a quien tiene al costado. Los "ajos" y "emes", por más que estén reconocidos por el diccionario de la Real Academia de la Lengua, son OFENSIVOS de por sí, y ahora hasta los niños de cinco años los usan. En la calle, si uno va vestido con discreción y elegancia, inmediatamente es tachado de (disculpen la frase) "marica" porque los demás muchachos dicen "ser hombres" (A ver, si son tan hombres, por qué no tienen el valor de cambiar este país). Hasta las muchachas ya están perdiendo su recato y discreción natural. Quieren ser "achoradas", pero no tienen el valor de darle su merecido al que quiere abusar de ellas, sino más bien se complace en irse a la cama con un pandillero, despreciando a los poquísimos chicos que quieren algo mejor que parecerse a un hampón. Los escupitajos o "pollos" casi forman ríos en las veredas de Lima, junto a los líquidos provenientes de las vejigas de borrachos y vagos (a propósito, en el último mensaje de 28 de julio de Alan García, éste se enorgullecía que el peruano está consumiendo más cerveza. ¿Y qué pena que un presidente se dedique a inaugurar estas fábricas de la droga que hoy ha EMBRUTECIDO al 95% de los peruanos, y TODOS los huaynos modernos como los de Abencia Meza o Sonia Morales no paran de referirse a la cerveza. ¿Es que creen que es la bebida de todos los peruanos?)
Los niños hoy día ya no son niños sino "seudoinfantes" ya que de ver, oír y bailar tanto "reggaeton" que provino de los barrios bajos de Puerto Rico, se parecen cada vez más a estos hampones del espectáculo: como si ser un "achorado" fuera la aspiración máxima de todos. Y mientras tanto nuestro país está dejando de ser nuestro, primero porque lo están vendiendo a los extranjeros y segundo, porque precisamente estamos tan drogados y embrutecidos con esta "cultura chicha" o "cultura de achorados" que no nos damos cuenta que hay otros, más vivos, que son los que se aprovechan de nuestra lumpenería. Estos son los MEDIOS DE COMUNOCACIÓN que tanto pidieron LIBERTAD y hoy nos dan LIBERTINAJE,bajo la forma de "cómicos ambulantes", "mil oficios", "gran sangre", bailes por un sueño", recargas de risa", "especiales del humor", "vedettes", concursos de "perreo" hasta para niños (sino vean lo que hace Panamericana Televisión con su programa TVeo del mediodía) "peloteros" y "comentaristas deportivos" que asesinan el lenguaje y no se comparan para nada con caballeros como don Humberto martínez Morosini o el finado Eduardo San Román…
En fin, si quisiera seguir, mejopr escribiera un libro, pero para finalizar, creo que aquí se podría comenzar a reparar el daño, eliminando todos los malos ejemplos que propician esta anomia moral y social. No creo que sea simple coincidencia el que junto con este auge del "mal comportamiento" de los peruanos (y aquí sí le doy TODA LA RAZÓN a los chilenos, porque estos peruanos nos avergüenzan en el extranjero) haya un espoantoso aumento de la delincuencia, especialmente entre la juventud. Y no son sólo robos, o asesinatos…también son violaciones sexuales. Ya dije que el peruano se cree "macho" pero es sólo una máscara.
Gracias por el artículo y le ruego que haga una campaña para rescatar lo bueno del alma peruana, que incluso se manifiesta en las capas más humildes, y para eliminar lo vergonzoso y brutal del comportamiento del peruano del siglo XXI.
"Por buena que sea la cuna, mejor es la crianza" (proverbio escocés)