En la experiencia diaria, en diversos contextos, todavía se suele escuchar términos como sordomudo, retraso mental, etc. Si bien el término discapacidad, en sí mismo, se está discutiendo en algunos medios académicos, el Clasificador Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud (CIF) lo mantiene vigente, según la Organización Mundial de la Salud (2001); dicho Clasificador constituye la última versión utilizada hoy en día y que sustituye al anterior documento denominado Clasificador Internacional de Deficiencias, Discapacidades y Minusvalías (CIDDM).
Al respecto, la Asociación Americana de Psicología (APA, 2010) sugiere ” ‘poner a la persona en primer lugar,’ seguida por la frase descriptiva” (p. 71), lo que significa colocar: personas con discapacidad auditiva, personas con discapacidad intelectual, etc.

Por otro lado, el término sordomudo no refleja la realidad de las personas con discapacidad auditiva, pues muchas de ellas son sordas y no mudas. Antiguamente se creía que la sordera llevaba inevitablemente al mutismo, sin embargo no siempre ha sido así, ellas podían y pueden expresarse a través de la lengua de señas o de la lengua oral o ambas. Por ello solo se les debe llamar personas sordas, así lo prefieren. Incluso van más allá, se definen desde sus posibilidades y no desde sus limitaciones, así en Delaporte (2002) encontramos la siguiente definición: Sujeto que percibe el mundo por los ojos, integra las informaciones recibidas en el cerebro que las difunde en todo el cuerpo, para luego restituirlas con las manos bajo la forma de signos; poseen otra lengua, hablan con las manos y son visuales.

Por último, en relación al término retraso mental, igualmente, ha sido revisado ampliamente, incluso el nombre de la organización anteriormente denominada Asociación sobre Retraso Mental (AAMR) ha sido modificado, llamándose actualmente Asociación Americana de Discapacidades Intelectuales y del Desarrollo (AAIDD) (Schalock et al., 2007).

Referencias
American Psychological Association. (2010). Manual de publicaciones de la American Psychological Association (3ª ed. Trad. M. Guerra Frías). México: El Manual Moderno.

Delaporte, I. (2002). Les sourds, c’est comme ça [Los sordos son así]. France: Éditions de la Maison des Sciences de l’homme, Paris.

Organización Mundial de la Salud (OMS) (2001). Clasificación Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud (CIF). Madrid, España: Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Secretaría General de Asuntos Sociales. Instituto de Migraciones y Servicios Sociales, IMSERSO.

Schalock, R., Luckasson, R., Shogren, K., Borthwick-Duffy, Sh., Bradley, V., Buntix, W. … Yeager, M. (2007). El Nuevo concepto de retraso mental: comprendiendo el cambio al término discapacidad intelectual (Trad. L. Gómez Sánchez). Siglo Cero. Revista Española sobre Discapacidad Intelectual, 38(4), 224, 5-20.